Reciclar Despercios Alimentarios
Introducción
Lo mejor que le puede pasar a la comida es que llegue a nuestros platos y se disfrute. Evitar tirar alimentos que podrían haberse comido le permitirá ahorrar dinero y ayudará a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero. Sin embargo, algo de desperdicio de alimentos es inevitable: cáscaras de huevo, cáscaras de plátano y bolsitas de té nunca estarán en el menú. El compostaje doméstico es una excelente manera de evitar que este tipo de desechos terminen en los vertederos, y nuestros jardines realmente nos lo agradecerán.
Si vive en un área que tiene un servicio local de recolección de reciclaje de desechos de alimentos, puede usarlo para deshacerse de cualquier cosa que no pueda comer o hacer abono en casa. Puede reciclarse en un mejorador del suelo o fertilizante de buena calidad e incluso generar electricidad que puede retroalimentarse a la red nacional. Puede comprobar si su autoridad local ofrece un servicio de recogida de residuos de alimentos en nuestro Localizador de reciclaje.
Desarrollo
Cada año, los hogares del Reino Unido tiran alrededor de 7 millones de toneladas de alimentos, y la mayor parte podría haberse comido. Poco a poco todo este desperdicio se acumula, durante un año, la familia promedio tira alrededor de £ 700 en compras de alimentos, lo que equivale a una factura anual de servicios públicos. Algunos de los desechos se componen de cosas como cáscaras, núcleos y huesos, pero la mayoría es, o alguna vez fue, comida perfectamente buena.
La mayor parte termina en vertederos donde se pudre y libera metano, un gas de efecto invernadero dañino. Tirar los alimentos también es un gran desperdicio de energía, agua y envases utilizados en su producción, transporte y almacenamiento. Si todos dejáramos de desperdiciar la comida que podría haberse consumido, tendría el mismo impacto de CO 2 que sacar 1 de cada 4 automóviles de las carreteras del Reino Unido. Muchos ayuntamientos ahora recolectan desperdicios de alimentos, que se pueden reciclar de varias maneras, entre ellas:
El compostaje en recipientes implica mezclar desechos de alimentos con desechos de jardín, triturarlos y luego compostarlos en un sistema cerrado durante aproximadamente 2-4 semanas (temperaturas de hasta 70 ° C aceleran el proceso y aseguran la eliminación de microbios dañinos). Luego, el material se deja en el exterior para que madure durante 1 a 3 meses más con vueltas y controles regulares para garantizar la calidad antes se lo como acondicionador.
La digestión anaeróbica utiliza microorganismos para descomponer los desechos de alimentos, estiércol animal, purines y cultivos energéticos en ausencia de oxígeno, dentro de un sistema cerrado. A medida que se descompone, emite metano, que se recoge y se convierte en biogás y se utiliza para generar electricidad, calor o combustibles de transporte. También crea un digestivo rico en nutrientes que se puede utilizar como fertilizante para la agricultura y en la regeneración de la tierra.
Impacto medioambiental
Reducir el desperdicio de alimentos es un problema importante y no solo se trata de desperdiciar alimentos buenos; El desperdicio de alimentos le cuesta a la familia promedio con niños casi £ 60 al mes y también tiene serias implicaciones ambientales. La cantidad de comida que tiramos es un desperdicio de recursos. Basta pensar en toda la energía, el agua y los envases que se utilizan en la producción, el transporte y el almacenamiento de alimentos. Todo esto se desperdicia cuando tiramos comida perfectamente buena.
El queso es un buen ejemplo: alimentar y ordeñar a las vacas, enfriar y transportar la leche, procesarla en queso, envasarla, llevarla a las tiendas, mantenerla a la temperatura adecuada todo el tiempo. Si luego se desecha, lo más probable es que termine en un vertedero, donde, en lugar de descomponerse inofensivamente como mucha gente piensa, se pudre y libera metano, un poderoso gas de efecto invernadero.
Conclusión
No olvide aprovechar al máximo su comida y bebida y trate de evitar el desperdicio de alimentos en primer lugar. Para obtener ideas, recetas y consejos sencillos, visite Love Food Hate Waste. También puede intentar hacer abono en casa. Un carrito para desechos de alimentos en su cocina puede ayudarlo a separar los desechos de alimentos para reciclarlos y convertirlos en abono. Esto se puede vaciar en el contenedor de abono o en el contenedor de desechos de alimentos del consejo cada dos días.
Es posible que su consejo le recomiende que forre su carrito de desperdicio de alimentos con un papel de diario. Utilice únicamente revestimientos recomendados por su consejo, ya que es posible que algunos no se rompan en el proceso de compostaje. Siempre que sea posible, mantenga sus contenedores alejados de la luz solar directa y mantenga la tapa del contenedor cerrada.
