La Historia de la Procedencia del Tabaco y su Adicción
¿En Algún momento has pensado de donde viene ese hábito de fumar? El individuo americano en sus inicios al descubrir y conseguir dominar el fuego, empezó a quemar toda clase de plantas hasta que descubrió que ciertas plantas desprendían un olor característico que causaba poder narcótico y así se fue formando el hábito de enrollar hojas y fumarlas (Cortez, 2015). Como se ve, ya de tiempos remotos ya existía el consumo de tabaco y que se volvió usual desde ese entonces; hoy en día se está observando de forma vivencial que el consumo del tabaco era inofensivo y que ahora se está transformando en una epidemia de efectos silenciosas. ¿Tiene secuelas el consumo tabaco? Consideramos que las personas que efectivamente consumen el tabaco no toman enserio los efectos de los cigarrillos podría causar a corto o largo plazo, directa e indirectamente a pesar de la advertencia persuasiva
En primer lugar, la revolución de las industrias se impulsó para que también los empresarios vean a los cigarrillos como un negocio redondo, con esta revolución también sumaron nuevas enfermedades y se desconocieron los problemas que causa el tabaco tanto a corto como largo plazo, (Case y Fair, P.53) definen que “el termino industria se usa de manera informal de referirse a los grupos de empresas que elaboran productos similares”. Según Sanit S. 2002 “la distribución masiva de cigarro se inició a partir de 1888, cuando se industrializo la producción del tabaco, a finales de la Segunda Guerra Mundial el consumo anual por persona en los EE.UU. era de 4000 cigarrillos” posteriormente.
En segundo lugar, el consumo del tabaco se está transformando en el cáncer hereditario para nuestras futuras generaciones, cada periodo se aumenta el numero de jóvenes consumidores que lo hacen desde temprana edad. Las distintas advertencias juegan un rol muy importante ya que arrastra consigo fumadores pasivos. La OMS recomienda a los gobiernos incrementar el precio de los cigarrillos ya que se ha demostrado ser una medida efectiva para el control del tabaquismo con ello, se alentaría al consumidor a dejar de fumar, previniendo el inicio del consumo en jóvenes, desalentando a exfumadores a reincidir y disminuyendo el consumo entre los fumadores con la siguiente reducción de carga de enfermedad y costos sanitarios (Ariel, et al., 2016). Según la Campaña para Niños Libres de Tabaco (2007) Aumentar el 10% del precio real del tabaco reduce la cantidad de fumadores jóvenes en un 3.5%. por otro lado, en México se reducirá en un 1.1% a corto plazo y en un 7.3% a largo plazo, también reducirá la cantidad de consumidores pasivos en un 7%.
En tercer lugar, los problemas sociales alrededor de un consumidor de tabaco principalmente las secuelas son recargadas a las personas de su entorno y que este no mide las consecuencias que puede causar. Fumar tiende a una adicción, secuela a una dependencia y conducta aprendida la cual trae perdidas personales de autocontrol y por consecuencia la mala administración de sus recursos, malgastando en sus impulsos de consumo de tabaco, de manera que perjudica a las personas de su entorno provocando problemas económicos y de vinculo y que además en los hogares más pobres se gasta un porcentaje del dinero que podría ser usado para satisfacer sus necesidades básicas como en vestimenta, alimentación, salud, etc. Entre las evidencias da a conocer que fumar es una dependencia y hay muestra que más del 90% de los fumadores fuman diario, que los síntomas de abstinencia al tabaco se tranquiliza al administrarse nicotina, y que existe dificultad para su abandono con recaídas frecuentes y además en una economía familiar esta propenso a dejar sin una fuente de ingreso o ahorro, ocasionando múltiples conflictos(Pinillos, 2005: 15-16).
Por último, la adaptación de los cigarrillos con la tecnología está aumentando los consumidores, pero hay un lado de la población más vulnerable, los jóvenes y adolescentes ellos son los más afectados ante esta epidemia del tabaquismo. Y pongámonos a pensar que sería si esta epidemia sigue aumentando, con ello sumaria las enfermedades cardiovasculares y enfermedades pulmonares. Según la OMS “el contagio del tabaquismo mata a más de 8 millones de personas al año, de las cuales más de 7 millones forman parte de los consumidores directos y 1.2 millones son fumadores pasivos”. Sin embargo, hay una estimación o ejemplo para años posteriores. Pinillos, L. Quesquén, M. Bautista, F. Poquioma, E. afirman que “10 millones morirán por año a partir del 2030, de ellos 7 millones serán de países desarrollados”. Estamos entrando en una etapa de genocidio por culpa de las enfermedades que arrastra consigo el fumar cigarrillos.
En conclusión, si las personas siguen consumiendo el cigarro sin tener en cuenta las consecuencias que les podría ocasionar, se corre el peligro de que las industrias tabacaleras sigan viendo al tabaco como un negocio redondo, que el tabaco se siga transformando en un cáncer hereditario, que las secuelas del tabaco recaigan en las personas que están en el entorno del consumidor y que aumente los consumidores más que nada en los adolescentes. Yo considero que las personas deberían renunciar a fumar ya que actualmente dañan su salud tanto física como psicológica, asimismo también afecta a las personas de su entorno ya sea familiares o amigos e incluso personas no cercanas a ellos.
