Arguedas Y Su Rechazo A La Discriminación En El Perú
En el Primer Encuentro de Narradores Peruanos, desarrollado en la ciudad de Arequipa, año 1965, José María Arguedas, expresó:
Ahora la palabra indio me parece que ya tiene un sustento más justo, un contenido más justo; indio ya quiere decir hombre, económica y socialmente explotado y, en ese sentido, no solamente todos somos indigenistas en el Perú, todos somos indios de un pequeño grupo de explotadores. (Arguedas, José María y otros. Lima.1968)
Esta frase irónica de Arguedas, nos dice que a pesar de los cambios sucedidos en el Perú, el indígena ha cobrado significación pues se convirtió en un “ser humano a ser explotado” y, por ello el escritor sostiene que en nuestro país “todos somos indígenas del otro” excepto aquellos que tienen poder. En este ensayo se aborda el maltrato, la discriminación como la marginación e indiferencia hacia los indígenas(quechua, aymara, shipibos,…) incluyendo su lengua, costumbres, tradiciones, etc. cometidos por las diferentes clases sociales y gobernantes de nuestro país; esto se vio desde que llegaron los españoles a nuestras tierras peruanas, y es a partir de ese encuentro, españoles e Incas (indígenas), donde se ve las diferencias culturales entre los dos mundos, trayendo consigo los problemas mencionados anteriormente, que aún se vive en nuestro país. Al leer las producciones literarias de Arguedas, asimismo, conocer su vida nos transmite el mensaje de revalorizar y respetar al indígena, que por siglos fue maltratado, humillado y explotado por las clases dominantes.
En las obras literarias de JOSÉ MARÍA ARGUEDAS, se habla de la discriminación y maltrato como una evidencia clara de lo que él vivió muy de cerca; en LOS RÍOS PROFUNDOS, como escenario se tiene al internado de Abancay, Ernesto, que es el mismo Arguedas, fue transferido a esa casa de estudios, mientras que su padre buscaba empleo. Cuando Arguedas se inicia en el mundo escolar se burlaron de él debido al tartamudeo que presentaba cuando quería hablar español, su lengua materna era el quechua, se sentía cómodo así. Tanto él como los indígenas eran marginados, abusados y humillados solo por ser diferentes. EL SEXTO; narra que José María Arguedas, encarnado en el personaje de Gabriel, fue arrestado por las autoridades, aún siendo inocente, fue conducido al lugar más temido del país “el sexto” así se llamó la cárcel más grande del Perú de ese entonces, dividido en varios pisos, en las cuales estaban incluidos, políticos (apristas y comunistas) e indígenas; muchos de los presos eran agresivos con los aborígenes, los maltrataban, abusaban, además de culparlos de todo; las víctimas no lo soportaban eligiendo así como última salida el suicidio debido al horror que se vivía dentro de ella, así que preferían morir. Por último, TODAS LAS SANGRES, la obra más famosa que ha escrito, nos describe la realidad de una comunidad indígena donde los capitalistas, por causas de la modernidad quieren desaparecer , José María Arguedas nos narra una vez más el abuso que cometen con los más pobres, la explotación a los nativos, aprovechándose de ellos, enviándolos a las minas y a las haciendas adineradas, los indígenas les decían a sus hijos que practiquen el español y se olviden del quechua, para que en un futuro no les perjudiquen o los humillen durante su vida.
En el Perú, hay fechas que se instauraron para combatir el problema de la discriminación, cada 21 de mayo desde el año 2014 se celebra el Día de la Diversidad Cultural y Lingüística, con el objetivo de mostrar la diversidad como un medio para establecer relaciones armónicas y de respeto entre nuestros pueblos, el Ministerio de Cultura entre otras entidades, se encargan de realizar actividades para promover la diversidad cultural, la ciudadanía intercultural y los derechos de los pueblos indígenas y la población afro peruana; además el 21 de marzo de cada año se conmemora el Día Internacional para la Eliminación de la Discriminación Racial; incluso hay leyes que se crearon para prevenir, eliminar y sancionar el racismo y la discriminación racial en cualquiera de sus manifestaciones; asimismo, hay campañas que impulsa el Ministerio de Cultura para llamar la atención de la ciudadanía sobre la presencia de este mal, que es la discriminación en nuestro país. La intención de nuestros representantes es muy buena y loable, pues se quiere contribuir a la construcción de un país libre de discriminación, sin embargo, no es suficiente, esto no se da de la noche a la mañana, aún hay mucho por hacer, empezando por uno mismo.
Por otro lado, sabemos que los medios de comunicación (sobre todo las redes sociales) cumplen un rol importante en nuestra sociedad, pero desafortunadamente se convirtieron en herramientas para fomentar los mensajes de discriminación; a través de ellas, se puede apreciar por ejemplo que los “blancos” son bonitos, ellos merecen ser bien atendidos, ellos pueden tener las cosas que desean, etc., mientras un indígena o un negro no tiene la misma suerte. Es lamentable, pues los indígenas como sus descendientes tienden a apreciar lo extranjero así como avergonzarse de lo suyo, de sus raíces, sus costumbres y tradiciones. Esto se da gracias a la mala influencia de los medios de comunicación y el poco conocimiento que se tiene de nuestra historia. Se invoca a los entes mencionados revisar sus contenidos antes de publicarlos.
En una encuesta nacional realizada por el Ministerio de Cultura, en marzo del año 2018, sobre Percepciones y Actitudes sobre Diversidad Cultural y Discriminación Étnica-Racial nos recuerda que el 53% considera que los peruanos son racistas o muy racistas e incluso un 8% se percibe así mismo como tal, además, los encuestados señalan que las principales causas de discriminación son su nivel de ingresos, forma de hablar, vestimenta y rasgos físicos. Estos datos confirman que la discriminación y el maltrato es común en el país, es común escuchar a las personas cholear a alguien, llamar retrasado o por último burlarse, usar frases cotidianas que lastiman la dignidad e integridad emocional de la mujer y el hombre ¿alguna vez se han preguntado cómo se sienten esas personas al escucharlo? La discriminación y maltrato causa daños múltiples en la sociedad, nos empobrece como país y peor aún nos divide. Por ello se le da la razón a diversos especialistas en el tema al afirmar que la discriminación, se ha naturalizado en el Perú. Cambiar ese escenario, es deber de todo peruano y peruana.
El escritor, José María Arguedas expresó “para resolver la diversidad en el Perú, no es necesario convertir a todos en una misma cultura, sino respetar la diversidad cultural de todos los seres que viven en el Perú”, además, en la frase “Perú, país de todas las sangres”, nos recuerda que en el Perú viven personas de varias razas y colores, las mismas que han forjado la historia de este país; así se sabe que su raza es la inca, la indígena, la india o la chola, en realidad no importa cómo sea denominada, pues de todas maneras es la misma; así también el aymara, aborígenes de la selva, los negros, igual los blancos, con la llegada de los españoles, forma parte de la riqueza cultural peruana; aunque los términos anteriores, aún son usados de manera despectiva y discriminatoria; por lo tanto se debe dejar de usar estas expresiones como insulto, ya que no lo son. Estos grupos humanos forman parte de la riqueza cultural peruana.
Según los censos nacionales del 2017, hay 441.928 personas más de las registradas en el 2007 que declaran ser quechuahablantes, además, la lengua amazónica que más aumentó fue la shipibo-konibo con más de 11.000 hablantes, seguida por la awajún con 6.911 (El comercio, 2019). Lo anterior expresado indica un aumento que, de acuerdo a los expertos en la materia, va más allá de un crecimiento demográfico y se relaciona con la revalorización de la identidad indígena. Esos datos son positivos que va en camino de afianzar nuestra cultura peruana, hay una recuperación de la identidad y de su lengua. Por otro lado, aún se encuentra gente que manifiesta menosprecio a nuestras culturas minoritarias aborígenes, y por ello, muchas mujeres y varones quechuahablantes, sucede también con otros indígenas, desean evitar que sus hijos padezcan de la discriminación y el desprecio, pues ellos y ellas fueron testigos o víctimas; sin embargo, queda la esperanza de que por medio de la educación se concientice y se revalore las riquezas que tiene nuestra cultura tanto como la indígena, la mestiza y la blanca, llegándose así, en un futuro, a darse la igualdad para todos, donde cada ciudadano será respetado por sus derechos e identidades. El gobierno peruano debe apostar por una educación intercultural bilingüe equilibrada y permanente, lo mencionado anteriormente, sí existe en el Perú, pero no se respeta del todo, cabe recordar que tanto los niños y adolescentes indígenas del país tienen derecho a ser atendidos en su lengua originaria, asimismo, aprender el castellano como lengua oficial del Perú para comunicarse con el resto de ciudadanos.
Para terminar, los peruanos debemos valorar nuestras raíces, sentirnos orgullosos por ser parte de un país multilingüe y pluricultural, además, de practicar valores como la empatía, para ponernos en el lugar del otro. Asimismo, el escritor busca que nosotros reflexionemos y nos corrijamos para así aprender que la solución no es el maltrato ni la discriminación; entonces queda el compromiso de todos y todas, con ayuda de la educación así como los medios de comunicación hacerle frente a esos problemas que surgieron del encuentro de los dos mundos, y en un futuro, disfrutar de una ciudadanía plena en un Perú justo, equitativo y solidario.
Bibliografía
- http://www.codehica.org.pe/columnas/quien-es-indigena
- https://elcomercio.pe/peru/medio-millon-personas-hablan-quechua-noticia-610569
- https://observatorioviolencia.pe/entrevista-racismo-y-discriminacion/