Geopolítica Europea en Relación con África, Los Problemas de La Seguridad y La Inmigración Ilegal

«Sin desarrollo no podemos vivir seguros y sin seguridad no puede haber desarrollo». Koffi Annan, Secretario General de la ONU (1997-2006).

1. Introducción

Europa y África son continentes próximos; sus economías se complementan; comparten sus lenguas principales y seis siglos de historia. Elementos que, en su conjunto, deberían ser suficientes para conformar una relación más que consistente. No obstante, un análisis realista, desvela que son más determinantes los factores en los que ambas regiones divergen que los que comparten.

A pesar de los esfuerzos, nos encontramos hoy en día frente a ciertos retos tanto políticos como de seguridad y defensa en África, ante los cuales Europa debe actuar de forma decisiva, dados los riesgos, desafíos y amenazas de alcance global que estos suponen. El terrorismo fundamentalista, los conflictos armados, los estados fallidos, las migraciones incontroladas, los ciberataques y el cambio climático son actualmente las principales luchas del continente africano. Dada la proximidad geográfica de varios países europeos a dicho continente y la clara necesidad de cooperación entre ellos, este tema debería estar más presente en todos los ámbitos de la vida de los ciudadanos europeos y, por ende, de la de sus políticos.

En el presente trabajo, se tratarán, con el mayor detalle posible, las pretensiones de Europa y España en el norte del continente africano, así como también su acción en todo aquello referente a los grandes retos políticos y de seguridad que asolan la región. El tema objeto de análisis lo he elegido por el gran interés que despierta en mí la política y acción exterior de los estados y en especial la española, puesto que su posición geoestratégica coloca a nuestro país en una zona conflictiva en lo que a la inmigración y seguridad concierne. El caso principal de estudio será la región de El Sahel y sus relaciones con la Unión Europea y con España a la hora de resolver todos los conflictos allí presentes.

Además, durante toda la disertación, tendremos en cuenta varios textos que nos ayudarán a dar un mayor bagaje intelectual y enjundia a nuestros argumentos, así como a explicar minuciosamente los aspectos generales de la cuestión a debatir. Estos son, principalmente: España en Europa y en el mundo: una hoja de ruta, de Josep Borrell, en los Cuadernos de Santa Cruz; La política de seguridad española en el Sahel: el caso de Mali, de Dagauh Gwennaël Gautier Komenan; y, por último, Europa – África: desafíos para la convergencia, de Donato Ndongo-Bidyogo.

2. Estado De La Cuestión

La región del Mediterráneo ha sido siempre un escenario estratégico clave para la política europea. En general, el continente africano al completo está llamado a tener una influencia cada vez mayor en el mundo y en Europa en concreto. Las cifras hablan de un continente que crece por encima de la media mundial, que es destino u origen de una cuota creciente de nuestro comercio internacional y con un peso diplomático en organismos internacionales que asciende progresivamente. Sin embargo, sus problemas políticos y de seguridad provocan que continúe siendo un continente que necesita de una gran ayuda internacional. El norte de África en concreto continúa siendo una región de lo más conflictiva en ciertos aspectos.

Así pues, por ejemplo, existe en el Sahel una gran crisis estructural, a la que se une una desaceleración económica coyuntural. Tal y como se recoge en las Conclusiones del Consejo de la UE sobre el Sahel y Malí del 25 de junio de 2018, hay una crisis alimentaria en un contexto de creciente fragilidad, provocada por las sequías, como consecuencia directa del cambio climático, por lo que cabría hablar de una crisis medioambiental.

Al mismo tiempo, cabe hablar también de una crisis política y de gobernanza, de tal forma que la débil gobernanza y ausencia del Estado de Derecho en amplias zonas de la región conduce a que los gobiernos sean incapaces de garantizar el acceso para la mayoría de la población a los servicios básicos, como agua y saneamiento, o la educación primaria; lo que, unido a las crisis mencionadas previamente, conduce a altas tasas de paro. En este contexto, y ante la falta de posibilidades, gran número de jóvenes se alista a grupos terroristas o participa en redes de tráficos ilícitos como única forma de supervivencia. Otros tantos optan por migrar, lo cual nos ataca de lleno como países de destino.

Con África compartimos muchos de nuestros problemas y con ella debemos compartir lo que es más importante, las soluciones. Por lo tanto, no puede ser ignorada, ya que sin ella no podríamos abordar muchas de las cuestiones más urgentes que nos abruman, como el terrorismo fundamentalista o el cambio climático. Es más, cabe plantearse la posibilidad de si existen ya únicamente «soluciones africanas a los problemas africanos».

Me atrevo a decir que, en muchos casos, gran parte de la problemática en esta zona del globo (golpes de Estado, guerras y conflictos bélicos, pobreza y miseria, sequía y hambre, o terrorismo) es en cierta forma, culpa de Occidente, por haberse aprovechado en numerosísimas ocasiones de los recursos naturales del continente, haber negociado con dictadores y por no haber proporcionado las infraestructuras necesarias para su desarrollo en tiempos del colonialismo. No obstante, el presente trabajo lo que trata es de dilucidar cuál es la acción presente y futura de Europa y España en esta región, ahora que somos conscientes de que la necesidad de colaboración que existe es cuanto menos, urgente.

3. Respuesta Europea A Los Cambios Y Problemas En El Norte De África

Los países de África y la Unión Europea cooperan actualmente a través de varios marcos normativos, tales como el Acuerdo de Cotonú y la Estrategia Conjunta África-UE. Además de estos, el Consejo ha adoptado tres estrategias regionales, respectivamente para: el Cuerno de África, el Golfo de Guinea y el Sahel. Las relaciones entre África y la UE también se concretan en diálogos formales, como las Cumbres UE-África.

La política general de la Unión Europea respecto a los 54 Estados africanos se formula en la Estrategia Conjunta África-UE (JAES), mencionada anteriormente, que fue adoptada por los dirigentes europeos en 2007 y cuya finalidad era la de dar a la relación África-UE una nueva dimensión estratégica, con una asociación política consolidada y una cooperación reforzada en todos los niveles. En 2015, la Unión y África celebraron otra cumbre en La Valeta (Malta) que se centró en la migración y que concluyó con la aprobación del Plan de Acción de La Valeta y la puesta en marcha del Fondo Fiduciario de Emergencia para África de la Unión, dotado de 1.800 millones de euros, al objeto de abordar las causas profundas de la migración irregular y del desplazamiento de personas en África.

También es de importancia mencionar que, en lo que se refiere a la prioridad de reforzar la seguridad de los países del Sahel, el papel de la Unión Europea es bastante crucial: allí se desempeñan tres de las misiones de Política Común de Seguridad y Defensa (PCSD) más importantes en cuanto a número de efectivos, actualmente en proceso de regionalización para adaptarse a la nueva realidad del G5 Sahel.

3.1. Enfoque Y Objetivos De La Unión Europea En El Norte De África

Los principales retos de la Unión Europea en el Norte de África, más concretamente en el Sahel, han sido definidos por la Casa África en varios de sus textos. Son principalmente, por un lado, la gobernanza, el desarrollo y la resolución de conflictos; en segundo lugar, la coordinación a nivel político; a continuación, la seguridad y el imperio de la ley; y, por último, la lucha contra la radicalización y el extremismo violentos. El objetivo final es sin duda la estabilidad total, tanto política como social del territorio, tan deseada pero tan difícil de alcanzar.

De esta forma, es necesario continuar reforzando las instituciones públicas para que sean capaces de asegurar el control del territorio y ofrecer servicios básicos a la población. Estas prioridades se recogen en la Estrategia de la UE para el Sahel que se publicó ya en 2011 y fue revisada en 2014 para incluir a Chad y Burkina Faso, miembros del G5 Sahel.

4. La PolíTica Exterior EspañOla En Relación Con África

A pesar de contar con menos recursos económicos que nuestros socios europeos, España tiene como objetivo en África el contribuir al fortalecimiento de las estructuras institucionales nacionales, regionales y locales de la región e incrementar su interlocución con los organismos multilaterales africanos en este ámbito.

En lo referente al marco más general, España cuenta con el III Plan África, de marzo de 2019, que pretende adaptar la estrategia a las condiciones actuales de África y España, con la vista puesta en el futuro continente. Sus objetivos son cooperar con ciertos países prioritarios y con otros países ancla para lograr la paz y la seguridad en la región. Para garantizar la seguridad individual de las personas, evitar flujos migratorios descontrolados forzados por la inestabilidad y para generar crecimiento y empleo es preciso estabilizar las zonas en conflicto e impedir que los focos de inestabilidad irradien al resto del continente.

Por otro lado, atendiendo a la inmigración como gran reto actual, según el actual Ministro de Exteriores en funciones, Josep Borrell, es clave el refuerzo de las medidas de cooperación y fomento del desarrollo (social, económico e institucional) de los países de origen y tránsito. La colaboración de países como Marruecos, Senegal o Mauritania ha sido clave en la gestión de los flujos migratorios que llegan a Europa. Pese a la importancia del papel que desempeñan, la financiación que reciben estos socios no es comparable con la de otros terceros Estados. Turquía recibe 6.000 millones de euros por contribuir a gestionar los flujos en la Ruta Oriental en comparación con 51,5 millones para Marruecos del fondo fiduciario de emergencia de la UE para África en el caso de la ruta Occidental. Es decir, Turquía recibe 116 veces más dinero que Marruecos, que es el país que a donde ahora se dirigen en su mayor parte los flujos migratorios subsaharianos, si bien es cierto que el primero acoge a varios millones de refugiados sirios.

4.1. La Presencia De España En África

España contribuye a la paz y la seguridad en África. En la actualidad, las Fuerzas Armadas españolas apoyan los esfuerzos de paz de las Naciones Unidas, de la Unión Africana y de la Unión Europea, en países como Somalia, Malí o la República Centroafricana, y desde bases en Yibuti, Gabón y Senegal.

La Armada participa en las misiones de la Unión Europea Atalanta y Sofía, y miembros de nuestras Fuerzas y Cuerpos de Seguridad refuerzan las capacidades de sus homólogos de países sahelianos, de Níger a Mauritania. La Guardia Civil lidera GAR SI Sahel, un programa financiado por la UE con más de 41 millones de euros para formar a grupos antiterroristas de las gendarmerías de Senegal, Mauritania, Mali, Níger, Burkina Faso y Chad.

4.2. El Sahel Y Su Importancia Para España

La política de seguridad española en África se centra principalmente en la región del Sahel. Esta área del planeta representa un verdadero desafío estratégico tanto para los gobiernos de los países que se sitúan en ella como para los países que se hacen presentes en ella, entre los que se incluye España. Constituye el refugio de varias células mafiosas que se lucran con diversos tráficos ilegales, como el narcotráfico, el tráfico de armas y el tráfico de seres humanos que alimenta la inmigración clandestina hacia Europa. Además, alberga grupos yihadistas que cometen actos terroristas, que van desde los secuestros de ciudadanos europeos, a los atentados y la guerra de conquista territorial que se produjo en el norte de Mali en 2012.

Se pueden distinguir dos rutas migratorias fundamentales hacia Europa desde África occidental: una que pasa por Níger y se dirige hacia Libia para llegar a Italia y otra por Mali, que se dirige hacia Marruecos para llegar a España. La presencia de esa segunda ruta convierte a Mali en la principal vía de los flujos migratorios hacia las fronteras españolas. España persigue básicamente cortar las rutas que llevan a miles de migrantes irregulares a suelo español y ampliar una zona de seguridad en torno a sus fronteras. Lo hace de forma contundente y con la ayuda de la UE.

Sin embargo, España debería mejorar la comunicación sobre su acción en Mali para hacer llegar al público general la información sobre su labor en el territorio maliense en el contexto de la lucha contra el terrorismo. Esta labor es bien conocida en los medios españoles, pero quizá no se refleja adecuadamente en los medios internacionales.

5. Conclusiones

El Mar Mediterráneo y todos los países colindantes con él, para España y para toda Europa, no son solo vecindad, son responsabilidad compartida, son interdependencia y solidaridad, son comunidad de valores y de intereses.

Prevenir y paliar el horror provocado por los conflictos es, sin lugar a duda, necesario. Pero todos somos conscientes de que para garantizar la paz y para poner fin a situaciones de crisis con violencia contra las poblaciones civiles se requiere, a veces, actuar con una mayor resolución y con medios más contundentes. Por ello, una parte sustancial e irrenunciable del compromiso multilateral deberá consistir en la participación de las fuerzas armadas y de seguridad en misiones internacionales de mantenimiento de la paz en estas zonas de conflicto.

Se han adaptar todos marcos legislativos europeos y nacionales para ser más eficaces, pero manteniendo siempre el respeto por los Derechos Humanos. La clave está en la prevención del extremismo violento, la lucha por la estabilidad y la regulación de los flujos migratorios mediante medidas todavía más consistentes.

Referencias Bibliográficas

  1. Borrell, J. (2019): III Plan África: España y África: desafío y oportunidad. Ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación de España.
  2. Borrell, J. (2019): España en Europa y en el mundo: una hoja de ruta. Cuadernos de Santa Cruz. Ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación de España.
  3. Consilium Europa (2019). Relaciones UE-África. (2019). Retrieved from https://www.consilium.europa.eu/es/policies/eu-africa/
  4. Donato Ndongo-Bidyogo (2014) Europa – África: desafíos para la convergencia. Retrieved from https://www.politicaexterior.com/articulos/economia-exterior/europa-africa-desafios-convergencia/
  5. Dagauh Gwennaël Gautier Komenan (2019) La política de seguridad española en el Sahel: el caso de Mali (2013-2018). Instituto Español de Estudios Estratégicos. http://www.ieee.es/Galerias/fichero/docs_opinion/2019/DIEEEO12_2019DAGKOM-Mali.pdf
  6. Losada, A. (2018): Los tres pilares de la acción de la UE en el Sahel. Revista Española de Defensa.
  7. Michou, H., Soler, E. y Torreblanca, J.I. (2013): Europa y la democracia en el Norte de África: una segunda oportunidad. Colección Monografías.
  8. Parlamento Europeo (2019). Fichas Temáticas sobre la Unión Europea. África. Retrieved from: http://www.europarl.europa.eu/factsheets/es/sheet/180/africa
07 July 2022
close
Tu email

Haciendo clic en “Enviar”, estás de acuerdo con nuestros Términos de Servicio y  Estatutos de Privacidad. Te enviaremos ocasionalmente emails relacionados con tu cuenta.

close thanks-icon
¡Gracias!

Su muestra de ensayo ha sido enviada.

Ordenar ahora

Utilizamos cookies para brindarte la mejor experiencia posible. Al continuar, asumiremos que estás de acuerdo con nuestra política de cookies.