El Libro De Isaias Y La Expansión De Dios
Como hemos podido ver en este estudio de Isaías, es un libro totalmente claro en el plan de Dios para redimir al hombre. Como nuestro profesor lo dijo, Isaías es el libro del antiguo testamento más parecido al nuevo testamento, es un libro citado más de 50 veces en el nuevo testamento y esto nos indica su relevancia en la profecía mesiánica y el plan de salvación de Dios.
Isaías presenta varios aspectos importantes en el plan redentor de Dios respecto a Jesucristo ya que anuncia su venida, la esencia de su nacimiento (que iba a ser virginal), los detalles de su muerte, la segunda venida, entre otros.
En una primera parte del libro Isaías relata con mucho detalle el mensaje al arrepentimiento debido a los pecados del pueblo. Él les advierte sobre el juicio que caería sobre ellos a causa de su idolatría, de su infidelidad, de su injusticia y rebeldía. Hay un capitulo muy trascendental que nos habla mucho de la redención, y es el convencimiento personal de nuestro pecado.
En el capítulo 6, Isaías experimenta algo que todos debemos experimentar en algún momento de nuestra vida y es que en nuestro encuentro con Dios podamos darnos cuenta que frente a su santidad lo que nosotros merecemos es muerte y reconocer nuestra condición delante de él (“Ay de mi”).
Posteriormente Isaías nos cuenta que el juicio de Dios no sería solamente para Israel, sino para todas las naciones de la tierra. Empieza especificando los enemigos de Israel, las naciones cercanas geográficamente y luego el resto del mundo. En este punto podemos empezar a ver que el carácter del plan de redención de Dios para el hombre es general, es decir, es para todos, no solo para su pueblo o para naciones que le han hecho daño al pueblo. De la misma forma, este juicio venidero relatado como el día del señor, nos especifica que el plan de redención de Dios tiene un juicio posterior a la provisión mesiánica que se nos fue prometida, es decir que este plan no solo se queda en la muerte y resurrección de Jesús, sino que se completaría con su segunda venida y su juicio al mundo entero.
Finalmente vemos el mensaje de esperanza para todo aquel que ha puesto su confianza en el Dios verdadero y ha aceptado su provisión, Jesucristo. Respecto al pueblo, Dios les recuerda que él sigue siendo Dios, y que su exilio fue causado por su propio pecado, no porque Dios hubiera fallado, por el contrario, Dios les ama tanto que les iba a dar una esperanza por medio de una semilla que daría luz a todas las naciones proveniente de Jerusalén. La figura del siervo de Dios es aquel Jesús que nos iba a reconciliar con Dios. Isaías nos describe la restauración de Israel, lo que él iba a ser para el mundo (luz), que iba a ser rechazado y asesinado pero que iba a vivir nuevamente. Este siervo de Dios iba a traer salvación a todo el mundo, no sólo Israel y como conclusión se nos dice que como humanos tenemos dos caminos, creer y humillarnos delante de él, o resistirnos y rechazarlo.
Como conclusión, el plan de Dios iba a expandirse a todo el mundo, no solo al pueblo de Israel.