Comentario Crítico de Cuadro “El Combate entre Don Carnaval y Doña Cuaresma”
El cuadro “El combate entre don Carnaval y doña Cuaresma” tiene una dimensión de 1’18 m de alto y 1’64 m de ancho. La técnica empleada es el óleo sobre tabla, utilizado por los artistas de la pintura flamenca, y se encuentra actualmente en el Museo de Historia del Arte de Viena (Austria).
Yéndonos al contexto de la obra, pertenece al Renacimiento, un importante movimiento cultural que se dio en Europa Occidental entre los siglos XV y XVI (es decir, entre la Edad Media y comienzos de la Edad Moderna). Esta obra de arte fue pintado en el año 1559 por Pieter Brueghel el Viejo, considerado en Holanda (su país de origen) como el pintor más importante del siglo XVI. Este cuadro nació con el objetivo de representar la vida cotidiana de los campesinos diferenciada en dos zonas.
El autor fue un pintor flamenco y, como dijimos anteriormente, todos aquellos que fuesen flamencos solían emplear la técnica del óleo sobre tabla. En un momento fue dibujante y, sobre todo, grabador, aunque posteriormente se dedicó a la pintura, empezando a pintar tarde en su vida. En este caso, cuando pintó este cuadro fue 10 años antes de su muerte. Sus imágenes se basan en tradiciones populares y en imágenes heredadas de “el Bosco”, pintor holandés. Brueghel creaba escenas extrañas de la tradición medieval, en las que es difícil encontrar una jerarquía formal en el sentido renacentista.
Centrándonos en la obra, como dije antes, representa la vida cotidiana de los campesinos diferenciada en dos zonas. Si nos fijamos a la izquierda se pueden ver costumbres típicas del carnaval, mientras que a la derecha nos encontramos con la representación de la cuaresma, resaltando los actos religiosos. En esta obra, don Carnaval se ubica a la izquierda y se le representa como un hombre obeso sentado en un gran barril de vino sosteniendo un espetón apuntado a doña Cuaresma, la cual se ubica a la derecha y representada como una mujer mayor sentada en una silla de iglesia sobre una carretilla, utilizando una pala con dos arenques como arma. En cuanto a la situación social en la que se ubicaba, era estamental (de clases cerradas), y tenía una estructura en forma de pirámide. Arriba del todo se sitúa el rey, que era el señor de los nobles y clérigos principales, beneficiarios de la concesión de grandes feudos, a cambio de los cuales estaban obligados a rendir homenaje al monarca. A su vez, estos nobles y clérigos principales tenían como vasallos otros nobles y clérigos de rango inferior. Finalmente, se encontraban los campesinos, artesanos y burgueses, los cuales constituían la base de la pirámide.
Como opinión personal, Brueghel tiene una humanidad profunda, y en el que en este cuadro lo muestra de una forma peculiar, en el que es difícil dónde mirar, dándole a todo la misma importancia.
En Resumen, a parte de la gran ejecución pictórica de este pintor holandés, plasma con claridad las diferentes costumbres y las diferencias existentes entre el Carnaval y la Cuaresma en la etapa medieval, mostrando dichos enfrentamientos mediante los protagonistas del cuadro.
