Diferentes Estilos De Arquitectura Moderna
Arquitectura moderna.
En la arquitectura racionalista, el arte no tiene más una función contemplativa y lúdica, sino cognoscitiva crítica y positiva, el alejamiento de la naturaleza lleva a configuraciones desnudas, cerradas, simétricas, sin adornos y artificiales. La razón funcional permitió la disposición de la planta a partir de las funciones, la orientación y la economía, los nuevos modelos fueron los automóviles los aeroplanos y los trans atlánticos. El proceso proyectual se vive desde el interior al exterior y las fachadas dejan de ser principales o secundarias, pasan a estar correlacionadas a la función de los recintos. Otra vez busca romper con el pasado, mientras la función estructural antes se ocultaba en el beneficio de la imagen, la arquitectura racionalista destacaba la función como uno de los componentes de la arquitectura tradicional. Para Gropius el estilo Bauhaus significaba el combate a una inercia estancada. “Abolamos todas las escuelas, (la escuela Corbu tanto como la de Vignola por favor). Ninguna fórmula, ningún expediente, estamos en los comienzos del descubrimiento arquitectónico de los tiempos modernos, que se formulen desde cualquier parte francas propuestas. Dentro de cien años podremos hablar de un estilo, ahora esto no nos sirve, únicamente nos sirve el estilo en general, la coherencia moral en cada obra creada” (Le Corbusier) Buscaron cualquier ocasión para que estos principios fueran aplicados y persuadir que la nueva arquitectura funcionaba mejor que la antigua. Para el concurso del Chicago Tribune mil novecientos veintidós, pidieron un rascacielos de oficinas, y antes de la primera guerra mundial en Europa debido a los edificios de origen medieval se impedía la construcción de rascacielos, así muchos europeos vieron la oportunidad para aplicar el lenguaje formal. Los proyectos se catalogaron como una extravagancia. La exposición internacional de artes Decorativas en mil novecientos veinticinco tenía como finalidad exponer productos franceses salidos de las casas de diseño, donde participaron veintiún países. Mallet Stevens trataba a la luz como un material por derecho propio, desarrollo la decoración interior como escenificación de la psicología de los personajes, y en el concurso participo desde la vanguardia con un pabellón de pureza clásica y árboles de hormigón, para conjugar una mención exótica, pero de buen gusto. El pabellón de la URSS de Konstantin Melnikov era la primera representación ante el mundo de la nueva unión soviética tras la revolución bolchevique en octubre de mil novecientos diecisiete. Se le adjudicó después de la victoria en un concurso cerrado sin saber la orientación el terreno ni el contexto. El pabellón Pomone de Louis Hippolyte Boileau concertaba un art Nouveau de la exposición y de Francia. L’espirit Nouveau planteaba el rechazo al cubismo, la revaluación de la tradición clásica y la resaltacion de la industria y la ciencia. La casa Citrohan house en mil novecientos veinte desarrolla en Le Corbusier el sistema dominó con un proyecto de estandarización de elementos que permitía realizar una estructura de hormigón con pilotis y escaleras independizadas de la distribución en la vivienda, permitiendo así una planta libre, este cambio radicalmente la forma de concebir y construir los edificios, donde fue ampliamente rechazado. En la exposición de Weissenhof en Stuttgart mil novecientos veintisiete, bajo el lema de vivienda mínima, se le encarga a Mies Van Der Rohe que era el vicepresidente en la dirección artística, puso en práctica como organización general principios teóricos ya aceptados como, la independencia de la edificación respecto de la circulación perimetral, separación de los autos, peatones y también como requisito general tenía que ser la funcionalidad primase por encima de todo con formas geométricas cúbicas, cubiertas planas y ausencia de decoración.
Todas las viviendas propagaban una nueva vida doméstica con aire, sol, espacio, salud y eficiencia. Se buscaba la economía, un racionable precio de alquiler y un tamaño adecuado para las familias con ingresos limitados. Solo Mies, Gropius, Verens Y Peter Oud, pensaron en estas viviendas en serie. La vivienda tiene una distinción clara entre instalaciones y el resto de la superficie. Las zonas fijas son la cocina, baños y escaleras, lo demás era móvil y versátil acorde a la satisfacción programática de cada usuario. La exposición presentó un programa unitario del movimiento moderno.
En el concurso del Palacio de la sociedad de las naciones, Le Corbusier tenía cuarenta años y decía que construyeron algunos edificios que jugaron un papel de laboratorio, quería que cada elemento construido fuera el avance experimental que permitiera tomar con toda seguridad las iniciativas indispensables en urbanismo. Entre los jurados estaban los maestros de la pasada generación, Berlage, Hoffmann, Mosser que comprendían la continuidad entre sus experiencias art Nouveau y la de los jóvenes maestros de la posguerra con Víctor Orta de jurado. En el año 1931 el gobierno ruso convoco un concurso para el palacio de los soviets, para demostrar el socialismo sobre el capitalismo, con Le Corbusier, Mendelssohn, Pelsi y Gropius, gana el edificio de Boris Iofan porque el presidente dijo que ninguno era digno de la república de los soviets, Le Corbusier lo tildo como una traición al espíritu de la revolución soviética. En la exposición internacional de Barcelona en mil novecientos veintinueve, la república alemana confió a Mies la dirección artística y la construcción de todos los edificios de las secciones alemanas de esta exposición internacional y se supone que el pabellón representaría la nueva Alemania, mies lo resuelve con criterios neoclasicistas, el comisario de la exposición dijo que debía dar voz a la nueva era que se desarrollaba con la planta libre, planos que limitaban el espacio, materiales ricos en un techo flotante y el piso, una idea revulsiva de como delimitar el espacio a partir de planos que cierran y no cierran, llenos, vacíos, pero fundamentalmente la idea de un espacio fluido con transparencias, reflejos con las columnas de acero y el techo que parece flotar. Gropius se propuso presentar lo mejor de la producción alemana ampliamente influida por la Bauhaus. Se trataba de explicar y hacer comprensible a todos, una alternativa a la manera tradicional de habitar, en estas exposiciones se diluía la concepción del mercado y la exposición se concebía como un mecanismo para sugestionar al visitante utilizando todos los medios de representación que el movimiento moderno elaboraba mientras tanto. En mil novecientos treinta y dos cuando los nazis llegan al poder en Essau, la Bauhaus se ve obligada a emigrar a Berlín, y al año siguiente cuando Hitler es nombrado canciller, cierra la escuela. Las obras manifiestas son la Ville Savoye de Le Corbusier con los cinco puntos, la planta libre, la ventana corrida, la estructura independiente, la terraza jardín y los pilotis, la casa Tugendhat de Mies donde el espacio fluye al exterior, el techo parece que vuela, la carpintería que penetra en el interior y se hunde en la parte baja hacia el subsuelo, con un espacio totalmente fluido y articulado organizado con elementos puntuales. En la primera exposición de la arquitectura moderna celebrada en New York, el Moma, se acuñó por primera vez el rótulo de estilo internacional. La idea fundamental es que las obras representaban el estilo arquitectónico en el presente y este estilo era único y universal como sucedía con los estilos de las distintas épocas del arte. “El objetivo de la Bauhaus no es propagar un estilo, un dogma, una fórmula o moda, sino lisa y llanamente ejercer una influencia vital sobre la planificación arquitectónica” (Gropius, 1935)