La Contabilidad Ambiental: Problemas E Importancia
La contabilidad ambiental es un conjunto de instrumentos y sistemas que nos sirven para medir, revisar y difundir la actuación ambiental de la empresa; este integra tanto la información fiscal como la económica con el propósito último de posicionar la empresa en términos de la eficiencia ecológica. También expresa que la ecoeficiencia se logra aumentando el valor de la empresa, al mismo tiempo que esta reduce el uso de recursos y los impactos negativos ambientales.
Por otra parte, the World Business Council for Sustainable Development (2002) sostiene que la eficiencia ecológica se logra mediante la entrega de bienes y servicios, a precios que puedan competir y satisfacer las necesidades del hombre, reduciendo de manera progresiva los impactos ecológicos.
Según la Fundació Fórum Ambiental “la contabilidad ambiental se puede definir como la generación, análisis y utilización de información financiera y no financiera destinada a integrar las políticas económica y ambiental de la empresa y construir una empresa sostenible”.
Los modelos contables ambientales se componen de los mismos elementos que los modelos contables financieros, sociales, administrativos y gubernamentales, pero su modelo debe estar dirigido a los aspectos ambientales.
Además, Senés y Rodríguez señalan al respecto que dichos puntos de vista no siempre se cumplen. Hay regulaciones contables ambientales en que sus elementos desarrollados en dichas normativas no corresponden con las necesidades de información en materia ambiental; es decir, los elementos no son adecuados para producir información importante, útil y relevante para tomar decisiones en materia de sostenibilidad social y ambiental. La presente situación se muestra en virtud de que las preocupaciones ambientales son, en cierto modo, recientes (tres décadas) y la articulación entre la contabilidad y el medio ambiente se ciñe a desarrollos emergentes, incluso en construcción.
Problema
Las empresas al igual que la sociedad y la economía deben mostrar una nueva relación con el medio ambiente, a través de sus estados financieros. Para llevar a cabo dicho propósito, deberá usar la contabilidad ambiental, pero encontramos que la estructura conceptual de la contabilidad convencional tiene limitaciones relevantes para mostrar de manera correcta esta relación entre la empresa y el medio natural.
La falta de una normativa que regule la cuestión ambiental en términos contables produce problemas de calidad y cantidad de información. En los últimos años, las normas que han sido instauradas de manera generalizada por multitud de países son las normas IAS/IFRS. El problema más importante de la contabilidad ambiental es que en la mayoría de los casos, a los costes no se les puede ni separar ni atribuir procesos o productos concretos.
Además, de que el periodo en el que se produce el efecto contaminante y en el que se produce la descontaminación (generando costes) no suele coincidir. Otro problema es que es muy complicado contar con un sistema de contabilidad ambiental único y aceptado por todo tipo de empresas, debido al funcionamiento tan diferente de unos sectores con otros.
Ante las dos posibles alternativas para enfrentar la problemática del medio ambiente se ha comprobado que la mejor opción es desarrollar un marco conceptual propio para esta disciplina, construyendo un balance y una cuenta de resultados medioambiental, ya que la primera opción no aporta información completa a los usuarios.
Importancia
La contabilidad del medio ambiente en el contexto de la contabilidad nacional va a tratar no solo de asignar valores económicos a los impactos ambientales, o al agotamiento y la mermación de los recursos producto de la actividad económica, sino que a través de ella se va a conocer el patrimonio ambiental como un stock, así como su posible evolución, de ahí la necesidad de contar con un inventario o estado ambiental que oriente a las Administraciones Públicas e informe a los usuarios en general.
De ahí, que sea tan importante que las administraciones públicas y la empresa privada, especialmente en actividades industriales, se den cuenta de la manera como están aplicando las reglas que existen al respecto para la protección medioambiental. Ahora, por ejemplo, algunas de las grandes empresas en Perú como Plaza Vea, Tottus, Metro, etc., han implementado políticas ambientales, como la eliminación de bolsas plásticas y ser sustituidas por otros materiales.
Los bancos y otras corporaciones financieras han optado por enviar los extractos de cuentas y otras comunicaciones de interés a sus respectivos clientes, vía Internet, (donde se exige la identificación del cliente), evitando con esto el consumo excesivo de papel que afecta en gran medida la naturaleza para extraer la celulosa de los árboles.
