Estereotipos Racistas y Supremacía Blanca
A lo largo del siglo XX, las minorías han hecho avances significativos hacia la autonomía y la igualdad en la sociedad estadounidense. Desde el derecho a poseer tierras hasta el derecho a votar, y aún más, el aplastamiento de la segregación de la era de Jim Crow en el Sur. Estos avances son parte de lo que somos como estadounidenses, sin embargo, parece que no se han infiltrado por completo en el conjunto de la sociedad estadounidense. A pesar de los derechos políticos y el poder que las minorías han obtenido, las ideologías supremacistas y las creencias racistas que fueron adoctrinadas en la psique estadounidense están siendo revertidas recientemente.
Sin embargo, estas ideas que estuvieron arraigadas en la mentalidad de los estadounidenses durante tanto tiempo han dado paso a una variante menos consciente de la segregación. Los negros han sido tratados como ciudadanos de segunda clase desde el inicio de este país. Traídos aquí a la fuerza como esclavos del hombre blanco, los negros nunca han sido tratados como completamente iguales a los blancos. Los estereotipos de los negros como vagos, estúpidos, tontos, cobardes, sumisos, irresponsables, infantiles, violentos, subhumanos y animales, son rampantes en la sociedad actual. Estos estereotipos degradantes se ven reforzados y mejorados por la representación negativa de los negros en los medios de comunicación. Los personajes negros han aparecido en películas estadounidenses desde el comienzo de la industria en 1888, pero los negros ni siquiera fueron contratados para representar a los negros en los primeros trabajos. En cambio, los actores y actrices blancos fueron contratados para retratar a los personajes mientras estaban en ‘cara negra’.
Al negarse a contratar actores negros para representar personajes negros, se crearon estereotipos degradantes a medida que los negros se presentaban de manera desfavorable. Además, los negros fueron retratados a propósito en películas con estereotipos negativos que reforzaban la supremacía blanca sobre los negros. Esto ha tenido un efecto tremendo en la visión de nuestra sociedad de los negros, ya que las películas han tenido un mayor impacto en la mente pública que cualquier otro medio de entretenimiento en los últimos noventa años. Los medios de comunicación establecen el tono de la moral, los valores y las imágenes de nuestra cultura. Muchas personas en este país, algunas de las cuales nunca se han encontrado con personas negras, creen que los estereotipos degradantes de los negros se basan en la realidad y no en la ficción. Todo lo que creen sobre los negros está determinado por lo que ven en la televisión.
A pesar del intento de Hollywood de ser más inclusivo en los últimos años, los latinos siguen estando subrepresentados lamentablemente tanto delante como detrás de la cámara. Los personajes latinos terminaron jugando con estereotipos infundados. Los resultados también muestran que la representación de personajes latinos en estas películas, como delincuentes, en la pobreza o sin ningún vínculo con una rica herencia o comunidad latina, amplía dramáticamente el alcance del problema. Sabemos por investigaciones que la deshumanización en la pantalla puede aumentar el riesgo de agresión, en este caso, hacia los latinos en los Estados Unidos y en el extranjero. Los cambios detrás de la cámara pueden alejar las historias de los estereotipos obsoletos que reflejan la retórica divisiva y peligrosa sobre los latinos y los negros que ha dominado nuestros ciclos de noticias, presentando en cambio una imagen matizada de esta comunidad vibrante y multifacética. Esto significa mostrar a los latinos como personajes que trabajan en el gobierno, las finanzas y la educación superior.
