Lo que Todavía Nos Une en Europa
José Ignacio Torreblanca abre una discusión en el periodico “El País” con unas cuestiones que plantea Ralf Fuchs (presidente de la Fundación Heinrich Böll) y que son las siguientes: ¿Tiene Europa futuro? ¿qué es lo que nos une? Y ¿Cómo será dentro de diez años?
¿Qué nos une? Abordando la segunda cuestión el autor se centra en tres puntos:
- En el marco histórico y, aunque considera que la historia no es aceptable por la sociedad, nos plantea como los Estados de nuestra Unión Europea son capaces de gestionar sus diferencias con respecto a otros Estados que no son miembros de esta. Ante esto coincido, pues anteriormente la historia europea esta plagada de guerras y confrontaciones que con el Manifiesto de Ventotene comienza la idea y los inicios para “una Europa libre y unida” surge así los orígenes de nuestra UE, abogando por resolver los conflictos entre los estados miembros pacíficamente. Trabajando por unas ideas en principio, de libre comercio y mantener la paz, para luego ir evolucionando, ampliando competencias a la Europa que conocemos en la actualidad. Según el Libro Blanco sobre el Futuro de Europa son más de 70 años de paz así que, no hay duda de que sí es aceptable el marco histórico para saber qué es lo que no une.
- El segundo punto que aborda José Ignacio es que queremos ser gobernados por reglas que sean eficaces, basados en la compartición de la soberanía y tutelados por un orden superior como es el Tribunal de Justicia Europeo. Ante esto, la sociedad tiene la percepción de que Europa nos rige y esto es así, al ser una Organización Supranacional a la que se le ha otorgado competencias soberanas, sin embargo lo que desconocen es que no se le puede culpar de la situación de crisis actual a ésta, sino a un cúmulo de situaciones como la crisis económica de Estados Unidos y a los dirigentes políticos de los propios estados que no han sabido distribuir nuestros recursos correctamente, muestra de ello es la reforma constitucional que tuvo que realizar España del artículo 135 CE para lograr una estabilidad presupuestaria.
- El tercer punto que aborda para saber qué nos une “son los valores y que los europeos queremos una Europa abierta y solidaria y ante todo que sea sostenible”. Ante este punto solo hay que acudir al Libro Blanco sobre el Futuro de Europa, en cual nos muestra los valores que ha unido a Europa, como el de la dignidad humana, la libertad y la democracia como fundamentales, de la cual el ciudadano europeo disfruta sin conocer el origen de estos (pag.6). También muestra los factores impulsores para el futuro de Europa, como es nuestro mercado económico europeo y cómo es de fuerte siendo un mercado único, cosa imposible si lo realizáramos cada estado independientemente. Somos una gran potencia mundial al igual que somos los más solidarios en ayudas humanitarias siendo el desarrollo y el cambio climático alguno de los puntos que también aborda nuestra UE.
El autor nos muestra el déficit de confianza que surge de los europeos ante la Unión Europea, pero en parte es por el desconocimiento de la labor que conllevan y por la pésima organización de la distribución de los recursos por parte de nuestros dirigentes.
Otra de las cuestiones que no se aborda en el blog y opción querida por Estados Unidos y Rusia ya que estos querrían la fragmentación, es el temor al “efecto dominó” que podría conllevar con la salida del Reino Unido de la Unión Europea al haber invocado en 2017, tras haber realizado un referéndum, el artículo 50 del Tratado de Lisboa que establece los mecanismos de retirada de un estado miembro. Considerando la cuestión y viendo el panorama político inestable, que aún pasado el plazo no solo Reino Unido y la Unión Europea no se ponen de acuerdo en los términos con respecto a la salida, y que el propio estado tampoco lo hace internamente, considero que el efecto dominó no se llevará a cabo.
Otro de los puntos de desconfianza es el de las fronteras; Ha crecido un temor y un escepticismo ante la ola de inmigrantes a aceptarlos por varias causas: la primera, el recelo a la pérdida de recursos básicos sociales de las que antes se beneficiaban. La segunda por el miedo a nuevos ataques terroristas después de los causados en diversos países como Francia, Bélgica, Alemania, Reino Unido, Suecia y España. Esto junto con los dirigentes que han politizado el miedo están haciendo un concepto de ciudadanía clásica por el cual se considera al inmigrante, un ciudadano de segunda y no un igual. Un ensayista como Todorov nos dice “que extranjeros somos todos” y “que barbaros son los que nos son capaces de ponerse en la piel del otro”. ¿Por qué entonces debemos relegar al inmigrante a ciudadano de segunda? Es una cuestión que demos hacernos internamente para seguir evolucionando sin la perdida de valores que fomenta nuestra Unión Europea.
Acerca del futuro de la UE, el Libro Blanco firmado por 27 estados miembros plantea cinco escenarios diferentes para 2025:
El primero, “seguir igual” en el cual se preserva la unión de los 27 estados miembros y se centra en cumplir los programas de reformas que pueden dar resultados concretos, aunque como inconvenientes plantean discrepancias entre los propios estados en la toma de decisiones y que, para que sea efectiva será necesaria de la voluntad de todos para alcanzar los resultados conjuntamente, así como que, en las fronteras mejoraría la coordinación en materia de seguridad.
El segundo, “solo el mercado único” en este solo se centran en el mercado único y aunque la toma de decisiones será más fácil para los Estados miembros puede haber una perdida o limitaciones en los derechos garantizados para los europeos, las fronteras interiores de la UE serían más sistemáticas.
El tercero, “los que desean hacer más, hacen más” en este aspecto la UE funcionaría como lo hace actualmente, pero permitiría a los Estados que quisieran, el que pudieran aportar más en materias especificas como puede ser defensa, justicia, fiscalidad o normas sociales. Con respecto a las fronteras se va a intensificar la coordinación en materia de seguridad. Como inconveniente la UE se volvería más compleja ya que habría estados con acuerdos de coordinación y otros no, por lo cual habrá europeos que según el estado tendrán unos derechos garantizados que en otros estados miembros no podrán disfrutar.
El cuarto, “hacer menos de forma eficiente” como inconveniente a este es que, los estados se centrarían solo en los puntos en los que ellos consideren que tienen prioridad y aunque sean más eficientes la cuestión que me realizo es ¿Qué van a considerar que prioriza más, para el ciudadano europeo? Como punto fuerte es que se coordinaran conjuntamente para gestionar las fronteras y la lucha contra el terrorismo.
El quinto, “Hacer mucho más conjuntamente” algo difícil de llevar a cabo y quizás utópico porque, aunque se agilizaría con ello la toma de decisiones en todos los ámbitos políticos y el ciudadano optaría a obtener más derechos, esto conllevaría un aumento de pérdidas de soberanas de los propios estados.
Realmente dentro de diez años la UE estará más unida y seguirá trabajando conjuntamente por las mejoras, seguirá evolucionando ya que solo no les preocupa el mercado único, sino que sus preocupaciones se han ido ampliando como el paro juvenil, la población envejecida y la necesidad de una población formada, las tecnologías verdes, investigación… entre otros y se han ido añadiendo a la cartera de los dirigentes europeos.
Europa seguirá haciéndose fuerte aún con la salida de un estado miembro, que conllevará la realización de nuevos tratados internacionales.
La preocupación por la situación de Turquía y su evolución, el hecho de que los estados miembros quieran actuar con la negativa a la venta de armas a Turquía a la que nuestro propio Estado se ha sumado y el rechazo general, es una gran muestra por mantener la paz global.
Considero que los euroescépticos no son conscientes de las funciones que tiene realmente la Unión Europea sino cambiarían de parecer.