Familia Mexicana En La Celebración De Los Muertos
Introducción
El cuento nos presenta a una familia mexicana, celebrando el día de muertos, la historia es narrada por un integrante de la familia la cual no especifica su nombre, si es hombre o mujer ni su edad, el cuento comienza con la pregunta ¿Tenemos que llevar a Toria? Toria es la hija de la pareja de su madre, la cual ha preparado todo para la visita al panteón de ese día, (cubetas, materiales y flores) dentro de un bocho. Nos plantea como todo cambio desde que murió la muerte, el día que los muertos cobraron vida, el personaje narrador explica que no existen los muertos con vida, solamente son muertos animados.
Desarrollo
La familia está conformada por el personaje principal (quien narra la historia), su madre, la pareja de su madre, la hija de este de nombre Toria y Victoria hija de ambos, a Victoria no le gustaba ir al panteón argumentando que no desea trabajar en un día libre y menos para los muertos lo cual hacía que comenzara una discusión entre ella y su mamá donde su madre le hace hincapié de que no son solo muertos, sino sus muertos (Papá Ignacio, Conchita y los gemelos Roberto y Juan). A partir de que los muertos se animaron la manera en que se vive la muerte cambió, el negocio no solo recae en las flores.
Si no también en las tlapalerías en donde ponen en oferta cadenas, refuerzos y ganchos, en los cementerios las tumbas evolucionaron de igual forma, ahora se ponían rejas o algunas familias decidían colocarlos entre paredes de acrílico, las cuales sé amarillenta con el rayo del sol, su madre le decía que eso irrumpe con las tradiciones, que lo tradicional eran las cadenas y las máscaras las cuales eran adornadas con mensajes, pinturas hechas a mano y sonrisas grandes para que luzcan felices, un elemento que no puede faltar a partir del cambio son los garrafones de formaldehído para conservar las carnes de los difuntos.
Otro gran negocio son las armaduras o petos para cubrir las carnes en descomposición, el negocio en realidad se encontraba en las de los niños, ya que eran las más vendidas, las armaduras se pueden comprar en piezas y a pagos. Las ciudades dentro de la historia que nos es expuesta se encuentran bajo total delincuencia e inseguridad, las armas de fuego son algo común a los niños en las escuelas se les enseña el manejo básico y como disparar 3000 balas de una ametralladora en menos de minuto y medio, a Victoria le han regalado una serie de metales con filo que guarda bajo de su cama junto a los peluches.
El personaje que narra nos habla de sus muertos los cuales están en una casita que les han construido en su honor, lo primero que hacen es abrir un visor para cerciorarse de que no les falte una pieza, una cadena o un pedazo de la máscara de ser así lo abren, pero si se presenta un faltante se meten entre dos para sujetarlo y amarrarlo o cambiar las máscaras. A los gemelos su madre les compró unas armaduras de robots y nunca se volvió a aparecer, mi madre las pule y su padre les cambia las pilas para que hagan ruidos graciosos, ya que los petos y armaduras, también las cadenas adornadas se cambiaron, se pintan las paredes se resanan las grietas.
Conclusión
Victoria le quitó la máscara a papá Ignacio dejando al descubierto su cara amarillenta de piel seca con la boca negra abierta su padre se quedó en blanco con la brocha en mano ella salió corriendo asustada, pero después le acarició la mejilla, él intentó morderla, pero ella sin esfuerzo le retiró la mano consiguiente le colocó la máscara y lo abrazó diciendo -Abuelito-. Mi madre sentó a la fuerza a papá Ignacio y colocó a su lado a los gemelos, dejó que Conchita deambulara por ahí, comenzó a rezar, al salir del cementerio Toria alcanzó a su padre y en un gesto él le preguntó si se estaba despidiendo a lo que ella asintió diciendo que su novio quiere irse al otro lado donde comenzaron.