Descubre La Capacidad Del Organismo Para Recuperarse Cuando Ha Sufrido Una Agresión
Introducción
El cuerpo humano es un mecanismo de alta complejidad. Tiene numerosos componentes que cumplen miles de funciones de manera simultánea y acoplada. Su sofisticación es tal que, aún hoy, la mayoría de sus procesos siguen siendo un misterio. ¿El cuerpo tiene la capacidad de curarse solo? Esta pregunta ha guiado desde siempre la reflexión en torno a la habilidad del organismo para sobreponerse de la lesión y la enfermedad.
Desarrollo
Aunque la compresión de muchos de estos procesos es apenas incipiente, se sabe que el cuerpo tiene la capacidad de curarse solo. Puede, por ejemplo, cerrar una herida o combatir el ataque de algún agente patógeno. Es capaz, asimismo, de lidiar con desequilibrios internos y modificar su propio funcionamiento para hacer frente a una amenaza. A pesar de las numerosas dudas y lagunas en este conocimiento, las siguientes son algunas verdades que se tienen claras.
Condiciones para que el cuerpo pueda curarse solo
Son 4 las categorías básicas que agrupan los procesos fundamentales del organismo. Estos procesos sostienen al cuerpo y permiten que lleve a cabo otras funciones más complejas y elaboradas. Se trata de la alimentación, la relación con el ambiente, la actividad del cuerpo y la vida interior. Estas 4 dimensiones de la salud están directamente asociadas a la capacidad del cuerpo de curarse solo.
Una dieta balanceada provee los insumos para que la regeneración tenga lugar. Del ambiente se extraen el aire, el agua y la luz que sirven de combustible para la curación. La actividad del cuerpo mantiene las funciones vitales a partir del equilibrio entre esfuerzo y descanso. Finalmente, la vida interior dota de sentido estos procesos y tiene la misteriosa habilidad de intervenir en ellos.
El sistema inmunológico
Con este nombre se conoce el conjunto de procesos y estructuras que le permiten al cuerpo restablecer la homeostasis, o equilibrio interno, una vez que se ha perdido. La agresión que rompe este equilibrio puede ser biológica, si se trata de agentes patógenos como microorganismos. Puede también ser físico-química, si se trata de condiciones ambientales como radiación y contaminación. O puede tratarse de una agresión interna, como en el caso del cáncer.
El sistema de defensa protege al cuerpo de estas agresiones y organiza una respuesta acorde a cada caso. Si su funcionamiento no presenta fallas, este sistema puede atacar a un patógeno al tiempo que destina recursos para la regeneración y restauración de las áreas afectadas. Se trata de un verdadero centinela presto o enfrentar cualquier situación para mantener la salud del organismo.
La importancia de la actitud positiva
La vida emocional está estrechamente ligada al funcionamiento de todos los órganos y sistemas del cuerpo. Esto incluye, naturalmente, al sistema inmunológico. Para enfrentar una dolencia o emprender una curación, la persona debe desearlo y dirigir sus energías hacia la realización de este objetivo. De la misma forma, el desánimo y los sentimientos negativos pueden también originar enfermedades y otras condiciones de salud.
Conclusión
En definitiva, el cuerpo tiene la capacidad de curarse solo. Para que esto ocurra, ciertas condiciones deben cumplirse que contribuyan al mantenimiento de la salud. Algunas de estas condiciones son materiales y otras tienen que ver con el ánimo y la vida emocional. Las formas en que ambas se relacionan siguen siendo un misterio en última instancia. Los pensamientos positivos pueden robustecer al sistema inmunológico y mejorar la salud del organismo.