Capítulo 74: Don Quijote De La Mancha Final Alternativo
Introducción
No obstante, luego de la llegada de Don Quijote y Sancho Panza al pueblo, implantaron su plan y comenzaron a trabajar como pastoreos durante este año que tenían planeado tomar como descanso de las aventuras. Así mismo, todas las mañanas, Don Quijote se levantaba con entusiasmo y alegría para trabajar en su rebaño.
Desarrollo
Buenos días, bella sobrina mía. ¿Cómo amaneciste?
Es de esta forma como empezaban sus mañanas. Luego de que este comía del desayuno guardado por su sobrina, se dirigía hacia el trabajo y con el mismo entusiasmo saludaba a Sancho Panza, quién le devolvía con la misma alegría a Don Quijote. A pesar de su año de descanso, este nunca paró de apreciar las historias de caballeros. Todas las noches tomaba de un lápiz y trataba de recordar de las que había leído y las escribía para que no se le olvidasen. Esto y las reuniones con el bachiller Sansón Carrasco y Maese Nicolás se volvieron tradición durante el año.
Cerca de fin de año, Don Quijote se empezó a enfermar. Todos muy asustados buscaron al doctor con rapidez, pero la enfermedad que suponían que tenían ya era irreversible. Y así, todos reunidos, empieza Don Quijote a hablar:
- ¡Oh cuanto he disfrutado nuestros momentos Pancho! Hubiese querido otra aventura, pero no me quejo. Espero que sigas siendo un buen caballero aún en mi ausencia.
Oyendo estas palabras de Don Quijote, todos muy tristes llorando, se extrañan de la forma tan triste que lo dice. Y así Sancho Panza responde:
- ¡Continuaré en honor a ti, mi mejor caballero y compañero!
Luego Don Quijote mueve la cabeza de arriba hacia abajo feliz con la respuesta de Pancho y gira la cabeza mirando su sobrina a la cual le dice:
- Quiero que te cuides y que sepas que te agradezco todo lo que has hecho.
Con las lágrimas cayendo a las mejillas de la sobrina, Don Quijote gira la cabeza mirándolos a todos y dice:
- Les agradezco a todos, su apoyo y quiero que sepan que les he dejado una…
Don Quijote no pudo terminar la oración cuando la madera que había puesto en la pared, días antes, conteniendo las hojas de sus escritos le cayó encima. Y a pesar de que no era causa de muerto, debido a su estado de salud previo murió sin haber ni siquiera terminado su oración.
Como todo empieza a tomar un giro cuando, tres años después de su muerte, su sobrina estaba triste sentada en la habitación de Don Quijote pensando en el hecho de que en este día de su boda él no está aquí para caminarla por el altar, y de pronto atrás del armario ella nota una hoja blanca. Ella se acerca confundida pensando que hace mucho tiempo había inspeccionado cada esquina de la habitación buscando los escritos de Don Quijote para que la consolaran en las largas noches de soledad. Cuando coge el papel se da cuenta de que es un sobre. Ella lo abre con cuidado revelando una carta de Don Quijote. Esta decía:
Queridos amigos, les agradezco todo lo que hicieron por mí, contando la parte de que me llevaran la corriente aun cuando hacia mis mayores locuras. No voy a mentir al decir, que al principio si me creía que era un caballero. Pero luego, en el camino hacia el pueblo, me caí de Rocinante y me di muy duro en la cabeza. Más extraño que suene, volví a la conciencia de Alonso Quijano. No dije nada a mi llegada a nadie porque la verdad es que me gustaba ser Don Quijote, me sentía más libre, más alegre y con más motivo de vivir. Además, sentía que de esta forma me querían más, aunque molestaba más. Si están leyendo esto, es porque de alguna forma ya estoy en el cielo. Escribí esto para que sepan que viví una vida muy feliz gracias a todos ustedes. Con esto también quiero dejar dicho que todo lo que me pertenece se lo paso a Pancho, mi más leal compañero. Y, por último, a mi querida sobrina, espero que encuentres a una pareja que te amé y que te cuide porque te lo mereces.
Conclusión
Con las todas las lágrimas cayéndole en sus mejillas y el maquillaje todo arruinado, la sobrina de Don Quijote estaba conmovida con las palabras que este había dejado escritas y no mucho después, todos los amigos cercanos de Don Quijote sabían de ella. Todos decidieron permanecer la carta un secreto y dejar a todo el mundo recordar a Don Quijote de la Mancha por sus increíbles historias. Algunos lo recordarían por loco, pero ellos saben que el verdadero Don Quijote, aunque sea al final, estaba muy cuerdo llevando una vida llena de felicidad.