Historia del Concepto de la Igualdad En La Sociedad Española

La igualdad se define como una característica fundamental dentro de la sociedad en la que deben prevalecer los mismos derechos, obligaciones y principios para todos sus miembros. Este concepto es conocido en la actualidad, gracias a la Declaración Universal de Derechos Humanos de 1498.

HISTORIA

A lo largo de la historia, han ido surgiendo diferentes principios para aplicar el término igualdad. Uno de los documentos más importantes que recogió la igualdad de manera formal fue El contrato social, en el que Rousseau pretendía mostrar un nuevo modelo de sociedad donde quedaran eliminados los intereses propios provocando así una búsqueda común de fundamentos que facilitasen la vida en comunidad; sobre todo para permitir una mejor incorporación del género femenino. Sin embargo, en el siglo XVIII no todo el mundo aceptó esta idea de mejora, pues por lo general se mantenían unas características y obligaciones distintas entre géneros, prevaleciendo siempre la figura del hombre.

En España, las diferencias comenzaron a decrecer a partir siglo XX con la industrialización, la evolución del pensamiento liberal y otros factores que fomentaron la participación de la mujer de forma pública, unido a las organizaciones que se formaron lideradas por mujeres, cuyo objetivo era la búsqueda de sus derechos. De este modo, lograron en 1924 el reconocimiento del derecho al voto de las mujeres, aunque con algunas restricciones pues solo era permitido para aquellas mujeres que no estaban condicionadas por su pareja; no obstante, eso no era suficiente y en la reforma electoral, el Congreso de los Diputados logró contar con tres mujeres que consiguieron ascender al poder, entre ellas Clara Campoamor y Victoria Kent.

“No puedo juzgar tampoco a la mujer española por estas obreras que dejan su trabajo diariamente para sostener, con su marido, su hogar. Si las mujeres españolas […] estuvieran liberadas en su conciencia, yo me levantaría hoy frente a toda la Cámara para pedir el voto femenino.” Así expresaba Victoria Kent su pensamiento ante las Cortes sobre el voto femenino, pues sentía que las mujeres verdaderamente estaban condicionadas por los hombres ya fuesen maridos o padres, y de esta manera no se avanzaría para conseguir una igualdad de oportunidades.

No obstante, en la Constitución de 1931 se reconoció por primera vez en España el sufragio universal, además, de otros principios de igualdad con los que pretendían formar una nación con menos discriminaciones y diferencias; “[…] El Estado no reconoce distinciones y títulos nobiliarios.” Sin embargo, estos logros finalizaron con la Guerra Civil ya que, se volvieron a producir de nuevo desigualdades laborales, que no permitían trabajar a la mujer ,y también desigualdades educativas, entre personas de diferente poder adquisitivo. Aunque en la segunda mitad del siglo XX, se crearon algunas políticas que facilitaron la incorporación de la mujer al mercado laboral, y que perduraron hasta la redacción de la actual Constitución de 1978, que contiene una proliferación de la igualdad.

TIPOLOGÍA Y CARACTERÍSTICAS PRINCIPALES

En primer lugar, señalamos el principio de igualdad en el que se trata este concepto como un valor, por el que las personas deben contar con un trato igualitario que les permita disfrutar sin que se produzca la violación de los principios fundamentales y de sus propios derechos. A su vez, se debe promover la igualdad para que todas las personas disfruten de este derecho en las mismas condiciones dentro de una sociedad.

Por otro lado, cabe destacar la igualdad en la ley y en su aplicación: “Los españoles son iguales ante la ley, sin que pueda prevalecer discriminación […]” . La igualdad debe aplicarse de la misma manera a las personas que se encuentran en la misma situación, no se puede producir la violación de este principio en la aplicación por jueces y tribunales, si no que estos deben impartir su aplicación de manera equitativa. La igualdad es aplicada en todo el territorio español, atendiendo a los diferentes artículos que la Constitución nos muestra, y poniendo a todos los ciudadanos españoles en semejanza desde diferentes puntos de vista: político, tributario, jurídico, familiar…

POLÍTICAS Y ACCESIBILIDAD

Las políticas de igualdad se han ido desarrollando en pequeña medida con el objetivo de mejorar la situación dentro de la sociedad, no solo para las diferencias entre géneros si no también para proyectar una labor de la sociedad más eficiente, sin ningún tipo de barrera a consecuencia de enfermedades, razas… No obstante, para llegar a ser una sociedad perfecta aún se exigen muchos parámetros que serán difíciles de alcanzar.

En la empresa las políticas de igualdad tenían la finalidad de otorgar el mismo trato para ambos géneros, de forma que exista una mejor colaboración en la actividad laboral entre ambos. De esta manera, se producirá una conexión de ideas que harán que la empresa obtenga unos mejores resultados en la eliminación de problemas: “[…] aumentar la participación de las mujeres en el mercado de trabajo […] potenciando su nivel formativo y su adaptabilidad a los requerimientos del mercado de trabajo.”

La accesibilidad es un concepto que ha evolucionado, en el que se desarrollan una serie de normas y adaptaciones, para facilitar la vida a las personas con discapacidades: “[…] los poderes públicos adoptarán medidas pertinentes para asegurar la accesibilidad universal, en igualdad de condiciones con las demás personas, en los entornos, procesos, bienes, […]” .

La intención es promulgar medidas para que obtengan el mismo trato de igualdad en todos los ámbitos tanto legales como sociales. Algunos ejemplos, donde podemos destacar medidas de mejora para la igualdad, es la inclusión de lenguaje para sordos en canales de televisión como La Otra, Telemadrid o La 1durante los telediarios o en discursos importantes.