Importancia De La Bioética En El Control De Enfermedades Infecciosas
A través del tiempo la humanidad ha tenido que sufrir una serie epidemias, las cuales han potenciado una mejora acelerada en los servicios de salud. Actualmente hay un área en la que el mundo no está evolucionando adecuadamente y es la preparación para una pandemia. No podemos predecir cuándo, pero dada la continua aparición de nuevos patógenos, el creciente riesgo de un ataque bioterrorista, y la creciente globalización de nuestro mundo, hay una gran probabilidad de que una gran y letal pandemia de hoy en día acontezca en nuestra vida. Por esta y muchas razones, este fracaso debería preocuparnos a todos, porque la historia nos ha enseñado que habrá otra pandemia mundial de naturaleza mortal. Ademas, se ha observado que el control de enfermedades infecciosas no está progresando como debería. Ejemplo de ello es la incapacidad para rastrear su propagación y el desarrollo de nuevas herramientas en el control de emergencias en salud pública.
Por otra parte, es de especial interés reconocer la importancia de la bioética en el control de enfermedades infecciosas, debido a las consecuencias reportadas a través de la historia y a las situaciones futuras las mismas. Asimismo, el tema de las enfermedades infecciosas merece más atención, ya que plantea sus propias cuestiones éticas difíciles, puesto que las medidas de contención en salud pública como el aislamiento y la cuarentena pueden requerir la violación de los derechos humanos y libertades básicas, lo cual genera una incógnita en cuanto a cómo lograr un equilibrio entre el objetivo utilitario de promover la salud pública. Las enfermedades infecciosas implican cuestiones de justicia, las cuales deberían ser preocupación central de la ética, contrario a ello, se ha visto que la carga es más pesada para los países en vías de desarrollo. Por consiguiente, debería tomarse la importancia del caso de acuerdo a la bioética en el control de enfermedades infecciosas.
Las enfermedades infecciosas merecen una mayor atención por parte de la bioética, ya que el nivel de severidad es muy alto. Por otro lado, se cree que plantean entornos difíciles alrededor de la ética/filosofía propia y su interrelación con la justicia. De acuerdo a cómo se analizan de forma sostenida los problemas que plantean las enfermedades infecciosas, es de especial interés reconocer las limitaciones de un modelo biomédico de causalidad de las enfermedades. Un modelo sociológico de causalidad de las enfermedades reconoce las enfermedades infecciosas como una cuestión de justicia y por tanto, de bioética y además permiten formular principios de bioética adecuados a los contextos en los que prosperan las enfermedades infecciosas.
Las enfermedades infecciosas seguirán persistiendo entre nosotros, por tanto, es el momento de que las cuestiones bioéticas reciban la importancia que merecen, con la intención de solventar y controlar las enfermedades infecciosas. Con el propósito de que se indague más sobre el tema, al igual que en otros aspectos de la atención en salud; como lo son el aborto, la eutanasia, la genética, la clonación y la investigación con células madre.