Corrupción En El Perú Y Sus Graves Consecuencias

Los eventos demandados en el Poder Judicial peruano han dado suficientes indicios de un fenómeno casi generalizado en toda la administración pública: la corrupción. En el Gob. Central tenemos 4 ex presidentes en juicio por presunta corrupción, hay demasiados gobernadores regionales tras las rejas o con juicios por uso indebido de los fondos públicos, también decenas de alcaldes, es decir casi un parasito que han estado contaminado la administración pública y ha infectado a la sociedad que para recibir servicios del estado, se enfrenta a los funcionarios cuya moral pública y personal va en frente de los principios éticos sobre los cuales se crea la Constitución, las leyes, el estado y la educación ciudadana de las personas.

La pregunta se plantea de esta forma ¿qué ha sucedido en el Perú, que tanto el estado como la sociedad han pasado a una situación de transgresión ética corrosiva, generando una crisis, oral que está cambiando los resultados de las relaciones sociales y, sobre todo, está alterando los códigos de conducta social?. Para trata de contestar esta difícil pregunta es necesario recordar los recientes principios de la corrupción. Si bien este fenómeno tiene una larga historia, este nuevo ciclo de corrupción comenzó en el año 1989, cuando el Perú estuvo a punto de irse a pique durante el gobierno de Alan García, se combinaron 3 riesgos: la hiperinflación y la incapacidad de pago de la deuda a los peruanos, la crisis política y la decadencia de los partidos políticos y la guerra terrorista dentro del país desatada por Sendero Luminoso y el MRTA. De dicho riesgo salió, gracias al apoyo de otros países internacionales, a la aplicación de las reformas propuesta por el Consejo de Washington y al martirio del pueblo peruano.

Es importante determinar que los ajustes económicos efectuados concordaron con un ciclo económico internacional muy a favor, lo que permitió superar la crisis financiera, pero sobre todo las reformas neoliberales que ascendieron o promovieron las privatizaciones de las empresas públicas, comenzaron a atraerlos los capitales del exterior y el gobierno, tuvo ganancias extraordinarios por las privatizaciones. Dichos recursos fueron utilizados, en parte, para financiar distintos programas de pobreza, para una buena parte fue utilizada de manera ¨poco santa¨ por el Gob. Fujimorista y su principal colega Vladimiro Montesinos. Los peruanos vimos como dicho asesor comenzó a sobornar a los congresistas para que pasen a las filas oficialistas, pagar sueldos extraordinarios a funcionarios del estado por fuera de la administración, etc. Es decir, un primer componente para que haya corrupción ha sido la bonanza de las finanzas del estado.

Un segundo componente fue el carácter casi dictatorial del gobierno, que no era fiscalizado por ningún otro poder del estado, lo que accedió a un desarrollo de la corrupción sobre todo en la cúpula gubernamental y en las autoridades que se supone debían fiscalizar al gobierno, el congreso, la contraloría, el ministerio público, estuvieron no solo captados por el ejecutivo sino muy subyugado a él. Bajo estas circunstancias las principales instituciones del estado se debilitaron, debido al asedio interno, pero sobre todo asistimos una declinación alarmante del respeto por las normas éticas y consecuentemente, la conducta moral de gobernantes y funcionarios se contagiaron al punto de generar una de las peores crisis éticas de los últimos tiempos en el Perú. La crisis ética originada en negocios turbios hechos desde el gobierno, ha sido probablemente el peor resultado de un ajuste neoliberal combinado con un seudo democracia y una total ausencia de equilibrio de poderes en el estado peruano. Esta primera etapa concluyo con la renuncia intempestiva de Alberto Fujimori en el extranjero, ante la amenaza de juicios y probable vacancia de su presidencia. La mayor felonía del asesor Montesinos es que había expatriado fondos estatales abriendo cuentas bancarias personales millonarias tanto en Suiza y Luxemburgo. Hoy sigue en prisión este asesor y el ex presidente fue juzgado y reprochado ya que esta en puesto en prisión por temas de derechos humanos, pero no por temas de corrupción.

Luego del buen gobierno de transición presidido por Dr. Valentín Paniagua, las elecciones del 2001 dieron como presidente a Alejandro Toledo, quien tuvo la suerte de entrar al gobierno durante la fase más expansiva del ciclo económico internacional, lo que obviamente hizo que las finanzas del estado se recuperaran. Nuevamente las finanzas del estado florecieron y el Gob. Central, los Gob. Regionales y las municipales volvieron a tener ingresos extraordinarios, en consecuencia, el primer requisito para la corrupción el recurso fiscal extraordinario estaba dado.Pero ya habíamos heredado la crisis moral bajo la forma de una cultura proclive a la corrupción, a la impunidad y aprovecharse del estado. Es sobre esta base que empieza una nueva fase.

La principal puerta para la corrupción de esta nueva etapa fue las múltiples obras de infraestructura que emprendieron los tres niveles de gobierno. Pero mayor parte de esas inversiones se hicieron desde el gobierno central y aparecieron en el escenario las empresas brasileñas, encabezadas por Oderbrecht, que generaron un modelo de corrupción en los niveles donde se tomaban las decisiones de inversión, generando así un protocolo de corrupción organizado a nivel internacional. El resto de la historia es conocida. Obviamente, capacidad de fiscalización de las instituciones que deberían haberlo hecho la contraloría, poder judicial, el ministerio publico simplemente no existió y, en muchos casos, contribuyo a formalizar las coimas y además pagos ilegales e inmortales.

El problema es que actualmente el Perú se encuentra en una encrucijada con el gobierno del presidente Martin Vizcarra que no hace un deslinde claro de la corrupción pues está rodeado de gente con intereses particulares y hambre de poder. 

La conclusión, es bastante pesimista, pues la corrupción ha filtrado en casi toda la clase política y se ha convertido en una especie de modus vivendi que es difícil de sacar sin un liderazgo fuerte, un apoyo decidido de la población, una recomposición. Un país sin reservas morales es un país sin futuro. Necesitamos de un refuerzo moral.

Bibliografía

1. http://www2.congreso.gob.pe/sicr/cendocbib/con4_uibd.nsf/98F34F32106A975A05257E0600627371/$FILE/Sobre_la_corrupci%C3%B3n_en_el_Per%C3%BA._Montoya.pdf
2. https://www.politikaperu.org/la-corrupcion-es-el-principal-problema-del-peru.htm
3. http://www.psf.org.pe/decuelloblanco2012/?p=621
4. https://www.elespectador.com/noticias/el-mundo/peru-una-historia-de-presidentes-caidos-en-desgracia-articulo-746161
5. https://elcomercio.pe/politica/actualidad/corrupcion-historia-ciclica-peru-informe-402855-noticia/