Rodolfo Anaya Es El Autor De Bendíceme
Introducción
Rodolfo Anaya es el autor de Bendíceme, Última que por primera vez se publica en 1972 convirtiéndose en una de las novelas de origen chicano más aclamada de los tiempos. Anaya crece en Nuevo México en una comunidad en la que el catolicismo y la curandería eran dos influencias prevalentes. El escenario de la historia es en Guadalupe, Nuevo México durante la segunda guerra mundial en 1940.
Desarrollo
La comunidad está ubicada en un lugar rural en el que habitan mayormente vaqueros, granjeros, sacerdotes, prostitutas, y soldados. Este escenario sirve de inspiración para la novela en la que el autor relata la historia de Antonio y Última. Antonio es un niño que enfrenta contradicciones familiares, culturales, y religiosas. Última es una curandera que ayuda a la madre de Antonio durante nacimiento y se convierte en su guía espiritual. Última lo ayudará a Antonio a lidiar con contradicciones y retos.
El primer reto que enfrenta Antonio se origina dentro de su entorno familiar. Su padre, Gabriel, es un hombre que se describe así mismo como un vaquero que no tiene un lugar permanente para vivir. Su sueño es mudarse a California con su familia y que Antonio se convierta en vaquero. En cambio su madre, María quien es una católica ferviente, proviene de una familia de granjeros que ha permanecido por generaciones en el mismo lugar. Ella desea que Antonio se convierta en sacerdote y sus hijos en granjeros. A Antonio también le toca presenciar a sus hermanos, quienes después de regresar de la guerra, eligen un destino diferente al que su padre tenía en mente. Primero parten los dos mayores a Albuquerque, y luego Andrew los sigue después de la muerte de Narciso. El padre de Antonio se siente devastado ante esta realidad, pero al mismo tiempo se siente identificado con la decisión de sus hijos de partir.
Cuando a Antonio le toca asistir a su primer día de clases, se siente emocionado y triste al mismo tiempo y se levanta con un malestar en el estómago. Sus padres deciden discutir nuevamente acerca de sus diferencias familiares e identitarias. Sin embargo, María aprecia el hecho de que la gente ordinaria pueda asistir a la escuela, y Antonio no tenga la misma suerte que su padre. Ella afirma, Esa afirmación hace que Antonio experimente una carga emocional. Cuando María le pide a Última que confirme el futuro de Antonio, ella responde que él será un hombre de conocimiento. Finalmente Última lo bendice antes de ir a la escuela.
En la escuela, Antonio Se enfrenta a un reto cultural al no hablar inglés y al sentirse en un ambiente totalmente extraño.
El mismo día Durante la hora de almuerzo, Antonio enfrenta su segundo reto al comparar su almuerzo con el de los otros estudiantes que tenían sandwiches mientras él tenía sus frijoles envueltos en tortilla.
La escuela se convierte en el primer escenario en el que Antonio se hace consciente de esas diferencias culturales y en el que él percibe que la vida lo empieza a preparar para ser un hombre o un adulto. Él se da cuenta de que experimenta una tristeza profunda como esas de las que hablan los adultos. Se da cuenta de que tiene que enfrentar esta experiencia solo sin la protección de su madre, pero encuentra a otros niños, que como él, estaban comiendo afuera de la escuela.
Antonio conoce a través de su amigo Cico la mágica historia del pescado dorado y a Antonio le toca presenciar lo que él considera un milagro pagano. En ese momento Antonio cuestiona la grandeza de Dios y compara los sentimientos que experimenta con los que sintió día de su primera comunión. Antonio, después de ver al pez dorado, siente que ha pecado por aceptar que cree en la magia del pez.
Antonio enfrenta dudas y retos para mantener su fe. Durante el relato, Antonio medita y constantemente debate sobre la existencia y el poder de Dios. Florence, su amigo huérfano, despierta dudas y compasión en Antonio. Florence pone en duda el catolicismo y abre nuevos cuestionamientos para Antonio.
Conclusión
Frederick Holton en su artículo Chicano afirma que Antonio está en la búsqueda de su identidad personal y social. Durante su el proceso, encara contradicciones de naturaleza espiritual como la vida y la muerte, inocencia y conocimiento, bondad y maldad. Asimismo, Antonio necesita definir su identidad personal y social decidiendo si va a convertirse en vaquero o sacerdote, aculturado o extranjero, cristiano o pagano. Rodolfo Anaya explora en Bendíceme, Última, oposiciones sociales con maestría, ya que aunque existen tensiones en la historia, el autor encuentra la manera de balancearlas con momentos de alivio y armonía.