La Evolución De La Mujer En El Mercado Laboral
Introducción
En la época de la revolución industrial, las mujeres ya contribuían con la economía de la familia, ya sea haciendo tareas de casa (limpiar, fregar, hacer la comida), tareas textiles (coser) y trabajando en las minas. En este entonces era considerada incapaz políticamente por lo que únicamente estaba destinada a las tareas domésticas o en la industria textil. Con las tantas y largas horas de trabajo, las mujeres cada vez tenían menos tiempo para poder y estar ocupados de sus hijos, ya que no existían permisos por enfermedad ni por maternidad; así la vida familiar se vio muy afectada. En el siglo XX y en contraste con la legislación crecientemente igualitarista de los tiempos anteriores a la guerra civil, el régimen encabezado por Franco desarrolló una legislación que excluía a las mujeres de numerosas actividades, La miseria de la posguerra se cebó especialmente con las mujeres. El franquismo asumirá la trilogía nazi niños, hogar, iglesia (Kinder, Küche, Kirche) que tanto recordaba al ideario tradicional. Su actitud antifeminista le hace ver a la mujer como un ser inferior espiritual intelectualmente, que carecía de una dimensión social y política y que tenía una vocación inequívoca de ama de casa y madre.
Bajo este contexto observamos un incremento en las crisis matrimoniales, junto a la creación de los nuevos modelos de unión y en un descenso de la natalidad. Este es el porque y donde podemos situar el problema de la conciliación de la mujer en la vida familiar y laboral.
Desarrollo
Evolución y estudio del enfrentamiento laboral
En la España antigua eran sociedades donde las relaciones de parentesco eran el elemento más importante de organización socia, el que las mujeres transmitía la herencia, además que trabajaban la tierra, participaban de otras actividades productivas y rituales de la comunidad, los que las situaba en una buena posición, que si bien es cierto no se puede hablar de matriarcado, tampoco se puede reconocer una sociedad con estructura patriarcal. Las posiciones patriarcales se afianzan poco a poco, sobre todo a través de actividades donde no había participación de las mujeres: la guerra, con todo su simbolismo, proyección social y significado político. Las mujeres, aunque se relacionaron con la guerra fue casi siempre como sujetos pasivos, ya sea como un objeto de intercambio o recompensa para los vencedores, como el consecuente sufrimiento de las mismas.
Después de este breve paréntesis, podemos continuar diciendo que, en las diversas sociedades, más allá de sus diferencias, existe la separación de tareas que se atribuyen a hombres y mujeres, es una constante. Claro que esta separación puede ser más o menos rígida, de acuerdo a las características de la sociedad que se trate, puesto que influyen factores tanto económicos como tecnológicos. Esta división sexual del trabajo, tiene características comunes, que también las encontramos en las diversas sociedades, más allá de sus diferencias.
Otras de las características de esta división sexual del trabajo es que varía en espacio y tiempo. No es lo mismo la división de tareas en la actualidad que en la época anteriores como la de nuestras madres, tampoco es igual en el área rural que urbana. Aunque para constatarlo solo basta ver las estadísticas de cuantas mujeres hay hoy en el mercado laboral y cuantas habían antes. Son las mujeres las que se encuentran con el problema de la conciliación laboral y familiar. En primer lugar, porque tras su incorporación al mundo laboral ha tenido que asumir una doble jornada de trabajo: laboral y familiar. En un segundo lugar porque los estereotipos prevalecen en la sociedad ya que al hombre se le asignan tareas de producción y a la mujer los cuidados y tareas domésticas. El efecto de este cambio en la sociedad deriva en los nuevos roles laborales y familiares, muchas mujeres dicen experimentar un conflicto entre familia y trabajo y viceversa.
En este apartado del trabajo mostraremos los aspectos de investigación, explicaremos el transcurso que hemos tomado para acometer el estudio, así como justificar por qué lo hemos hecho así. Lo primero que haremos a la hora de plantear la investigación es preguntarnos qué punto de vista será el más adecuado para la realización. Una vez ilustrado el objeto de estudio al cual abordamos, nos damos cuenta de la necesidad de afrontar el transcurso de la investigación usando una metodología cualitativa.
Al mismo tiempo, el estudio que estamos haciendo busca identificar un problema y encontrar una solución para resolver lo máximo posible las consecuencias de esta situación. A este modelo de investigación Manion y Cohen se refieren como un procedimiento centrado en su objetivo y en afrontar el problema inmediatamente, además hace referencia manejar ciertas variables mediante distintos recorridos que nos permitan luego realizar ajustes necesarios para el tema investigado para obtener cambios positivos. A parte se pretende que sea un proyecto que no tenga punto final para nunca dejar de mejorar en la práctica. La fórmula de recogida de información empleada para desarrollar este trabajo ha sido un cuestionario, pensamos que es el método más adecuado para obtener la información necesaria. Para nosotros la investigación perfecta no respondería a solamente a una perspectiva ya sea cualitativa o cuantitativa si no a una mezcla de ambas que daría una mezcla con un resultado más real.
Análisis del número femenino en el mercado laboral
El desarrollo del mercado laboral femenino en nuestro país demuestra que desde 2014 ha evolucionado hasta el punto de que las mujeres con mayor probabilidad de encontrar trabajo son las mujeres jóvenes con una titulación educativa y sin hijos, sobre todo esto ocurre en empleos de media jornada en el sector terciario. En la actualidad la actividad de las mujeres es del 53,75% y un 26,57% en paro, pero todavía nos encontramos muy lejos del 79,5% de Islandia y el 77,2% de Suecia, que son los países con mayor tasa de actividad a nivel europeo. Los cambios más grandes experimentados en el mercado laboral femenino en España son los siguientes:
- El mercado laboral en nuestro país ha aumentado la tasa femenina en más de 21 puntos en los últimos 25 años.
- La tasa de escolarización de mujeres es superior en todas las especialidades a los hombres, sobre todo en las carreras universitarias excepto en algunas ingenierías.
- Para finalizar la tasa de natalidad española ha descendido de 2,2 hijos de media por familia en los años 80 a 1.1 en 2014. Aunque existen regiones en las que esta desigualdad se ve más dimensionada, hay una gran segregación por sexos, se ve reflejado en todos los sectores que las mujeres tienen categorías profesionales inferiores a los hombres, con peor remuneración y prestigio social.
Evolución del mercado de trabajo español en el periodo
En España se ha percibido un considerable aumento de la participación femenina en la economía, pero todavía se nota la diferencia frente a los hombres (53,75% de las mujeres por un 65,48% de los hombres) en comparación a los países más altos como son por ejemplo Suecia e Islandia como hemos indicado anteriormente, España es uno de los países con la tasa más reducida de Europa, cabe indicar que en los países con mayor tasa(Suecia e Islandia) cuentan con mayor población femenina que España, por lo tanto hay mayor número de mujeres activas.
Cabe destacar la evolución que hemos tenido en nuestro país, ya que en 1960 por ejemplo las mujeres trabajadoras no llegaban a los 3 millones y a partir de ahí fueron subiendo estas cifras hasta alcanzar los 8 millones en 2016, pero debido a la crisis que atravesamos, el número de parados llegó a 6 millones en 2013, y el sector femenino estuvo más afectado que el masculino en este aspecto. En 2014 el paro disminuyó a 5,9 millones, de los cuales 2,8 eran mujeres y 3,1 eran hombres.
Consecuencias
- Disminución del número de hijos
La tasa de natalidad ha disminuido en todos los países europeos, pero en mayor medida en los países del sud de Europa, por el hecho de que la participación de la mujer en el mercado laboral y la formación familiar parece ser más complicada en comparación a los países del norte del continente, que tienen tanto la tasa de natalidad y actividad notablemente más altas que en España, ya que en el año 2000 fuimos el país con la tasa de fertilidad más baja. En los datos de las tasas de actividad femenina se puede observar que a medida que va aumentando disminuye la tasa de natalidad, lo que nos demuestra que la incorporación de la mujer al mercado laboral tiene una influencia negativa en el crecimiento de la población.
- Impacto de matrimonios
La incorporación de la mujer al mercado laboral ha tenido fundamentalmente dos efectos sobre la mujer: -Mayor independencia económica de la familia – Un mayor equilibrio psicológico de la mujer – Cambio en la distribución del tiempo. Aumento en tiempo dedicado al trabajo fuera del hogar en detrimento del dedicado a actividades familiares. Estos efectos tienen a su vez consecuencias directas sobre aquellos que la rodean. La mujer ha sido a lo largo de la historia el eje principal de la familia y la vida familiar. Sin embargo, desde su incorporación al mercado laboral, ha tenido que compaginar su actividad profesional con sus responsabilidades como esposa, madre e hija, dentro de la familia. La dedicación al trabajo fuera del hogar, si todas las demás variables siguen igual, ha tenido una influencia sobre el desempeño de las responsabilidades familiares. Según los datos preliminares de la Encuesta de empleo del tiempo 2002-2003 realizada por el INE las mujeres que tienen un empleo, dedican tres horas menos al cuidado de los hijos que las que no lo tienen.
La vida familiar se complica con la incorporación de la mujer al trabajo, por la sencilla razón de que tanto el hombre como la mujer se ven obligados diariamente a dedicar más tiempo al trabajo que a la familia (con un horario normal de ocho horas) de tal forma que el cansancio y en ocasiones el estrés acumulado de la jornada laboral, estalla en el ámbito donde más cómodos nos encontramos: en la familia. Cuanta más actividad de la mujer en el mundo laboral, existen más divorcios, se puede comparar el año 1989 con el 2000, donde en el año 1989 existía menos actividad de la mujer y habían, 11 divorcios de cada 100 matrimonios, y, comparado con el año 2000, al haber más actividad laboral existen 17 divorcios cada 100 matrimonios.
- Posición laboral de la mujer
Durante el paso del tiempo las mujeres se han ido incorporando en el mercado laboral, siendo un proceso lento, progresivo. Ello ha generado modificaciones importantes en la propia realidad económica del mundo, que ha supuesto un reto poder aislar y definir las particularidades del mercado laboral con una visión de género. Por otro lado, el contexto normativo europeo y los avances legislativos, han sido uno de los mayores estándares para sentar las bases para la consecución real de la igualdad del mercado laboral, una realidad cada vez más avanzada, pero lejos de lo que todavía supone la igualdad femenina.
Durante las últimas décadas la incorporación de la mujer en el mercado laboral ha sido muy importante, debido a su incremento. Pese a este crecimiento que nos lleva a una evolución muy positiva, la división de tareas establecidas para hombres y mujeres ha estado marcada por un desigual reconocimiento social y un menor prestigio, que se ha visto traducido en mayor precarización en las condiciones laborales y económicas, en mayor temporalización de los contratos, en mayores tasas de contratos a tiempo parcial y en la brecha salarial. Es decir, las diferencias salariales entre mujeres y hombres en el Mercado laboral. El salario de la mujer es de forma clara, menor que en los hombres, lo que hace generar una mayor desigualdad.
Normativa que regula la concialiación de la vida laboral
- Personal y familiar
Las medidas legislativas y políticas cuyo objetivo principal es la conciliación de la vida laboral, familiar y personal se enmarcan dentro de los objetivos dirigidos a promover y fomentar la igualdad de oportunidades y trato entre mujeres y hombres. Desde la Unión Europea se han desarrollado una serie de Directivas que obligan a los Estados Miembros a incorporar en su legislación medidas destinadas a mejorar y hacer más compatibles las condiciones de vida y empleo para las trabajadoras y los trabajadores. La normativa española para facilitar la conciliación de la vida laboral, familiar y personal se define fundamentalmente a partir de dos leyes:
- Ley 39/1999 de 5 de noviembre para promover la conciliación de la vida familiar y laboral de las personas trabajadoras
- La ley orgánica 3/2007 de 22 de marzo para la igualdad efectiva de mujeres y hombres.
Derechos de conciliación de la vida laboral de la mujer
Los derechos de conciliación de la vida laboral, familiar y personal desempeñan un importante papel en la consecución de la igualdad real entre mujeres y hombre. Entre otras medidas de conciliación, se contemplan las siguientes:
Permisos retribuidos
- Maternidad: Las 16 semanas de permiso se amplían a 2 semanas más en caso de nacimiento, adopción o acogida de hijos o hijas con discapacidad. El padre puede hacer uso de este permiso en caso de fallecimiento de la madre.
- Paternidad: Se reconoce el derecho de un permiso por paternidad, autónomo del de la madre correspondiente a 13 día por nacimiento, adopción o acogida, que se suman a los dos días reconocidos por convenio colectivo.
- Lactancia: Corresponde a una hora diaria que puede ser acumulada en días libres.
- Vacaciones: Se recoge el derecho al disfrute fuera de los periodos de incapacidad temporal por embarazo, parto o lactancia.
Conclusión
El objetivo de este trabajo es analizar el mercado laboral femenino generalmente en España, pero acoplando ejemplos de diferentes países y lugares para corroborar que esta discriminación es generalmente mundial. En algunos casos esto hemos comprobado que es una consecuencia de que las mujeres generalmente son las encargadas de encargarse del hogar y de los niños. Como hemos analizado en este trabajo las mujeres en general han de compaginar las tareas domésticas con el trabajo a pesar de seguir con su carrera profesional es decir deben hacer dos funciones completas la productiva y la reproductiva. Para solucionar esto debe haber un cambio sustancial en la sociedad, ya que esta situación podría cambiar si entre hombres y mujeres se repartieran las tareas domésticas y cuidado de los hijos, y la única forma de hacerlo en nuestra opinión es socializar a las nuevas generaciones con este tipo de conceptos tanto en el colegio y en su ámbito educativo como en cada uno de los hogares, y en la calle. Además de tener en cuenta esto se ha de conseguir en un futuro próximo la igualdad de salarios entre hombres y mujeres ya que esto será un gran incentivo al cambio de mentalidad.
Valoración personal
La incorporación de la mujer al mercado laboral ha desencadenado unas desigualdades de género, estas desigualdades entre ambos sexos es algo que sufren más las mujeres ya que las estas cobran por debajo del sueldo de los hombres generalmente. Esta situación nos parece injusta ya que tanto hombres como mujeres tenemos que tener las mismas posibilidades y derechos en el mercado laboral. Podemos comprobar que hay un mayor nivel de desempleo femenino, esto nos preocupa porque hoy en día cualquier mujer puede desempeñar el mismo trabajo que un hombre y viceversa. Hemos tratado este tema porque consideramos que nos afecta directamente ya que las mujeres tendrán mayores dificultades a la hora de encontrar un trabajo y de progresar dentro de la empresa y por desgracia en España se ha normalizado pudiéndose comprobar por ejemplo en los hombres que se dedican al sector de la construcción y la mujer el cuidado de otras personas en el sector servicios ya que las mujeres han aceptado este rol, se observa sobre todo de las anteriores generaciones de mujeres que asume la responsabilidad de toda la familia y de las tareas del hogar mientras que la responsabilidad del hombre es mantener económicamente la casa, etc… Por el contrario, en el siglo XXI las mujeres tienen mayores ambiciones, tienen ganas de formarse para así poder optar a un mayor sueldo y así no tener que depender de nadie. Finalmente podemos decir que poco a poco la mujer está ganando el lugar que le corresponde en el mercado laboral a pequeños pasos y demostrando su valía.