La Educación Como Las Bases De La Nación
La educación es la piedra angular del crecimiento y el desarrollo de las instituciones sociales, económicas y políticas de cualquier país; es decir, la fuente de riqueza y poder de toda nación. Por lo tanto, la educación es cada vez más valiosa para las personas. En el entorno actual, la educación le brinda a la gente una mejor oportunidad de empleo, lo que a su vez les conduce a un mejor estilo de vida, poder y estatus.
El mundo se ha convertido en una aldea global. Ningún país puede vivir aislado sin asumir el impacto de las tendencias globales y sin afrontar un cambio en todos los aspectos de la vida donde la educación se vuelve la herramienta más importante de este desarrollo global.
No obstante, la educación está experimentado cambios constantes bajo los efectos de la globalización. La globalización es un fenómeno multidimensional que presenta una variedad de tendencias económicas, sociales y culturales en las sociedades; y como en todos los demás ámbitos, la globalización afecta directamente a la educación en la manera en que se debe formar y preparar al profesorado. La educación y formación de los profesores desempeñan un papel fundamental, en esta era de la globalización, ya que son estos los que moldean y remodelan a la sociedad y así determinan la calidad de vida en la comunidad y la nación.
De esta forma, la formación del profesorado es el cerebro de todas las disciplinas educativas, ya que ofrece los conocimientos para educar a los futuros profesores; y así, la docencia se vuelve la madre de todas las profesiones y los profesores el activo más importante de cualquier sistema educativo. Dicho de otra manera, el personal docente es la columna vertebral de la educación. Por consiguiente, la calidad del profesor es crucial y globalmente está ligada a la calidad de la educación en general y los resultados de aprendizaje de los estudiantes. De modo que es necesario evaluar críticamente el impacto de la globalización en lo que se refiere a la educación y de esta forma traer un cambio de paradigma global en la formación de los profesores.
De acuerdo con Contreras (s.f.), esta condición global en la educación puede ser compleja, paradójica y controvertida ya que trae consigo enormes demandas de cambio en las prácticas educativas tales como qué deben enseñar los profesores, cómo deben hacerlo y con qué propósito. Además, el docente debe estar capacitado para el desarrollo de la cultura y la sociedad siguiendo las tendencias globales. Todo esto provoca una serie de demandas para el docente y un incremento en sus tareas donde muchas veces el tiempo es un factor que el profesor puede tener en su contra; y así no ser capaz de alcanzar y tener éxito en el cumplimiento de las expectativas educativas provocando en el maestro sentimientos de ansiedad y de culpa.
Sin embargo, a pesar de los desafíos a los que se enfrenta el personal docente, la globalización puede influir positivamente en la educación, ya que puede reunir a diferentes, personas, ideas y recursos en un conjunto mundial. El mundo entero se está convirtiendo en una sociedad global donde los medios de comunicación y la cibercultura se vuelven generales proporcionando nuevas oportunidades para la investigación y el acceso a las bibliotecas virtuales. Las herramientas y los desarrollos tecnológicos se pueden aplicar para un buen uso con el fin de satisfacer las necesidades de los estudiantes de todo el mundo. Así pues, los efectos de la globalización en la educación generan cambios tanto en el rol del maestro como en el rol del alumno produciendo éstos a su vez modificaciones en la sociedad.
Dichos cambios se pueden ver reflejados en la transformación de los niños, los futuros ciudadanos del mundo, en ciudadanos globales; es decir, personas inteligentes con una amplia gama de habilidades y conocimientos para ser aplicados en una sociedad competitiva basada en la información. La globalización y los avances tecnológicos están brindando y aumentando el acceso al mundo y, posteriormente, la formación docente y los contenidos usados en clase deberían reflejar esta perspectiva global.
La competencia global para expandir los mercados y promover innovaciones desarrollando así una fuerza laboral altamente calificada está cambiando el enfoque del trabajo, la flexibilidad profesional y las capacidades personales, y es así como la educación se involucra cada vez más en esa competencia capitalista global. Por lo tanto, los educadores se ven obligados a responder a un nuevo conjunto de desafíos.
En cualquier sistema educativo, el docente juega un papel importante en la preservación del patrimonio de la sociedad y en la facilitación de los recursos para el progreso social. De esta manera, el nivel de educación de una nación depende, en gran parte, de la calidad del personal docente de esa nación. Por lo tanto, es necesario revisar y transformar la capacitación profesional de los maestros como su formación en servicio.
El docente en el entorno globalizado debe estar preparado para pensar y actuar en asuntos relacionados con la educación desde una perspectiva global; es decir, debe ser capaz de crear un entorno de aprendizaje amigable y animado en el aula al mismo tiempo que adapta de manera efectiva las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) que son las que imponen y distribuyen el conocimiento, en su gran mayoría, en la actualidad.
La formación tecnológica debe ser un componente central de los programas de formación de los profesores. El maestro ideal en un mundo globalizado debe ser un experto en el uso de las TIC incorporadas en la enseñanza y en las situaciones de aprendizaje. Dichos profesores deben estar preparados para ser participantes activos en comunidades integradas de estudiantes.
De modo que la globalización tiene implicaciones de gran alcance para las naciones que la adoptan y más específicamente para la operación e influencia del docente en la educación. Para que el trabajo de los profesores sea relevante y pueda enfrentar los desafíos de vivir en una cultura globalizada, las políticas y lineamientos de la formación docente deberá revisar y repensar lo que significa ser parte de la comunidad global.
Como conclusión, el efecto y alcance de la globalización en la educación trae consigo implicaciones, preocupaciones y desafíos para todos los docentes que laboran en el siglo XXI. Por lo tanto, es necesario explorar y sugerir cambios en la preparación del profesorado de modo que se formen maestros capacitados para desarrollar la competencia global.
Referencias
- Contreras, O. (s.f.). Unidad 3: La problemática docente en la cultura globalizada. Recuperado el 3 de diciembre de 2020 de:
- http://madems.posgrado.unam.mx/tc_acatlan/mdl/pluginfile.php/4634/mod_resource/content/52/www/unidad3/impresionunidad3.pdf