El Valor De Los Lobos En La Historia
Antes de su persecución por parte de los humanos, el lobo (Canis lupus) tenía la mayor distribución de todos los mamíferos terrestres del mundo, excepto el hombre. Su inmensa gama incluía la mayor parte de América del Norte, Europa, Oriente Medio y Asia. Los lobos fueron exterminados de gran parte de esta vasta área, sin embargo, ahora han regresado a muchas localidades donde antes vivían. Sin embargo, la persecución intensa y violenta de los lobos continúa hasta el día de hoy.
Irónicamente, muchas de las personas que exterminan apasionadamente a los lobos y actúan como si el lobo fuera ‘el mayor enemigo de la humanidad’, son al mismo tiempo amantes de los dueños de perros que consideran al perro, descendiente del lobo, como el ‘mejor amigo del hombre’. Sus actitudes parecen especialmente contradictorias cuando se considera el hecho de que los perros de compañía, como los lobos, a veces matan ganado y otras mascotas.
Además, cada año, los perros matan o hieren a muchas más personas que los lobos. En 2012, la Organización Mundial de la Salud informó que, en todo el mundo, más de 55.000 personas mueren anualmente de rabia, el 99% de ellas infectadas por mordeduras de perro. Los niños corren un riesgo especial, ya que los perros los muerden entre 3 y 5 veces más que los adultos..
Aunque los lobos también pueden infectarse con el virus de la rabia y propagarlo, casi nunca pican a los humanos porque no viven en estrecha asociación con los humanos. En consecuencia, la transmisión de la rabia de los lobos a los humanos es rara en comparación con los perros. Por lo tanto, se podría argumentar legítimamente que los perros son un peligro mucho mayor para los humanos que los lobos.
Muchos ciudadanos sienten curiosidad por los lobos y les gustaría saber más sobre ellos. Desafortunadamente, los medios de comunicación no siempre brindan al público información completa y confiable. Los investigadores explican por qué:
‘Los medios de comunicación se sienten atraídos por la controversia, y la recuperación de los lobos, las depredaciones, los programas de control y la mayoría de los demás temas relacionados con los lobos parecen irresistibles. La reintroducción del lobo de Yellowstone fue objeto de una intensa cobertura por parte de sesenta medios internacionales. La información popular sobre los lobos suele ser parcial o inexacta Blanco. Cuando aparecen historias de lobos, a menudo se resaltan las opiniones extremas de los oponentes y partidarios de los lobos, polarizando aún más el tema. La forma en que los medios cubren a los lobos da la impresión de que son un problema mayor que otros animales.
Debido a que los lobos a veces matan ganado y mascotas, provocan la ira de los ganaderos y dueños de mascotas. Sin embargo, uno de los aspectos más angustiantes del debate reciente sobre la restauración del lobo ha sido la fijación de los medios, casi exclusivamente, en este aspecto de las interacciones entre humanos y lobos. Por lo tanto, el debate está sesgado, se centra principalmente en lo negativo e ignora las muchas formas positivas en que los lobos benefician a los humanos.
Esta revisión resume algunas de las formas, tanto positivas como negativas, en las que los lobos interactúan con los humanos. Esperamos que ayude a las personas de todos los lados del debate sobre los lobos a pensar más claramente sobre el tema. Nuestro análisis se basa en la mejor información disponible actualmente, pero hacemos hincapié en que es necesario realizar más investigaciones sobre todos los temas discutidos. La ciencia todavía tiene mucho que aprender sobre el lobo.
Depredación en castor
Cada año, los castores causan millones de dólares en daños a las comunidades humanas al construir presas que inundan carreteras, ferrocarriles, casas y tierras de cultivo.
B eaver también daña y destruye valiosos recursos madereros al inundar los bosques, rodear árboles, talar árboles y comer plántulas de árboles.
Además, los castores tapan las acequias y alcantarillas con madera, lo que obliga a los terratenientes o contribuyentes a contratar a alguien para limpiar el desorden y restaurar el flujo de agua.
Muchos grandes depredadores ocasionalmente se alimentan de castores, sin embargo, solo el lobo lo hace con regularidad y en la medida en que tiene el potencial de controlar el número de castores.
Por ejemplo, un estudio en el sureste de Alaska encontró que el 31% de las heces de lobo contenían restos de castores. También se encontraron frecuencias significativas de restos de castores en las heces de lobo en Letonia, Minnesota, Bielorrusia, Quebec y el este Ontario, lo que indica que este hábito alimentario es común y generalizado.
No es sorprendente que los castores le tengan miedo a los lobos. Los experimentos muestran que los castores evitan los senderos del bosque donde se ha colocado el olor de lobo, pero continúan utilizando senderos donde no hay olor de lobo. Este hecho puede tener algún significado ecológico, como la reducción de la tala de castores en los senderos utilizados por los lobos. Sin embargo, nadie parece haber estudiado este tema.
En Quebec, se realizó un experimento para probar los efectos de los lobos en las poblaciones de castores. Se compararon dos áreas grandes (cada una de 265-275 km 2 ), una donde el número de lobos se redujo en un 60% y la otra donde los lobos estaban protegidos.
En el área donde se redujeron los lobos, el número de castores aumentó en un 20%. Sin embargo, dos años después de que terminó la reducción de lobos, el número de castores disminuyó a sus niveles anteriores. Una recomendación de manejo importante que surgió de este estudio fue que los humanos no deberían reducir el número de lobos cuando la densidad de castores es alta.
Los lobos que se alimentan de castores brindan un valioso servicio económico a la sociedad humana. Por supuesto, la captura también puede reducir o limitar el número de castores, pero a menudo no es eficaz. Esto se debe a que la captura es más necesaria cuando hay abundancia de castores. Sin embargo, en ese momento, el mayor número de castores crea un exceso de oferta de pieles, lo que hace que los precios de las pieles de castor disminuyan y reduzcan el estímulo económico para la captura.
Otra razón por la que atrapar (y cazar) castores a menudo no es una solución realista es que, para tener éxito, todos los propietarios de un área deben participar. Hablando en términos prácticos, dicha cooperación suele ser difícil de orquestar porque los propietarios de las tierras con frecuencia no están de acuerdo sobre la ética o la conveniencia de la captura (y la caza).
Debido a que el lobo es un animal salvaje, no necesita permiso para cazar en propiedad privada y puede ingresar a cualquier terreno para atrapar castores. Tiene hambre incluso cuando los precios de la piel de castor son bajos.
Depredación de ungulados
Los lobos se alimentan ampliamente de ungulados (mamíferos ungulados). Ejemplos de ungulados son ciervos, alces y jabalíes. Estas depredaciones reducen el número de ungulados o disminuyen su aumento. Los lobos son más capaces de reducir el número de ungulados durante períodos de clima adverso o en compañía de otros carnívoros grandes.
La depredación de los lobos sobre ungulados silvestres es un servicio valioso para las comunidades humanas por 3 razones: los ungulados silvestres causan muchos accidentes de tráfico, los ungulados silvestres se alimentan y matan árboles de plántulas, lo que reduce la regeneración de especies maderables económicamente valiosas y los ungulados son huéspedes sanguíneos de garrapatas. Donde hay muchos ungulados, el número de garrapatas y las picaduras de garrapatas en humanos aumentan drásticamente.
En Suecia, un país del tamaño de California pero con solo 9 millones de habitantes humanos, los ungulados causan miles de colisiones cada año con automóviles. Solo en un año, se informó el siguiente número de tales colisiones en Suecia:
Ungulados chocando con autos Colisiones
Alce ( Alces alces ) 7.227
Corzo ( Capreolus capreolus ) 36,107
Ciervo rojo ( Cervus elaphus ) 246
Gamo ( Dama dama ) 805
Jabalí ( Sus scrofa ) 2,445
Total 46,830
Uno puede imaginar lo caro que fue para los propietarios de automóviles y las compañías de seguros reparar todos los automóviles dañados en estas 46,830 colisiones. Los peores accidentes fueron los de alces ( Alces alces ), en los que murieron 5 personas y 42 resultaron gravemente heridas (Estadísticas de Trafikverket ). Las colisiones con los alces son especialmente peligrosas porque las largas patas del alce elevan la mayor parte de su gran cuerpo al nivel del parabrisas del automóvil.
El lobo es el principal depredador de los alces y también se alimenta ampliamente de los otros ungulados salvajes. Si bien ningún estudio ha investigado aún cuántos accidentes automovilísticos se previenen por la depredación de los lobos y cuánto dinero ahorra el lobo a los propietarios de automóviles, parece razonable suponer que la contribución del lobo a la seguridad y la economía del tráfico podría ser aún más significativa si sus poblaciones estuvieran completamente restaurado.
Lobos y salud pública
Existe una creciente evidencia de que algunos depredadores, como los lobos, pueden beneficiar la salud pública al matar animales salvajes enfermos que transmiten enfermedades infecciosas de los animales salvajes a los humanos y al ganado doméstico. Hasta ahora, solo se han realizado estudios preliminares sobre esta cuestión, sin embargo, muestran resultados intrigantes que deben seguirse con investigaciones adicionales para establecer la causa y el efecto.
Por ejemplo, la encefalitis transmitida por garrapatas (TBE) es una enfermedad grave de por vida sin cura conocida. Cada año, destruye la calidad de vida de miles de seres humanos en Europa y Asia. Un estudio reciente en Suecia encontró que un aumento en el número de zorros rojos ( Vulpes vulpes ) se correlacionó con un aumento en el número de casos humanos de TBE el año siguiente.
Los lobos provocan una disminución dramática en el número de zorros. Lo hacen matando zorros y ahuyentándolos de las áreas frecuentadas por los lobos. En la región de Estocolmo de Suecia, donde se ha exterminado a los lobos, posteriormente ha habido grandes aumentos en el número de zorros rojos y en los casos de TBE en humanos. Por lo tanto, los investigadores se preguntan si la frecuencia de TBE humana podría reducirse restaurando las poblaciones de lobos allí a sus abundancias anteriores.
Podemos hacer preguntas similares sobre otras enfermedades como la rabia. Los carnívoros de tamaño mediano, como los perros salvajes, el zorro rojo, el zorro gris ( Urocyon cinereoargenteus ), los mapaches ( Procyon lotor ) y los perros mapache ( Nyctereutes procyonoides ), son huéspedes, reservorios y vectores importantes del virus de la rabia.
Dado que los lobos reducen drásticamente el número de estos carnívoros de tamaño mediano en un área, uno se pregunta si los lobos reducen la propagación de la rabia a los humanos, el ganado y las mascotas. Uno también se pregunta si la contribución del lobo a la salud pública podría mejorarse aún más mediante la vacunación de las manadas de lobos (dándoles de comer cebos empapados en la vacuna oral contra la rabia).
Depredación de ganado
Los lobos a veces matan al ganado, lo que causa pérdidas económicas a los agricultores y ganaderos. Sin embargo, un estudio en Minnesota encontró que incluso cuando la densidad de ganado era alta y la densidad de ciervos y alces era baja, los lobos se alimentaban principalmente de especies nativas de vida silvestre.
El número de ganado que se dice que ha muerto a manos de los lobos es con frecuencia exagerado. Una razón es que los programas del gobierno generalmente compensan a los propietarios por el ganado perdido por los lobos, pero no pagan dinero por el ganado asesinado por otros depredadores como coyotes, zorros, perros salvajes y perros domésticos. Por lo tanto, existe un fuerte incentivo económico para que los agricultores y ganaderos afirmen que su ganado fue asesinado por lobos, incluso cuando los lobos son inocentes.
Un ejemplo típico ilustra este problema. En Minnesota, un granjero informó que una de sus vacas había sido asesinada por lobos y exigió una compensación del estado. Los investigadores del Departamento de Recursos Naturales (DNR) del estado examinaron el cadáver y siguieron las huellas del depredador. Rápidamente descubrieron que la vaca había sido asesinada por un perro pastor alemán que vivía en una granja vecina (Fuente de información: un empleado del DNR).
Los nuevos métodos de ADN forense permiten a los investigadores determinar si el ganado ha sido atacado por perros, lobos, híbridos perro-lobo u otros depredadores. El primer caso que se investigó con estos nuevos métodos fue en Suecia. Allí, dos ovejas habían sido atacadas y gravemente heridas por un depredador desconocido que se creía que era un lobo. Sin embargo, el análisis de ADN de la saliva alrededor de las heridas por mordedura demostró que el depredador era un perro que no vivía en la misma granja.
Otra razón por la que el número de animales muertos por los lobos a menudo se exagera es que, hasta hace poco, no existía un método confiable para distinguir las heces de los lobos de las de los perros. Dado que la mayoría de los estudios sobre los hábitos alimentarios de los lobos se basaron en los restos de presas que se encuentran en las heces, y dado que muchas heces de perros se identificaron erróneamente como heces de lobo, se culpó a los lobos de comer ganado que, de hecho, era comido por perros.
Afortunadamente, las heces de perros y lobos de aspecto similar ahora se pueden distinguir mediante el análisis de ADN, lo que permite a los investigadores documentar claramente las diferencias en los hábitos alimentarios entre perros y lobos.
Uno de esos estudios de la región vasca de España, encontró que la mayoría de las heces de los lobos contenían presas salvajes, mientras que la mayoría de las heces de los perros contenían los restos de ganado doméstico. Se desconoce cómo murió el ganado que comieron los perros. Si bien los perros podrían haber matado el ganado que comieron, también podrían haber comido ganado que había muerto de enfermedad. Sin embargo, los resultados sugieren una vez más que los perros descontrolados pueden ser responsables de muchos de los ataques de ganado que habitualmente se atribuyen a los lobos, creando actitudes públicas negativas hacia la conservación del lobo y aumentando su costo
