La Complejidad De Las Sonatas de Mozart
Introducción
En 1993, Rauscher y colaboradores encontraron que el desempeño en pruebas de inteligencia mejora siempre que se escuche significativamente cuando se escucha previamente la sonata K448 de Mozart (Rauscher, Shaw, & Ky). En un estudio posterior, los mismos investigadores lograron replicar sus hallazgos con la misma sonata, pero no así con música de Phillip Glass (Rauscher).
Desarrollo
Dado que la música minimalista (Phillip Glass) se caracteriza por un menor grado de complejidad de tener menor información (menos notas y acordes) que la música clásica (Mozart), los autores proponen que es esta propiedad la complejidad de la obra aquella que media la optimización de ciertas habilidades cognitivas. Sin embargo, no es propuesta una medida objetiva de dicha propiedad.
En el campo de la estética empírica, el grado de complejidad ha sido de gran interés a últimas fechas (Reber, Schwarz, & Winkielman). Se cree que la complejidad en obras de arte visual, podría determinar el gusto que se tiene por ellas, de tal forma que los individuos preferimos obras de arte que “reten” el intelecto a obras de arte fácilmente comprensibles (Belke, Leder, & Carbon).
Muchos autores coinciden en que el carácter complejo de un fenómeno cualquiera puede caracterizarse mediante una distribución de ley de potencia (power law distribution) (Casti, J. L.; Karlqvist). Esta distribución aparece en fenómenos que presentan organización jerárquica por bloques, transmisión de comunicación multiescalar y aparición de propiedades emergentes dependientes de la configuración específica de sus componentes (Flores-Valdés).
En el 2009, Martínez-Mekler y colaboradores caracterizaron la distribución de los elementos de distintos fenómenos complejos en la naturaleza; entre ellos determinadas obras de arte visual y musical (Martínez-Mekler), proponiendo así una medida objetiva de complejidad en el campo artístico. Si, tal como sugiere Rauscher, es la complejidad de la obra de arte música aquello que logra modular las funciones cognitivas.
Cabe suponer también que estímulos visuales complejos podrían modular de la misma forma dichas funciones. El presente trabajo exploró un modelo estocástico de generación de imágenes, intentando encontrar una relación escalar invariante, tal como aparece en las distribuciones de ley de potencia. Los hallazgos señalan que nuestro modelo es susceptible de mejoras para encontrar dicha relación.
Por lo que otros modelos deberán ser analizados con el fin de comprobar si el Efecto Mozart ocurre al observar, y no simplemente escuchar, obras de arte. Ya que las dos principales dimensiones de una pintura, o imágenes, por un lado, la configuración de sus elementos y, por otro, la dimensión cromática, la segunda parte de este estudio intentó mostrar que la complejidad (contenida en dicha configuración).
Conclusión
Es completamente responsable de la modulación cognitiva que da lugar al juicio estético. Para ello, se exploró la modulación de los elementos vectoriales del espacio de color HSV en pinturas pertenecientes al periodo moderno. Los hallazgos muestran, sorprendentemente, que la brillantez es responsable de que percibamos una pintura interesante y compleja.
