Abuso Fisico En Adultos Mayores
Introducción.
La vejez es una de las etapas más incomprendidas. Las personas que son consideradas adultos mayores tienen 60 años o más y son susceptibles a ser víctimas de abusos, debido a que, para otras personas, los adultos mayores están físicamente limitados para realizar diversas actividades. (Comisión Nacional de los Derechos Humanos, 2015). El presente trabajo aporta datos de la situación actual, los grupos subyacentes discriminadores y las herramientas legales nacionales e internacionales para proteger a los Adultos Mayores.
Desarrollo.
Magnitud del problema y situación actual. El maltrato a personas mayores es un problema importante de salud pública. Con base en un estudio de la OMS del 2017, durante el último año, alrededor del mundo, el 15.7% de las personas de 60 años o más fueron objeto de alguna forma de maltrato. Probablemente este porcentaje representa una subestimación, ya que solo se denuncia uno de cada 24 casos de maltrato a personas mayores, en parte porque estas últimas a menudo tienen miedo de notificar el maltrato a sus familiares, a sus amigos o a las autoridades. (Organización Mundial de la Salud)
Según la OMS, en el último año 1 de cada 6 personas mayores de 60 años sufrieron algún tipo de abuso en entornos comunitarios. Se menciona que hay grandes tasas de maltrato hacia las personas mayores en las instituciones como residencias de ancianos y centros de atención, pues se informa que 2 de cada 3 trabajadores, de estas instancias, han infligido malos tratos hacia las personas mayores. Este maltrato hacia los adultos mayores puede tener consecuencias tanto físicas como psicológicas.
Para el año 2018, se registró en la Encuesta Nacional de la Dinámica Demográfica, realizada por el INEGI, que en México residían 15.4 millones de personas en etapa de vejez, de las que un 11.04% viven solas, además de que el 41.4% son económicamente activas y el 69.4% de las que viven solas cuentan con discapacidad o limitaciones. Además, en México el 21.7% de los adultos mayores que trabajan y viven solos, no reciben prestaciones, el 15.7% reciben aguinaldo y tan solo 13.4% tienen vacaciones con goce de sueldo.
Conclusión.
El envejecimiento se caracteriza por la tendencia a desarrollar enfermedades crónica–degenerativas, mismas que, comúnmente, se vuelven más agudas a partir de que se entra en la etapa de la vejez. Con base en información del INEGI, un 3.2% de las personas mayores en México no cuentan con un seguimiento médico o se automedican.
