Historia del Desarrollo De La Revolución Francesa
Introducción
La Revolución Francesa se puede definir como un conflicto social, político, económico y militar que se desarrolló en territorio francés durante los años 1789 (con la autoproclamación del tercer estado como Asamblea Nacional) y 1799 (llegada al poder de Napoleón Bonaparte, primero como cónsul y luego como emperador en 1804). La importancia de este conflicto es tanta, que desde un punto de vista histórico, marcan el fin de la edad Moderna y el comienzo de la edad Contemporánea, debido a que se asientan las bases de la democracia moderna. Dicho esto, vamos a centrarnos en las causas que provocaron el levantamiento.
Desarrollo
En primer lugar, encontramos la corriente de pensamiento implantada en Europa, la Ilustración, fundamentada en la razón, la igualdad y la libertad, siendo clave en la aparición de grandes figuras intelectuales como Voltaire o Montesquieu. Dichas ideas estaban en total contradicción con el sistema de monarquía absoluta que se encontraba instaurada en Francia. En segundo lugar, la sociedad francesa antes de dicho proceso estaba dividida en estamentos, el clero, la nobleza y el pueblo llano. Tanto el clero como la nobleza (que eran una gran minoría) contaban con una serie de prerrogativas como el estar exentos del pago de impuestos.
Mientras que el tercer estado, siendo un grupo más amplio y en su mayoría artesanos y campesinos, eran constantemente “bombardeados” a impuestos (como el diezmo), trabajaban en unas condiciones precarias y no podían hacer frente a la subida de precios cuando se daba una mala cosecha. Además, en este contexto encontramos el auge de la clase burguesa. Finalmente, podemos destacar el proceso de independencia de loas trece colonias norteamericanas (1775-1883) por varios motivos. Por un lado, por el carácter revolucionario de ambas con base en los ideales de la Ilustración, y por otro lado, por la participación francesa en la misma.
Francia venía de tener un conflicto con Gran Bretaña (Guerra de los siete años, entre 1756 y 1763) en la que no salió bien parada. De esta manera, aprovechó la circunstancia para poder “vengarse” de Gran Bretaña, interviniendo de manera militar en el proceso. No obstante, esta participación perjudicó a la hacienda francesa, agravando la situación económica en Francia, que no venía siendo especialmente buena. Así, el monarca Luis XVI, convocó los Estados Generales (asamblea convocada exclusivamente por el rey en la que se reúnen los representantes de los tres estamentos) en abril de 1789 con la finalidad de tratar de subsanar la situación económica del país.
Conclusión
En dicha asamblea se votaba por orden, esto es que cada estamento tenía un voto, viéndose perjudicado el pueblo llano. Por ende, el tercer estadio solicitó el voto “por cabeza”, ya que de esta manera no se verían en una injusta desventaja. Sin embargo, dicha propuesta se descartó, dando lugar a que en junio de 1789 se declarasen como únicos integrantes de la Asamblea Nacional y votando como primera medida la Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano. El proceso siguió su curso e incluso recibió apoyo de algunos miembros de otros estamentos hasta que el 9 de julio de 1789 la Asamblea se nombró a sí misma Asamblea Nacional Constituyente.