Humanos Sin Esencia Y Los Estereotipos

¿Por qué tratamos de engañarnos al juzgar? Al seguir un estereotipo dejamos de lado nuestra verdadera identidad y pasamos a hacer uno más de la multitud, al tratar de encajar perdemos la originalidad. Cuando categorizamos a las personas surgen juicios erróneos y nos limitamos a fijarnos solo en la apariencia, además negamos la oportunidad de conocer a una nueva persona, este tipo de problemas genera diferencias en la sociedad llevando consigo graves consecuencias.

“Nunca juzgues a un libro por su portada, porque te podrías perder una gran historia” -Anónimo

Los estereotipos surgen ya que nuestra mente está constantemente categorizando a nuestro alrededor, debido a que contamos con una capacidad de simplificar lo que nos rodea esto nos trae como consecuencia impresiones, prejuicios y etiquetas creados de manera generalizada

El término estereotipo deriva del griego, siendo una palabra formada por la unión de los vocablos stereós, que significa ‘sólido’, y týpos, que quiere decir ‘impresión, molde’, es decir, “impresión sólida”. Este tipo de ideas se ha ido repitiendo con el tiempo, han sido reproducidos por las culturas y replicados en los medios, tales como la televisión, internet y muchas veces son utilizados en programas humorísticos, a tal punto que las personas lleguen a ver como algo normal criticar a una persona por su apariencia.

En los jóvenes este tema es muy influyente en su día a día, ya que para poder encajar en un grupo social tratan de asemejarse a otras personas perdiendo así su esencia.

Los estereotipos pueden ser: De tipo sociales de acuerdo a la clase social de la que procedan, culturales de acuerdo a las costumbres que tengan o raciales de acuerdo al grupo étnico del que formen parte. De todas formas, los estereotipos suelen formarse uniendo estas tres características, por lo que es muy difícil separarlos completamente unos de otros. Cabe señalar también que existen estereotipos vinculados a la religión.

Un ejemplo muy común de estereotipo es «Los hombres no lloran» una frase que resulta tan absurda, la cual condiciona a los hombres a no poder expresar de manera sincera sus sentimientos, ya que temen el ser juzgado, a este estereotipo se asocia que «las niñas por naturaleza son suaves y dulces, y los niños, por el contrario, bruscos y fuertes» lo cual ha influido en establecer relaciones de dominación y sumisión.

Otro ejemplo de estereotipo de género muy escuchado es «La mujer notiene la suficiente autoridad para ocupar cargos directivos» este es un pensamiento equivocado que tienen la mayor parte de la sociedad, en la actualidad las mujeres han demostrado que cuentan con la misma capacidad que los hombres para ocupar altos cargos y dirigir a un grupo de personas.

Otras personas consideran que un estereotipo es seguir una tendencia la cual se ha hecho popular por el simple hecho de que una persona famosa lo ha tomado en cuenta esto es más utilizado en el ámbito publicitario para así llamar la atención de las personas y promover la venta de los productos.

En este aspecto podemos apreciar el estereotipo de la esposa mandona “Cambia la bombilla”. “Saca la basura”. “No vas a salir de ninguna manera con esa camisa”. ¿Le suenan esta retahíla de órdenes? Seguro que sí. La publicidad está llena hasta los topes de esposas mandonas y hombres sumisos. La pregunta es: ¿Cuánto de verdad hay en este estereotipo publicitario? Lo que está claro es que el papel que se desarrolla en este tipo de ejemplos (en la publicidad y en todas partes) es el machismo. Sin embargo, estos estereotipos o conductas se van modificando y ajustando a la realidad que se corresponde a un momento determinado, por lo que estos patrones o prejuicios son variables.

No obstante, aunque los estereotipos pueden presentar apreciaciones positivas o negativas, casi siempre poseen aspectos negativos, de allí la importancia de inculcar la tolerancia y de entender que todos los individuos somos diferentes.

En conclusión, los estereotipos tienen una parte de verdad. No obstante, al estar basados en la observación general de un grupo y no de un individuo nos conduce a no darnos cuenta de la infinidad de excepciones que existen. Pero si nos dejamos llevar de estos no pueden dirigir a la discriminación y la creación de perjuicios. Por lo tanto, esta en nosotros mismos tratar de cambiar algunos conceptos de ciertos estereotipos para así por conseguir como resultado encontrarnos de manera igualitaria para poder escoger nuestra verdadera identidad, en lugar de hacerlo a partir de un guion preestablecido que abarca numerosas desigualdades.

“Que te de miedo ser uno más del montón”-Jürgen Klarić