Potencia Mundial Y Su Deuda Externa

Introducción

Al pensar en los Estados Unidos de América, me viene a la mente el hecho de que es uno de los países más grandes y poderosos del mundo, e incluso ha sido catalogado como una potencia mundial que tiene influencia tanto a nivel político como económico, pero no ¿Alguien sabe la verdad detrás de la grandeza de Estados Unidos? ¡Quién puede imaginarse que uno de los países más influyentes del mundo tiene una deuda externa de billones de dólares! Esta cantidad es mayor que lo que vale Estados Unidos. Algunos dirían que con la cantidad de dinero que recauda y controla Estados Unidos, esta deuda ya debería haberse saldado, pero por el contrario, la deuda está aumentando a un ritmo alarmante.

Desarrollo

Al parecer Estados Unidos se ha acostumbrado a vivir en medio de las deudas y en la actualidad sus finanzas públicas verifican este hecho. Sin embargo, la problemática radica en que los mismos integrantes de la población desconocen o ignorar el gigantesco déficit financiero producto de la deuda externa, tal y como lo expone Robert Kelly a continuación: la necesidad de mantener un dinero sólido. Pero su relación con un concepto esotérico como una deuda pública medida en billones escapa a la mayoría. Lo que les impide exigir una solución por parte del gobierno actual. Por tal razón, el presente trabajo se ha ejecutado con el objetivo de exponer las causas del aumento desmesurado de la deuda externa.

Esa deuda con Estados Unidos que aproximadamente tiene un valor de más de 22 billones de dólares, para que el lector se informe sobre esta problemática y apoye los proyectos de gobierno que impulsen políticas para reducirla, los cuales permitirían minimizar el impacto de las crisis económicas que podrían tener la nación en el futuro. Propuestas que se necesitan de manera urgente por la inquietante situación de Estados Unidos, que se da a conocer brevemente a través del siguiente fragmento: “Legislación presupuestaria importante firmada por el presidente Donald J. Trump, junto con un crecimiento continuo de los derechos y tasas de interés más altas.

Se  verá que la deuda casi se duplicará para 2029, acercándose al tamaño de toda la economía estadounidense. A lo largo del texto se desarrollaran los siguientes puntos: la falta de reglamentación fiscal respecto a los gastos públicos en relación con el aumento de la deuda, la inversión en programas sociales que han contribuido a la intensificación de la misma, por último el papel de la guerra y la deuda pública. Así como el rol de los principales períodos gubernamentales respecto al desarrollo de esta problemática. La Segunda Guerra Mundial es considerada por diversos historiadores el punto de partida para el crecimiento progresivo y acelerado de la deuda pública del país Norteamericano.

Debido a que fue un período en el que el gobierno estadounidense tuvo que invertir grandes cantidades de dinero para solventar los gastos del conflicto bélico, tal y como se expone a continuación: “El gasto en defensa durante la guerra condujo a un endeudamiento sin precedentes, y la deuda se disparó a más del 100 por ciento del producto interno bruto (PIB) en 1946. Durante esta época quien ocupaba el cargo como Presidente era Franklin D. Roosevelt, quien ha sido frecuentemente cuestionado por el aumento de la deuda externa, debido a que se le atribuye el hecho de usar los recursos públicos para liderar programas sociales.

Estos programas tenían el objetivo de captar la política a su favor, lo cual se declara en el siguiente fragmento: “Roosevelt tiene alguna responsabilidad por la deuda pública en el sentido que mostró cómo se puede crear una base impositiva, cómo se puede invadir el sector privado y cómo ciertos programas sociales como la atención a los ancianos, los veteranos y los desempleados pueden traer gran popularidad a un político. Por otro lado, cabe destacar que el problema no consiste en el desarrollo de programas sociales, debido a que estos en realidad traen grandes beneficios a la comunidad, sin embargo, los planes de desarrollo deben tener proyectado una manera específica.

Debe especificarse como se financiaran esos proyectos y también que estrategias económicas se utilizan para recaudar los recursos invertidos, para prevenir el acrecentamiento del déficit. Por ejemplo, a medida que el número de adultos mayores norteamericanos es mayor se deben implementar más programas sociales que los respalden, por ende se incrementa la inversión necesaria para ejecutarlos. Como se enuncia a continuación: “La proporción de la población de 65 años o más se ha duplicado, pasando del 9,3 por ciento en 1960 al 18,5 por ciento en 2015 (según datos de las Naciones Unidas). El gasto del gobierno en programas para ayudar a los ancianos ha aumentado.

En consecuencia, para prevenir el acrecentamiento del déficit financiero. Por ejemplo, a medida que el número de adultos mayores norteamericanos es mayor se deben implementar más programas sociales que los respalden, por ende se incrementa la inversión necesaria para ejecutarlos. Como se enuncia a continuación: “La proporción de la población de 65 años o más se ha duplicado, pasando del 9,3 por ciento en 1960 al 18,5 por ciento en 2015 (según datos de las Naciones Unidas). El gasto del gobierno en programas para ayudar a los ancianos ha aumentado en consecuencia. Para prevenir  Por ejemplo, a medida que el número de adultos mayores norteamericanos es mayor se deben implementar más programas sociales que los respalden.

Conclusión 

por ende se incrementa la inversión necesaria para ejecutarlos. Como se enuncia a continuación: “La proporción de la población de 65 años o más se ha duplicado, pasando del 9,3 por ciento en 1960 al 18,5 por ciento en 2015 (según datos de las Naciones Unidas). El gasto del gobierno en programas para ayudar a los ancianos ha aumentado en consecuencia, pasando del 9,3 por ciento en 1960 al 18,5 por ciento en 2015 (según datos de las Naciones Unidas). El gasto del gobierno en programas para ayudar a los ancianos ha aumentado en consecuencia” pasando del 9,3 por ciento en 1960 al 18,5 por ciento en 2015 (según datos de las Naciones Unidas). El gasto del gobierno en programas para ayudar a los ancianos ha aumentado en consecuencia.