El Poder, La Autoridad Y Las Élites En El Gobierno

Indudablemente la concepción de poder en el hombre tiene una relación emotiva pues si reflexionamos a través de la historia, la primera manifestación de poder a la que se enfrentó el hombre fue precisamente a la del poder de la naturaleza, más adelante se dio una concepción teológica del poder y posteriormente se conoció el poder del hombre sobre el hombre, que en su acepción más moderna, es el poder del estado, que no es otro que el poder político.

Max Weber define que “poder es la posibilidad de imponer la propia voluntad sobre la conducta ajena”. Si partimos de ese presupuesto podemos inferir que existen diferentes modalidades de poder que pueden variar, ejemplo de ello puede ser el poder de la fe, la religión, la fuerza física, el poder psicológico o el poder del dinero. Es importante dejar claro que cualquier mecanismo que ejerce influencia sobre la conducta humana es elemento de poder.

Ahora por motivos propios del escrito aquí desarrollado, vamos a enfocarnos en la concepción del poder y el control del mismo, a partir del poder político el cual se institucionaliza por medio del Estado a través de normas jurídicas.

Debemos mencionar que existen diferentes formas del poder que se manifiestan por medio de las variadas funciones que pueden cumplir quienes ostentan ese poder sobre el conglomerado social Por ejemplo:

1. El poder económico: el cual pertenece a los dueños de los medios de producción, los cuales amasan fortunas a costillas de la clase obrera, además de influir sobre el mercado y las leyes que lo regulan, con el fin de influenciar sobre la voluntad de las personas que participa en el para inducir al consumo masivo de préstamos, servicios y productos.
2. El poder ideológico: usado por los medios de comunicación, las propagandas políticas, las iglesias y todos aquellos instrumentos de influencia que generan una representación psicológica que influye sobre el individuo generando conductas.
3. El Poder militar: debido al poder que tienen sobre las fuerza armadas, permite a un hombre o un grupo de hombres controlar la voluntad de los ciudadanos mediante el terror y el miedo a las represarías militares.
4. El poder político: usa la fuerza de coerción como una realidad pues su fundamento legal lo permite, este es el proceso de aplicación de la ley justificada por la promulgación de la misma. Este es el ejercicio del poder político.

Como podemos observar el poder no es producto de una fuente concreta, de hecho puede emanar de diferentes factores, lo que sí es común es la búsqueda de legitimar ese poder y someterlo a límites que directa o indirectamente han llevado a regularse jurídicamente.

Es preciso decir que la mayoría de fuentes del poder tienen que constituirse como poder político pues de no ser esa la intención, sería un factor de poder ilegitimo e ilegal. Por lo tanto el poder político busca el ejercicio del mismo desde un ámbito legítimo, para que su dominación se fundamente en un principio de legalidad sometido al ordenamiento jurídico.

El poder precisamente es indispensable para los detentores del mismo pues por medio de él ejecutan las decisiones con autoridad. Ahora si bien es cierto la autoridad es un concepto relacionado íntimamente al poder, mas no es lo mismo.

Si consideramos al poder como la posibilidad de imponer la voluntad de uno sobre otros y que se encuentra presente en el sistema jurídico, ¿qué es la autoridad? Podemos afirmar que es la legitimación material del mismo poder, es decir con independencia de su fuente es el legítimo ejercicio de imposición.

Podemos observarlo actualmente en la emergencia sanitaria originada por la pandemia del Covid-19, la autoridad ha emitido un acto administrativo que regula las salidas de los ciudadanos por medio de un pico y cedula. Los detentores del poder tienen la autoridad de restringir derechos fundamentales del colectivo social en vísperas de proteger la salud de todos.

En este sentido podemos hablar de la autoridad cómo derecho a ordenar y ser obedecido, lo cual implica obviamente la relación de supra-subordinación, por lo tanto podemos afirmar que la autoridad refleja el entendido de sujeto que realiza funciones establecidas en el ordenamiento jurídico el cual tendría el sinónimo de funcionario.

Ahora el referirnos a los detentores del poder es posible poder confundirlos con usurpadores de poder sin legitimación, por eso es importante aclarar que en este sentido solo nos referimos a aquellos individuos que por medio de la política han llegado al poder, por lo tanto se encuentran legitimados y pueden ser denominados como gobernantes y tiene una autoridad inmersa en sus facultades.

Estos gobernantes pertenecen a la elite política, los cuales toman decisiones por medio de actos administrativos que crean, modifican o extinguen las situaciones jurídicas de los individuos que viven en sociedad.

Por lo tanto si analizamos el poder legitimo es innegable esa trilogía conceptual entre poder-política-gobierno. Previamente hemos definido la noción de poder pero debemos preguntarnos ¿Qué es política? Y ¿qué es gobierno?

En la teoría política clásica la cual se enfocó en desarrollar una definición para la buena forma de gobierno y un buen sentido de estado, prevaleció la idea de un bien común que debe ser institucionalizado. Sin embargo, si nos adelantamos en el tiempo debemos mencionar definitivamente a Maquiavelo quien desarrollo su teoría en la razón del Estado y podemos observar un cambio hacia la política, con una teoría definida como el oficio del poder o el arte de gobernar.

Es por estas razones que Weber puede ser considerado como el último de este linaje con una concepción sociología sobre la política y el gobierno.

Weber afirma que el medio de la política es el poder e incluso afirma que la política tiene unas tareas específicas que solo pueden llevarse a cabo por medio de la violencia. Siguiendo esta línea weber desarrolla la concepción de lucha-poder-política. Definiendo el poder como lo mencionamos anteriormente en la capacidad de imponer la voluntad de uno frente a la resistencia de otros. La lucha comparte una definición parecida al poder pues ella se presenta si en una reacción social la acción que se busca es imponer la propia voluntad sobre la resistencia de un compañero.

Weber distingue entre violencia y luchas pacíficas las cuales excluirán la violencia y las define como rivalidades. Ahora las luchas por la vida o por la supervivencia las cueles pueden ser llevadas a cabo sin intención son definidas como selección sin importar si es social o biológica, lo que termina por concluir que si el poder y la violencia están interconectadas por la definición de la política entonces está en su núcleo está marcada por la lucha sea consciente (la violencia como ultima ratio) o inconsciente en la inevitable suerte de las selectivas oportunidades.

Podemos entonces afirmar que el concepto de poder está marcado por un vínculo entre estos dos y completan un círculo conceptual que plantea a la política como una lucha existencial. Si esto es así entonces el gobierno vendría siendo el reflejo de esa lucha, la cual esta en manos de un determinado grupo electo por las masas, que se enfrentó en una lucha por el poder generando que algunos grupos políticos sean vencedores y otros perdedores.

El gobierno como tal se define como el pilar del estado, los cuales recibe la administración y dirección de una nación en un sistema democrático a través de un proceso electoral. En los Estados modernos y constitucionales como el de nuestro país existe un orden piramidal jurídico basado en aquella pirámide de Kelsen, pero además hay una división del poder político, división tripartía del poder. (Rama ejecutiva, rama legislativa, rama judicial) buscando precisamente un contrapeso de poderes.

Ya mencionamos anteriormente esa necesidad que veían los antiguos griegos, en un buen funcionamiento del estado por ende un buen gobierno, y también ese cambio de dirección hacia el manejo político del poder. Donde muchas veces el fin justifica los medios.

Desde esta buhardilla debemos repasar la ética y moral a la que deben estar sometidas las elites de ese poder político. Debemos definir ¿qué es la elite? Aquella minoría con el control de mando sobre los individuos de la sociedad. Estas elites en nuestro país se han perpetrado en el poder, rotando el mismo entre familias burguesas y aristocráticas que están destinadas a gobernar, y si también es cierto que nuevos líderes políticos con capacidad de atracción sobe las masas se han hecho parte de esa elite, la realidad es que solo buscan lo mismo, desangran las arcas del estado, generan enfrentamientos ente un pueblo con falta de educación, servir a los dueños de los medios de producción y perpetrase en el poder.

No digo que no se generen cambios entre quienes gobiernen, pero estos cambios suelen ser generacionales entre mismo miembros de un clan o incluso la aparición de los nuevos líderes termina siendo eso, una nueva cara que sigue siendo manejada por los factores de poder establecidos que manejamos anteriormente.

Es imperante la necesidad de una Colombia educada que entienda de estos conceptos y haga uso de los mecanismo de control impuesto por el mismo estado lo cuales parecen ser la lucha de las minorías frente un minoría que ostenta el poder. El conglomerado social es demasiado grande, así como los problemas que enfrentamos en sociedad. Pero si la participación ciudadana fuera ejercida con conciencia y todos hicieran parte de ese control la elite que gobierna será otra que busca en verdad el progreso y desarrollo de todos.