Paridad en el Congreso de México y La Gobernación por Mujeres

Introducción

México, país soberano y democrático. Si bien a lo largo de la historia la representación que le damos a la mujer no es de gran brío, ya que la ponemos en una posición de debilidad, dependencia, incapacidad y que solo sirve para procrear hijos, hacer los oficios del hogar y servir al hombre en sus necesidades. Esta mentalidad fue provocada desde los inicios de la vida humana, cuando la mujer se tuvo que ausentar de las actividades de caza y guerra entre los pueblos por su fisiología que le impedía realizar esos trabajos, por lo tanto, se le fue desvalorizando mas porque ya no les servía.

A consecuencia de esto la mujer y el hombre viven con estereotipos toda la vida, de lo que pueden hacer y lo que no. Actualmente en el mundo nos encontramos con esas etiquetas de “el azul es para el hombre y el rosa para la mujer”, “los hombres no lloran”, “los hombres deben estudiar ingeniería y las mujeres arte”, “el hombre es fuerte y la mujer es débil”, “las mujeres deben aprender a cocinar para poder casarse”, hasta en los simples comerciales y propaganda donde la mujer es el personaje principal de anuncios sobre limpieza y el hombre lo es para promocionar la cerveza, estos estereotipos se nos hacen normales y no les tomamos importancia, es normal que un niño juegue con carritos y soldados, que una niña juegue a ser una princesa, jugar con su cocinita o con sus muñecas, pero cuando los papeles se invierten comienzan los problemas, este cliché solo provoca el desbalance e inequidad entre los géneros, y lo peor, provoca la lucha de ¿Quién es mejor?.

Ante estas circunstancias la mujer ha tenido que combatir mediante revoluciones, ideologías y marchas para obtener los mismos beneficios que los hombres, poder tener acceso a la educación, al decidir el orden político de un país a través del voto, el lograr alcanzar el mismo salario que tiene un hombre cuando ambos hacen el mismo trabajo, hasta tener el acceso de servir militarmente al país.

El día 26 de agosto de 1789 fue celebrada la Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano que surgen por un abuso de los poderes públicos hacia la ciudadanía, y por el exceso sometimiento en el que se encontraban los esclavos. Con la creación de los derechos de la mujer se representa esa liberación a la que hemos estado sometidas durante un extenso periodo del tiempo.

Al decir que todos somo iguales ante la ley no nos beneficia completamente, ya que sigue existiendo un techo de cristal, creemos que por fin logramos tener un mínimo de equidad, pero algo nos detiene, son esos obstáculos de los que no nos damos cuenta porque no salen a la luz o nos acostumbramos a no luchar por ir más allá porque sabemos que siempre habrá algo que nos lo impida. En ciertos Estados todavía se le prohíbe a la madre el no reconocer a su hijo mientras que el padre queda libre de esa prohibición, este derecho subjetivo es muy desigual también, podemos recordar que para disolver el matrimonio nosotras teníamos que conseguir pruebas bastantes complicadas para seguir el debido proceso, mientras a ellos solo bastaba con expresar la disolución ¿Por qué?

Tener una colaboracion igualitaria en los diferentes ámbitos; sociales, laborales, educativos, políticos, deportivos, etc. Ayuda a disminuir las cargas, el hombre no es el único que tiene que aportar económicamente al sustento del hogar, así como la mujer no es la única que tiene que lavar los platos. Las actividades realizadas tanto por hombres como mujeres tienen un cierto grado de dificultad, pero esto no debería ser un impedimento para poder tener el acceso a ellas.

En materia política este desbalance de igualdad se trata de erradicar otorgando puestos públicos de relevante importancia también a las mujeres, sin embargo, todavía es muy poca su participación en ellos. Es fundamental el entorno cultural en el que se encuentre el país ya que en algunos de Latinoamérica todavía existe esa ideología machista, por lo tanto, los partidos políticos no se arriesgan a elegir de candidato a la presidencia a una mujer porque tienen mayores probabilidades de perder y no es porque no tenga la capacidad de gobernar a un país, es mas bien porque la representación que tienen de la mujer en estos países incluyendo el nuestro es equivoca.

El Congreso de la Unión es uno de los órganos con mayor importancia legislativa, el cual esta conformado por diputados y senadores donde se les deposita varias responsabilidades y facultades de suma importancia para llevar a cabo una buena administración del país, formar parte del Congreso es una verdadera fortuna que muy pocos la obtienen y dentro de esos pocos muy pocas son mujeres.

El papel de la mujer en el gobierno es muy efímero, quienes logran obtener puestos relativamente importantes lo hacen por un periodo determinado y después de ellas ya no hay otras, la brecha de tiempo para que ese lugar vuelva a ser ocupado por una mujer es muy extensa, pero ¿A qué se debe?

Desarrollo

México atravesó por diversas situaciones políticas de gran relevancia para la constitución de la democracia, podemos recordar los 71 años consecutivos que gobernó el Partido Revolucionario Institucional nuestro país, con este acto se puede demostrar el sometimiento en el que se encontraba el Estado Mexicano al no haber alternancia en el gobierno. Es por eso que se han creado diversas instituciones como como el Instituto Federal Electoral, el Instituto Nacional de las Mujeres y la Comisión Nacional de los Derechos Humanos a consecuencia de las profundas desigualdades sociales y con el objetivo de presentar la situación que guarda en particular la participación política de las mujeres indígenas en México (Comision Nacional de los Derechos Humanos, 2009).

Es importante distinguir cuando estamos ante una situación de discriminación y desigualdad, ya que cuando se nos hace a un lado es por alguna de estas dos razones, la primera se da cuando una persona considera inferior a otro individuo por alguna característica o atributo que no resulta agradable para quien discrimina (Rodriguez J. , 2007) Nos encontramos en la segunda situación cuando una persona se encuentra vulnerable producto de un nivel insuficiente e inseguro por lo tanto tiene desventaja sobre la otra por su género, condición económica, raza, características físicas, posición laboral (Insulza).

Las personas indígenas se incluyen en este contexto de discriminación y desigualdad para participar en puestos públicos de mayor jerarquía, dentro de estas comunidades indígenas existen sus propios puestos para la administración de sus pueblos, los cuales generalmente son ocupados por hombres, ya que son los hombres los que participan, en reuniones de ejidatarios; las mujeres sólo cuando son viudas, las mujeres no participan, sólo se dedican al hogar, si es que hay participación es muy limitada, por ejemplo: en comités de educación en programas como oportunidades, los hombres “tienen privilegios” de gobernar desde épocas históricas, las mujeres no tienen libertad de expresión. (Comision Nacional de los Derechos Humanos, 2009).

Existe una controversia entre aquellos que piensan que la rotación del poder ejecutivo debería de durar mas de 6 años para mostrar cambios relevantes en la estructura del país, y otros argumentan que es suficiente los 6 años, pero dentro esta batalla por el dominio todos quieren ganar a beneficio propio y no por el de los demás, es aún más complicado para la mujer el querer ocupar puestos que los hombres entre ellos mismos pelean. La única visión que le hemos dado a la mujer en relación a la Presidencia de la Republica es como “Primera Dama”, título que se le otorga a una mujer por ser esposa del presidente del país o como miembro del Gabinete.

Sabemos que el poder en México está dividido en tres partes; el poder ejecutivo, judicial y legislativo. El poder ejecutivo esta formado principalmente por el presidente de la república, los gobernadores de los Estados y los presidentes municipales dentro de esta rama en 1984 fue por primera vez que una mujer fue candidata a la presidencia, Rosario Ibarra de Piedra seria quien abriría este camino a las mujeres, ya que fue postulada por el Partido Revolucionario de los Trabajadores, en 1994 dos mujeres competirían también por este puesto junto con siete hombres más, hasta el momento ninguna de las seis mujeres que se has postulado para le presidencia lo han logrado, sin embargo países como Argentina, Brasil, Chile, Costa Rica, Bolivia han sido gobernados por mujeres al igual que en el continente Europeo las mujeres ocupan cargos como Primer Ministro, Cancilleres y presidentas.

En puestos de gobernaturas las mujeres también se quedan atrás, el 17 de octubre de 1953 se da una de las más grandes victorias para la igualdad entre hombres y mujeres, el derecho al voto y ser votadas, pero no fue hasta 1979 donde se dio lugar a la primera mujer gobernadora de un Estado de la Republica, Colima, el cual fue gobernado por Griselda Álvarez Ponce de León y después de ella le siguieron nueve más.

Solo nueve mujeres, es como un átomo en el universo, una nada si comparamos con las veces que los hombres han sido gobernadores. México está conformado por 2457 municipios, el 43 por ciento de los municipios del país han tenido al menos una presidenta municipal (Urzua, 2017).

Ahora en el ámbito judicial, el cual está formado por ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, jueces y magistrados, la Corte se encuentra a cargo de un presidente el cual nunca ha sido ocupado por una mujer desde su fundación, esta se divide en dos salas, ambas están conformadas por cinco ministros cada una y dentro de ellas solo hay una mujer en cada sala, es decir dos mujeres y ocho hombres ocupan cargos dentro de las salas.

El Tribunal Electoral se integra por siete magistrados, de los cuales, también sólo dos son mujeres. Sin embargo, en este caso, dicho órgano está presidido por la Magistrada Janine Otálora Malassis. De las seis salas regionales con 18 magistrados en total, seis son mujeres, de las cuales tres son presidentas de Sala. Así mismo en el Consejo de la Judicatura Federal hay siete consejeros de los cuales sólo dos son mujeres: las consejeras Martha María del Carmen Hernández Álvarez y Rosa Elena González Tirado (Sanchez, s.f.).

Es preciso decir, que la participación de la mujer en el Tribunal Electoral es de vital importancia ya que es el que este tribunal se encarga de preservar los derechos políticos y electorales, así mismo las discusiones que se lleven a cabo durante las elecciones, si queremos ser parte de cargos que se ocupen por medio de sufragio debemos de tener una representante que abogue por nosotras.

Dentro del poder legislativo encontramos diputados y senadores los cuales se establecen en el Congreso de la Unión y actualmente está conformado por 63 senadoras y 65 senadores, el Partido Acción Nacional y el Partido del Trabajo son quienes más han postulado a mujeres para ser parte del Senado, esto en proporción de los hombres que postularon los partidos antes mencionados. Respecto a los diputados el partido de Movimiento Regeneración Nacional (Morena) es el que más integro a las mujeres.

Las mujeres ocupan el 24% de los curules de las cámaras altas y bajas. De las 39,098 posiciones que existen en la cámara baja solamente 9,371 son ocupados por mujeres, la cámara alta cuenta con 6,978 posiciones de las cuales 1,679 son ocupadas por mujeres, esta información esta actualizada al primero de octubre de 2018 (Instituto Mexicano para la Competitivad, 2018).

Obtener esta participación aproximada a la de los hombres dentro del Congreso es un paso más hacia la equidad, lograr ocupar un asiento no significa que lo hemos alcanzado todo, hay que llegar para poder abrirle las puertas a las de más que vienen, opinar y legislar a favor de lo que nos conviene y nos interesa, porque si solo nos conformamos con llegar al puesto y no saber qué hacer o no hacer nada, ¿Qué estaríamos haciendo? lo ordinario, no generaríamos nada productivo.

La política va más allá de diputados y senadores, es saber organizar una sociedad, se puede decir que la política es un ejercicio manejado por hombres y para hombres ya que esta cubierta de poder y dinero. La sociedad a diseñado a la mujer con roles que impliquen afecto y sentimientos, la vemos como maestra, diseñadora y secretaria, en cambio el hombre ha sido creado para los trabajos que impliquen dominio y peculio, jefes de oficina, gobernantes y empresarios.

Se le tuvo que imponer a los partidos políticos la paridad de genero en candidaturas legislativas, esto significa que para lograr una equidad o un cambio fue necesario obligar a otros sujetos hender sus caminos para dejar entrar a mujeres.

El desequilibrio en favor de los hombres se repite prácticamente en todo tipo de organizaciones, si bien se puede señalar que tan solo en las organizaciones de mujeres y en las benéficas se advierte la tendencia y hay más mujeres que hombres (Uriarte, 1995). Si bien estos datos son de procedencia española no habría la duda que estas cuestiones pasan también alrededor del mundo, ya que existen países en donde ni siquiera se le permite controlar un vehículo a una mujer. Por eso es importante tener alguien que nos dé voz en la toma de decisiones que se presenten en estos ámbitos legislativos y que ocupen cargos dentro del gobierno, tal vez, sí, cualquier persona, cualquier hombre podría tomar las decisiones sobre nosotras porque así se ha hecho, sin embargo, debe ser alguien que entienda el significado de lo que representa para nosotros. Mexico como país no podría legislar leyes de otros países, porque no sabríamos verdaderamente el sentido de esa ley, solo la propondríamos por proponer, lo mismo sucede con las mujeres en el mundo de hombres, la política, que ellos decidan si podemos abortar o no ¿sería justo? No, no sería justo, pero tampoco es hacerlos a un lado es más bien trabajar en conjunto.

Las mujeres en el gobierno han sido una fuerza crítica para aprobar cualquier legislación que tiene que ver con las mujeres, desde leyes contra la violación hasta programas educativos y guarderías (Rodriguez V. E., 1999).

No es una competencia para saber quien es mejor si no un camino que tenemos que recorrer para lograr la igualdad. A saber, la Declaración Universal de los Derechos Humanos establece que toda persona tiene derecho a participar en el gobierno de su país. La participación igualitaria de la mujer en decisiones políticas no en una exigencia básica es más bien una condición necesaria para tener en cuenta los intereses y necesidades de la mujer (ONU Mujeres, 2014). nuestra Constitución, la Ley Electoral y la Ley de los partidos, promueven esta paridad entre los géneros.

El articulo 7 de la Ley General de Instituciones y Procedimientos Electorales establece que es obligación de los partidos políticos la igualdad de oportunidades y la paridad entre hombres y mujeres para tener acceso a cargos de elección popular. ¿Qué pasa con los cargos que no son de elección popular? No existe esa paridad, porque no hay algo que lo regule, en el mundo ideal que tanto hombres como mujeres comparten y no suprimen.

La participación que buscamos no es solamente que nos dejen votar o elegir un partido, es más bien que nos dejen ser parte ello, nos compartan proyectos, ideas, decisiones, necesitamos una participación más activa porque nos encontramos en una esfera, donde solo podemos tomar las decisiones fuera de ella sin adentrarnos a lo que verdaderamente está pasando.

Después de que una mujer ocupa y ni vuelve a haber otras en un largo tiempo es porque existen barreras que no dejan avanzar, otros aspectos que también hay que cubrir aparte de querer ocupar puestos públicos, para seguir teniendo un progreso. La violencia contra la mujer por el simple hecho de su género es una de las principales barreras, al igual que la educación, antes las mujeres no podían ingresar a los sistemas educativos porque solo era para beneficio de los hombres, sin embargo en los últimos años ha ido creciendo la cantidad de mujeres egresadas de universidades, esto es un indicador de que estamos en busca de un cambio que nos brinde mejores oportunidades, tenemos esa curiosidad y necesidad de participar en actividades que nunca se nos había permitido ser parte.

Conclusión

¿Esta México preparado para ser gobernado por una mujer?

Si lo está, si ha sido gobernado por hombres porque no lo estaría para ser gobernado por mujeres, le tenemos miedo al cambio, pero cada seis años se realiza, estamos acostumbrados a lo mismo por eso nos da temor hacer algo diferente.

Es necesario que gobierno promueva los derechos de las mujeres como alguna vez promovieron su campaña, que vayan a las zonas más marginadas del país para promover la educación y otra perspectiva de la mujer, que no sean como los estereotipos, es necesario que en nuestros vínculos familiares y sociales promovamos también los derechos de la mujer, estemos más informados sobre qué beneficios se nos brindan a nosotros como mujeres y que es lo que se nos quita, en que ámbitos estamos en desiguales hacia los hombres.

¿Es suficiente? ¿Es suficiente que solo nos representen 63 senadoras en el congreso? ¿Es suficiente que solo 9 mujeres hayan alcanzado el puesto de gobernadoras? ¿Es suficiente que la ley exprese que somos iguales que los hombres? ¿Es suficiente que solo se nos de importancia porque damos vida en nuestro vientre? ¿Es suficiente que solo se nos vea como mujeres de casa y cuidadoras?

No, no es suficiente, en México hay alrededor de sesenta mil millones de mujeres, muchas de ellas en condiciones de pobreza, falta de educación y que sufren algún tipo de violencia en sus trabajos o familia.

El legado que nos dejan esas pocas mujeres dentro de la política es muy significativo porque quiere decir que por lo menos una lo intento y lo logro, ellas nos representan a las que no podemos estar ahí, proponen para hacer mejoras y abrirles camino a las que vienen y quieren lo mismo, es necesario demostrar que nosotras también podemos. La ley podrá reconocer de manera formal los derechos de la mujer, pero todavía existen dificultades que no podemos enfrentar estando fuera del círculo.

México país soberano y democrático, ¿pero en verdad aprovechamos eso? La soberanía representa la independencia que tienen los Estados teniendo en base la Constitución en donde sostiene que la soberanía reside esencial y originariamente del pueblo para beneficio de este y la democracia es la facultad que tenemos como ciudadanos mexicanos para votar libremente, pero va más allá de eso, la democracia significa el respeto a los derechos fundamentales, nuestro Estado mexicano participa activamente en la promoción de la democracia a través de diversos organismos internacionales y regionales como la ONU, la OEA y otros (Secretaria de Relaciones Exteriores, 2014).

Los partidos políticos son una herramienta para alcanzar puestos públicos, la participación de las mujeres dentro de ellos va en aumento, sin embargo, ser partidario de alguno de estos no es la única herramienta que se nos da para lograr tener participación dentro del gobierno, pues muchas personas deciden hacerlo de forma independiente.

Hombres y mujeres, ciudadanos y extranjeros, jefes y empleados, siempre hemos vivido en estratificaciones sociales, hemos impuesto jerarquías entre nosotros mismos, pero alguna vez pudimos dar ese cambio, para pasar del tercer nivel a estar en el primero.

Permitir que la mujer sea representante de cargos públicos en proporción igual a los hombres, no significará que hemos tomado ventaja sobre ellos o que somos superiores, el verdadero significado será que, por fin este grupo de la sociedad ha logrado un equilibrio el cual abrirá camino a las demás personas en situaciones de desigualdad.

Bibliografía

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• ONU Mujeres. (2014). Declaracion y Plataforma de Accion de Beijing/Declaracion politica y documentos resultados de Beijing+5.
• Rodriguez, J. (2007). ¿Que es la discriminacion y como combatirla? En M. Carbonell, J. Rodriguez, R. R. Garcia, & R. Gutierrez, Discriminacion, Igualdad y Diferencia Politica (pág. 62). Mexico.
• Rodriguez, V. E. (1999). Las Mujeres y el Cambio Politico en Mexico. La Ventana, 63.
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• Secretaria de Relaciones Exteriores. (21 de Agosto de 2014). Democracia en Mexico. Obtenido de gob.mx: https://www.gob.mx/sre/es/acciones-y-programas/democracia-en-mexico
• Uriarte, E. (1995). Mujer y Politica en España. Universidad del Pais Vasco.
• Urzua, M. G. (12 de diciembre de 2017). Mil 523 presidentas municipales a lo largo de 70 años. Obtenido de Al Momento Mx: https://almomento.mx/mil-523-presidentas-municipales-a-lo-largo-70-anos/