Representación Del Patriarcado y Poligamia en la Dinastia Fang

Introducción

Dado que el tema que abordamos en esta investigación versa sobre las causas de la poligamia en la etnia Fang, y que a su vez constituye un estudio sobre el patriarcado en Guinea Ecuatorial, es imprescindible ofrecer una fundamentación teórica sobre el concepto de patriarcado para su mejor comprensión. En este sentido, puntualizamos que rastrear los orígenes del patriarcado implica inexorablemente interrogarnos por el dominio del hombre sobre la mujer.

Desarrollo

Contribuir a pensar en que momento de la historia los hombres decidieron que las mujeres tenían que ser sumisas a ellos. No se trata de extender la reflexión sobre este particular, sino que ansiamos comprender una realidad compleja como la subordinación de la mujer al hombre. Los que cuestionan el patriarcado, sobre todo los movimientos feministas, suelen plantear algunos interrogantes como: ¿Es natural la subordinación de la mujer al hombre? ¿Qué legitima a los hombres para invisibilizar a la mujer?

Podría pensarse que se trata de meros interrogantes formulados por la corriente feminista más radical que intenta ir en contra del “orden natural” de las cosas. Precisamente, las feministas cuestionan este “orden natural” que preconiza que los hombres tienen que ser y son superiores a las mujeres. Siguiendo esta cuestión del orden natural de las cosas, ha surgido el concepto de Patriarcado. Cuando se debate sobre el origen y la existencia del patriarcado, la intención no debería ser buscar a los verdugos, sino más bien reflexionar si las cosas pueden ser o hacerse de otra manera, es decir, si al menos puede existir un ápice de igualdad entre hombres y mujeres. 

En su sentido estrictamente etimológico, el patriarcado significa gobierno de los padres. Ahora bien, cuando se habla de padres no parece que se incluya a la mujer, al menos a nosotros no nos lo parece así. Se tiene exclusivamente como referencia al hombre, porque es el padre. En la mayor parte de las culturas que han existido, por no decir en todas ellas, se aprecia con mucha nitidez un patrón común que consiste en que en ellas la mujer tiene un puesto secundario al del hombre, es oprimida y por eso está invisibilizada en la historia.

Por tal razón, Lerner señala que “la cuestión más importante y significativa para el historiador es esta: cómo, cuándo y por qué se produjo la subordinación de las mujeres” (Lerner). Seguramente, de lo que se trata es saber si existió otro sistema que fuese totalmente opuesto al patriarcado. Desde aquí parten los ingentes esfuerzos de muchas feministas en demostrar que en la antigüedad existió una sociedad matriarcal, más o menos igualitaria.

Además, hechos como el rol de las mujeres espartanas o el dominio y poder que tuvo la reina Cleopatra en Egipto, ayudan a defender esta tesis. Aunque existan investigaciones que corroboren la existencia de una hipotética sociedad matriarcal que fue sustituida o asaltada por la patriarcal, la subordinación de la mujer está relacionada con la historia de la especie humana en la tierra. Por tanto, el patriarcado es tan antiguo como la persona humana. El patriarcado se ha valido de las diferencias biológicas existentes entre hombres y mujeres para fundamentar la superioridad masculina. 

Por consiguiente, podemos aducir que los orígenes del patriarcado son muy remotos y se encuentran en las sociedades prehistóricas. Con relación a esto, el patriarcado se presenta como: Una creación histórica elaborada por hombres y mujeres en un proceso que tardó casi 2.500 años en completarse. La primera forma del patriarcado apareció en el estado arcaico. La unidad básica de su organización era la familia patriarcal, que expresaba y generaba constantemente sus normas y valores (Lerner).

Si bien es cierto que el patriarcado es un sistema muy antiguo, también hay que reconocer que se ha convertido en algo que se tiene que demoler con toda urgencia porque deshumaniza a la mujer al subsumirla en un estado psicológico que presenta como normal. Puede decirse que la cocina de la subordinación de la mujer está en el patriarcado porque se ha encargado de adoctrinar a la mujer. La idea de la inferioridad de la mujer ha sido expuesta y defendida de varias maneras. Así mismo, la religión y la mitología también han apoyado esta inferioridad.

Tal como se ha mencionado ut supra, la mayor parte de las sociedades antiguas se han guiado por la estructura patriarcal. En lo que a los pueblos africanos respecta, no se observan muchas diferencias con otras sociedades, ya que también en los pueblos de África, como los Fang, que constituyen nuestro objeto de estudio, se observa una organización patriarcal que privilegia mucho al hombre otorgándole poder absoluto sobre la mujer. El patriarcado es un concepto que aunque haya evolucionado, adaptándose a la sociedad moderna, todavía sigue siendo necesario combatirlo para conseguir o lograr sociedades un poco más justas.

 No es utópico pensar que una mega estructura tan enraizada como el patriarcado puede tener un final, ya que lo que se está buscando una vez entendido cómo surge, es establecer mecanismos para evitar que ninguna mujer se sienta inferior frente al hombre. Es un imperativo para las sociedades modernas hacer las cosas de otra manera, ya que los hombres y las mujeres los sujetos que activamente intervienen en el desarrollo de las naciones.

El patriarcado: una conceptualización

En la literatura internacional, la cuestión del patriarcado está muy estudiada. Es decir, estamos ante un concepto que cuenta con una amplísima literatura. Por lo que, nuestro propósito en esta investigación no consiste en reconstruir de nuevo el marco teórico del patriarcado, pues consideramos que para eso ya existe mucha bibliografía. La meta que pretendemos alcanzar con este apartado es comprender mejor este concepto para que nos permita argumentar con objetividad sobre la manifestación del patriarcado en la etnia Fang.

A fin de evitar debates innecesarios sobre este término, es necesario ofrecer las distintas disertaciones que se ha arrojado sobre el patriarcado. Ya de antemano advertimos que existe, como veremos en adelante, una pléyade de autores que se ha dedicado profundamente al estudio de este concepto. Los precedentes históricos de este concepto nacen con la teoría feminista, la cual necesita un concepto que explicase mejor o al menos que recogiese la discriminación que las mujeres han sufrido a lo largo de la historia. Así, encontramos al patriarcado definido como:

Conclusión

La manifestación e institucionalización del dominio masculino sobre las mujeres y los/las niños/as de la familia, dominio que se extiende a la sociedad en general. Implica que los varones tienen poder en todas las instituciones importantes de la sociedad y que se priva a las mujeres del acceso a las mismas, pero no implica que las mujeres no tengan ningún tipo de poder, ni derechos, influencias o recursos (Lerner). En la cita anterior, evidentemente se recoge que el patriarcado representa el dominio absoluto de los varones sobre las mujeres.