Romanticismo Como Movimiento Cultural Opuesto A Los Principios De La Ilustración
Antes de nada debemos saber que el Romanticismo es el movimiento cultural que se opone a los principios característicos de la Ilustración, al clasicismo, al racionalismo e iluminismo. Es el resultado de la profunda crisis social e ideológica en las primeras décadas del siglo XIX, además se desarrolla en Europa. Influenció en la literatura, la pintura, la música, la arquitectura y la política. Cabe destacar que los principales acontecimientos que precipitaron este cambio fueron: La Revolución Industrial inglesa, la cual sienta las bases del liberalismo, La Revolución Francesa, que proclama los principios de libertad y fraternidad y La Revolución Americana con su Declaración de Independencia, que hace de los derechos del hombre su centro y establece la república como forma de gobierno.
Es una época donde los pensadores comienzan a minar las reglas y el concepto de la razón, tan utilizado durante años atrás. Kant es quien se encargó de demostrar, a través de “Crítica a la razón pura”, que el motor ilustrado ya no servía. Los románticos protestan contra los valores impuestos y los problemas politicosociales y hacen de su libertad la bandera. Es una nueva forma de vivir y de crear que refleja una nueva actitud ante los problemas del hombre. Además la clase obrera desencadena movimientos de protesta de signo anarquista y socialista, con huelgas y atentados. Mientras en Europa se desarrolla fuertemente la industria y se enriquece culturalmente, España ofrece la imagen de un país poco adelantado y que cada vez está más alejado de Europa.
En el siglo XIX la gente vivía en general en zonas rurales, ya que tener tierras representaba el poder de la nobleza y era lo que sustentaba a los campesinos. La nobleza vivía en grandes mansiones, rodeados de criados. Por otra parte, los reyes, vivían en sus palacios, gastaban dinero a su antojo y en muchos casos conservaban gran parte de poder. Al mismo tiempo, gran parte de la población tenía problemas para subsistir y el estado no ayudaba a los trabajadores. Por eso, los campesinos empezaron a emigrar hacia las ciudades para buscar unas mejores condiciones de vida, pero la mayoría no conseguía sus propósitos y tenían que vivir situaciones pésimas. Además, había grandes epidemias como el cólera que podía, matar a miles de personas. A pesar de todo, cabe destacar que fue un siglo en el que hubo un gran desarrollo industrial y también aparecieron grandes avances técnicos como la fotografía, el ferrocarril o la anestesia.
Ahora bien, las principales características del romanticismo son el individualismo, es decir, que el artista expresa un egocentrismo exacerbado, el culto a la libertad, ya que el individuo proclama el derecho a expresarse, la rebeldía y contradicciones, porque el romántico busca siempre una felicidad imposible y choca con la realidad. Y por último el nacionalismo frente al universalismo de la ilustración.
En cuanto al romanticismo en Europa, sabemos que algunos países como Inglaterra cuajó muy bien. Además, fue el país donde se desarrolló con más prontitud el movimiento industrial. El romanticismo inglés asumió con fuerza una rebeldía hacia esa nueva sociedad industrial y burguesa, y buscó la evasión a través del paisaje rural, del pasado histórico y de los destinos exóticos. El industrialismo y la vida burguesa, de aparición temprana en Gran Bretaña, actuaron así como excusa perfecta para que los espíritus románticos de la época acogieran bastante rápido esta corriente literaria y filosófica. Asimismo, el romanticismo inglés hizo suyo un lenguaje literario que puso sus bases en el sentimiento, en lo subjetivo, y en la libertad del artista a la hora de escribir.
Por otro lado, el romanticismo francés vivió durante muchos años en un discreto segundo plano. La tormentosa vida política del país desde la Revolución hasta la Restauración centró el esfuerzo de los grandes literatos del país en la filosofía y en la política, y casi nadie cuestionó el clasicismo promulgado por la Ilustración.
Alemania se encontraba en una circunstancia difícil cuando las ideas románticas comienzan a impregnar Europa. Sin embargo, en un gran esfuerzo de reunificación, Alemania consiguió hacer suyo el concepto de Romanticismo, al cual unió de manera indisoluble la idea de lo Sublime.
El romanticismo en España tardó más en llegar que en otros países de Europa debido a la situación política marcada por el absolutismo de Fernando VII. Hubo un movimiento llamado prerromanticismo, proceso en el cual muchos prerromanticos fueron exiliados por sus ideologías. Ahora bien, el romanticismo penetra en España debido al periodismo, ya que los primeros artículos hablaban sobre el nuevo movimiento y fueron publicados en el periódico absolutista, también gracias al regreso de los exiliados liberales a la muerte de Fernando VII y por último, el estreno de la obra del duque de Rivas Don Álvaro o la fuerza del si no. Cabe destacar que los principales representantes del romanticismo en España fueron Gustavo Adolfo Becquer, Ángel de Savedra o Duque de Rivas, Manuel Bretón de los Herreros, José Zorrilla y Moral, José de Espronceda.
El romanticismo finaliza en 1840 para dar paso al naturalismo y al realismo.