La Mujer Que Llevo En Mí, Resumen de la Novela

Introducción

A los inicios del parcial comenzamos a leer la novela Jane Eyre cuyo chai yo ya había leído cuando estaba en mis tiernos 11. Es un libro que te atrapa desde que lo empiezas a leer, ya que uno se puede identificar de mil maneras con Jane, y las emociones y pensamientos que han marcado con sus palabras que hicieron tantas y tan profundas que pensar en ocupar mi mente con una historia y unos personajes tan humana que resultaron totalmente imposible, no identificarse con ellos. La protagonista de la novela es Jane que es una pobre institutriz huérfana que sirve en una magnífica mansión victoriana, que eso le hace parecer que aspira más que su estatuto social y la física sencillez y oscuridad. Sobre todo a pesar de los estereotipos, ella aspira ante una fuerza de visión que puede sobrepasar estos límites.

Desarrollo

Jane Eyre es una mujer cuyo pasado fue muy duro para apenas contar con 18 años, eso no significa que eso la haya parado, ya que al salir de Gatehall se ve rodeada del amor que no le han podido conceder en su niñez a pesar de que su vida no ha sido de color rosa ella al salir del internado se convierte en alguien independiente económicamente, que lucha por ganar su propio dinero como los demás, al igual que es fuerte emocionalmente.

Romántico como todos ella ama y sufre por el amor y sigue viviendo su vida lo mejor que puede, sin llorar sus desdichas ni lamentarse, buscando siempre la salida, y, continuar hacia adelante. Lo que hace de Jane un personaje muy empoderado es su actitud sobre el romanticismo en esa época.

Conclusión

Para concluir me gustaría compartir mi sentimiento a Jane que ella no tiene miedo de cometer errores, ya que ella es impaciente, pero objetiva, franca y ferozmente independiente. Ella no aceptaba los regalos con los que la intentaba consentir Rochester y querer seguir trabajando como institutriz después de la boda para no depender de nadie. Además, ella expresa abiertamente sus opiniones son inadecuados para ese tiempo así como ella enfatiza Yo no soy un ángel, señor -aseguré-. Y no llegaré a serlo hasta que me muera. Soy solo yo… No busque en mí nada celestial, porque no lo hay; Como tampoco lo hay en usted, ni yo lo espero. La fuera que tiene ella al admitir que nunca será la mujer ideal eso me hace sentir que ser mujer es ser fuerte.

17 August 2021
close
Tu email

Haciendo clic en “Enviar”, estás de acuerdo con nuestros Términos de Servicio y  Estatutos de Privacidad. Te enviaremos ocasionalmente emails relacionados con tu cuenta.

close thanks-icon
¡Gracias!

Su muestra de ensayo ha sido enviada.

Ordenar ahora

Utilizamos cookies para brindarte la mejor experiencia posible. Al continuar, asumiremos que estás de acuerdo con nuestra política de cookies.