Bioterrorismo Y La Implementación De Políticas Públicas 

Introducción

En la actualidad, el temor de un atentado terrorista es quizá más notorio en regiones como Europa, Estados Unidos, Siria e Irak, China y otras grandes potencias las cuales a lo largo de la historia han sido protagonistas de miles de ataques y alianzas terroristas; estas sujetas a diferentes fines ya sean políticos, económicos y hasta religiosos que lo único que han dejado han sido centenares de víctimas y daños al medio ambiente que muy difícilmente se recuperen dada sus características ya sean armas nucleares, bombardeos entre otros.

El terrorismo no solo causa destrucción para los países que están implícitamente en él, sino también en los países ajenos al mismo, ya que indirectamente tiene implicaciones económicas y políticas que terminan perjudicando al mundo entero. El Terrorismo constituye una de las violaciones más graves a los Derechos Humanos y las libertades fundamentales en las que se basa toda sociedad democrática actual. 

Un acto terrorista, con sus diversos tipos y métodos, su principal propósito, desde siempre, es inducir un estado de incertidumbre psicológica, causar destrucción, miedo, y muerte para alcanzar objetivos políticos. Sin embargo a medida que pasan los años así como avanza la tecnología, la Ciencia e Investigación, el terrorismo no se queda atrás; ha venido teniendo cambios que se ajustan a las dinámicas de la misma sociedad.

Desarrollo

El terrorismo global es hoy en día la amenaza más importante y real para sistema mundial actual el cual ha tenido un proceso de transición. La transición y el camino recorrido por el terrorismo para convertirse en bioterrorismo, genera la necesidad que sea considerado como una amenaza para el Estado colombiano.

En el marco de la seguridad y la defensa nacional, dado su impacto en el ámbito clínico y de la salud pública, situación de potencial complejidad que atenta directamente contra la vida humana, la vida animal y la integridad de los ecosistemas, condición que debe ser analizada para la formulación de políticas de gobierno y sus consecuentes tecnologías, como eventual factor desestabilizador de los fines esenciales del Estado, entre los cuales se destaca mantener la integridad territorial y asegurar la convivencia pacífica y la vigencia de un orden justo.

Lo que deja en evidencia la importancia de establecer las medidas necesarias para contrarrestar este fenómeno; mediante la implementación de Políticas Públicas y de Gobierno las cuales respondan efectivamente al impacto social, político y económico que provoquen. Pero, ¿qué sectores se deben fortalecer y complementar para reducir al máximo los riesgos ante ataques Bioterroristas en Colombia? Hay que reconocer los esfuerzos que en todos los ámbitos se han desplegado desde años atrás, sobre todo a partir del 11 de septiembre en la lucha contra el terrorismo y la cooperación internacional para prevenir este tipo de delitos.

Dada la dimensión mundial de la amenaza del terrorismo químico, biológico, radiológico y nuclear, los instrumentos jurídicos internacionales contra el terrorismo químico, biológico, radiológico y nuclear ofrecen medios y mecanismos judiciales indispensables para que las autoridades nacionales puedan llevar a cabo investigaciones transfronterizas eficaces y para que los presuntos terroristas no encuentren refugio seguro.

Todas estas medidas de carácter internacional las cuales se han creado a partir de los distintos ataques terroristas en regiones; los cuales son necesarios para que se elaboren estrategias y acciones a nivel nacional. Dando respuesta a la pregunta, ¿qué sectores se deben fortalecer y complementar para reducir al máximo los riesgos ante ataques Bioterroristas en Colombia? En un primer lugar se considera indispensable divulgar todo tipo de información sobre la epidemiología agentes patógenos que pueden causar enfermedades o desencadenar epidemias y / o pandemias, garantizando así la seguridad y bienestar de la población.

Conclusión

Trabajar carbonatado en diagnósticos acertados que logren contrarrestar tempranamente la enfermedad y sobre todo un oportuno tratamiento, sin barreras de acceso, por eso mismo se consideraría necesario fortalecer en términos de normatividad la ley 100 del 1993, lo cual logre garantizar la atención a toda la ciudadanía sin importar su condición socioeconómica, fortaleciendo los mecanismos de identificación de vulnerabilidad como lo es el SISBEN.

Para el país es importante que miembros de la comunidad científica establezcan pautas que puedan garantizar a las autoridades sanitarias una adecuada capacidad de respuesta ante un posible ataque bioterrorista. Que si bien nuestro país no está en amenaza constante en relación ataques internacionales, como lo estaría, y otros países de medio oriente no podemos desconocer el conflicto armado que ha permeado que toda nuestra historia. “El conflicto armado interno en Colombia”, correspondiente a las últimas cinco décadas de nuestra historia patria, los Grupos Armados al margen de la Ley (GAML), utilizaron las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y el Ejército de Liberación Nacional. 

Se han convertido en potenciales generadores del bioterrorismo a través de acciones armadas: atentados y voladuras a los oleoductos e infraestructura energética y crítica del país, ataques a unidades militares y policiales y tomas armadas a poblaciones a lo largo y ancho de nuestra geografía nacional, con el uso de armas no convencionales y uso de artefactos explosivos improvisados, generando severos impactos a la población, daños irreparables a la integridad humana de los miembros de la Fuerza Pública y daños irreparables a los ecosistemas y el medio ambiente en general.