El Plagio Como La Acción De Presentar El Contenido De Otro Autor Como Propio
El plagio es considerado como la acción de presentar el contenido de otro autor como propio. Este puede ser de carácter literario, científico, artístico, entre otros. El mismo surge en el momento en que se decide tomar las ideas de una persona, sin otorgarle su debida acreditación, sin embargo, ¿Es posible infringir las normas del derecho de autor de manera inconsciente? La respuesta es sí; ya que el plagio no es considerado simplemente como la copia parcial o entera de una obra, sino, que existen otras formas las cuales son consideradas como plagio y quizás pasan desapercibido por el autor. A continuación, se hará referencia a los 5 tipos de plagios más comunes y como estos pueden ser evitados por dicho creador o causante.
Algunos nombres designados para la identificación de los diferentes tipos de plagio son: La clonación, mosaico, copiado y pegado, remix, búsqueda y reemplazo. Todos estos poseen características en común, sin embargo, tienen cualidades distintivas que hacen que difieran entre sí. Por ejemplo: el hacer uso de un contenido de manera completa y mostrarlo como propio es definida como clonación, mientras que copiado y pegado es utilizar partes de una misma fuente y pegarlas en el documento a redactar como si fuesen propias. Por otra parte, mosaico es un término para indicar el acopio de un material extraído de diferentes fuentes. Este es muy parecido al remix, sin embargo, este último se caracteriza por ser parafraseado. Por último, en el plagio de búsqueda y reemplazo, se utiliza una fuente como tal, cambiándole palabras claves sin modificar la esencia del material.
Previo a redactar un documento es importante expandir nuestros conocimientos, basándonos en fuentes que nos informen sobre el tema a tratar. Esto es útil para ofrecer un artículo que sea valedero, sin embargo, al hacer esto, corremos con el riesgo de cometer plagio. Una forma útil de evitar el plagio es a través de la correcta citación, ya que muchas veces este carece en el documento o no se compone de manera correcta. Otra forma de evitar plagio es parafraseando, utilizando ideas propias y posteriormente acreditando la autoridad de donde surgió la información. Por último, es relevante la búsqueda de normas de escritura, ya que a través de este el autor puede estar consiente de como se redactar un texto y como este puede evitar el plagio de otros documentos de interés.
En conclusión, el plagio representa lo contrario de la ética profesional, y este último es un factor muy importante sobre el cual nos estamos formando como médicos. Todos en algún momento determinado sentimos la necesidad de cometer plagio, ya sea porque no nos creemos capaces de plasmar una idea coherente o por falta de tiempo e interés en el mismo. Dicho esto, el plagio, aunque muchas veces nos saque de apuros, no provee nada positivo para nuestra formación académica. Redactar un material por si solo trae consigo credibilidad y seguridad para el autor, así como también para el lector. Por otra parte, este fomenta un mayor entendimiento en el material redactado, incrementando así la cohesión y coherencia de este.