El Papel de Blaise Pascal en la Historia de la Evolución del Computador
Historia y evolución del computador
Hoy en día cuando hablamos de computadoras pensamos en una tecnología indispensable en nuestras vidas ya que con ella podemos hacer un sin número de funciones. Son tan avanzadas que nos permite hacer algo tan sencillo como enviar un e-mail o actividades más complejas como controlar las coordenadas para lanzar un cohete al espacio. Sin embargo, no siempre han sido capaces de realizar todas estas tareas. Esto último se debe a que el ser humano hace unos siglos no poseía el conocimiento necesario para desarrollar tecnologías tan avanzadas.
El Ábaco
Es el artefacto más antiguo empleado para manipular datos. Se cree que alrededor del año 3000 BC, los babilonios empleaban el ábaco para realizar cómputos matemáticos rudimentarios. Aquí se puede ver cómo el ser humano desde el principio de los tiempos sentía la necesidad de tener un instrumento para procesar sus datos. Al ser una herramienta sencilla, de fácil acceso para todas las personas y una tecnología innovadora para esos tiempos, el ser humano se sintió tan cómodo con su uso que lo utilizó por miles de años, razón por la cual su evolución fue de forma lenta. En mi opinión, pienso que el ábaco fue un instrumento de gran importancia para dar inicio a la gran evolución de la computación.
La Pascalina
En el año 1642 el joven matemático y filósofo francés Blaise Pascal inventó la primera calculadora mecánica del mundo. La máquina funcionaba a la perfección mediante un mecanismo de trinquete. Blaise la denominó Pascalina. Al leer e investigar sobre la pascalina, considero que fue un gran avance en la tecnología desde el ábaco. Se puede evidenciar el deseo y la necesidad del ser humano de ir más allá y no quedarse estancado en el mismo sitio. Esto lo digo porque no solo fue la primera calculadora en el mundo, sino que también funcionaba de forma mecánica, a diferencia de otros aparatos creados en el pasado que trabajaban manualmente.
No obstante, no todo era color de rosas. Fabricar este aparato era muy costoso, lo que constituyó una barrera entre vendedor y cliente. Además, sus funciones eran muy limitadas ya que solo podía sumar y restar. Si nos transportamos a la mente de los consumidores de aquella época, podemos entender su necesidad de utilizar la pascalina y su angustia al no poder adquirirla.