La División Del Trabajo Social De Durkheim
La obra de Durkheim sobre la división del trabajo social (1893) fue traducida al inglés cuarenta años después de su publicación. Sostiene que este tiene un doble valor ya que, por un lado, permite una reconsideración del papel desempeñado por el mismo en el desarrollo del pensamiento sociológico moderno y, por otro lado, llama la atención acerca de varias concepciones fundamentales para gran parte de la investigación contemporánea.
El pensamiento positivista de Durkheim, procede de Comte, así busca adoptar los métodos y criterios de las ciencias físicas para la determinación de aquellas leyes sociales inducidas mecánicamente. Dentro de dicha tradición positivista, la división es clasificable haciendo un enfoque anti individualista y anti intelectual. Es una rebelión contra el positivismo utilitarista e individualista que caracterizó a gran parte del pensamiento social inglés. A Durkheim, le pareció un sociologismo radical el hecho de mantener la autonomía de la sociología como una disciplina independiente. La división muestra un enfoque objetivo.
Sostiene dicho autor que la fuente de la vida social es doble ya que encontramos la similitud de las consciencias y la división del trabajo.
En las sociedades ¨primitivas¨ la solidaridad es ocasionada por una comunidad de representación que dan a lugar a leyes que imponen los individuos, creencias y prácticas uniformes bajo la amenaza de medidas represivas. Estas leyes son índices externos (en sentido positivista) de la ¨solidaridad mecánica¨.
Además de mecánica, encontramos la solidaridad orgánica la cual está basada en la interdependencia de los individuos y los grupos que actúan en cooperación. Esta solidaridad define la naturaleza y las relaciones de las funciones. Estas, se pueden denominar, leyes restitutivas ya que su violación trae consigo consecuencias reparadoras. El movimiento fue de la solidaridad mecánica a la orgánica, aunque la mecánica nunca ha llegado a desaparecer debido al incremento del tamaño y la densidad de las poblaciones con el incremento de la interacción social. Las sociedades primitivas también poseen corpus de leyes civiles restitutivas, que involucran derechos y deberes entre los individuos. La existencia de estas relaciones desvirtúa la elogiable teoría de Durkheim del desarrollo unilineal. Además, al afirmar el predominio de la solidaridad orgánica en las sociedades modernas, Durkheim desprecia la comunidad de intereses.
De ¨La división del trabajo social¨, Durkheim, presenta un análisis sugerente e incisivo de un determinado proceso social y de sus correlatos estructurales. Aunque sus conclusiones son demasiado radicales, y su método es a veces defectuoso, todavía podría reconocerse, que el libro permanece como una de las contribuciones cimeras de la sociología moderna.