La Etapa Más Importante: La Adolescencia
La etapa de la adolescencia es un período muy vulnerable durante el que los individuos empiezan a exponerse a grandes riesgos. Puede que sea una de las etapas de la vida que requiere de más ayuda por parte de los adultos para que estén dispuestos a escuchar, comprender y apoyar. Comienzan a sentirse parte del mundo adulto pero todavía no tienen las herramientas adecuadas para ello. Durante esta etapa, muchos adolescentes tienden a sentir que están al borde de perderlo todo. Los obstáculos en la comunicación es un factor de riesgo en los adolescentes.
El concepto de autoestima es una conclusión final del proceso de autoevaluación, el individuo tiene un concepto de sí mismo, si después pasa a autoevaluarse e integra valores importantes, esto, decimos que tiene un nivel concreto de autoestima.
Por lo tanto es un sentimiento valorativo de nuestro ser, de quiénes somos, del conjunto de rasgos corporales y mentales que forman nuestra personalidad. Esta se aprende, cambia y puede ser mejorada. Se relaciona con el desarrollo integral de la personalidad en los niveles: ideológico, psicológico, social y económico. Es propio en todas las personas y un producto social que se desarrolla con la interacción, en el proceso de la actividad y la experiencia social.
En investigaciones sobre la trayectoria de la autoestima global para ambos sexos, se encuentran niveles relativamente altos en la infancia que disminuyen cuando comienza la etapa de la adolescencia y a lo largo de ésta. Estos niveles vuelven a aumentar desde el comienzo de la vida adulta y vuelven a disminuir desde las edades medias de la vida adulta hasta la vejez.
La autoestima está estrechamente relacionada con el autoconcepto y se influyen mutuamente , ambos son componentes fundamentales de la personalidad de todos los seres humanos. La percepción y la valoración de los individuos sobre sí mismos condicionan su equilibrio psicológico, su interacción social y su rendimiento laboral. El autoconcepto se define como la imagen que cada individuo tiene de su persona, proyectando sus experiencias y la manera en que estas experiencias se interpretan.
Se forma sobre lo que uno piensa que los demás piensan de nosotros, de la comparación con otras personas, y puede verse influenciado por la edad, el género y el papel que uno juega en el ámbito social
Juega un papel crucial y central en el desarrollo de la personalidad, tal como lo destacan las principales teorías psicológicas; un autoconcepto positivo está en la base del buen funcionamiento personal, social y profesional, dependiendo de él, mayoritariamente, la auto satisfacción y sentirse bien con uno mismo. El término autoconcepto personal utilizado para denominar uno de los cuatro grandes dominios del autoconcepto destaca preferentemente sobre otras denominaciones (como las de autoconcepto emocional o autoconcepto moral…) por ser más comprensivo que otras y por entender que abarca todas ellas
Y es el resultado de un proceso de análisis, valoración e integración de la información derivada de la propia experiencia y de la interacción de los otros significativos, que constituye una importante base de conocimiento acerca de nuestras habilidades, logros, preferencias, valores, metas, etc. La base de conocimiento, y su organización, no es elaborada aleatoriamente, sino que es un proceso selectivo y creativo.
En este contexto, se plantea el presente estudio que tiene como objetivo identificar qué factores fomentan la autoestima en la adolescencia, estudiar las características del autoconcepto, identificar qué emociones básicas y/o sociales se encuentran presentes en esta etapa, analizar qué se entiende en la adolescencia por bienestar o felicidad, y estudiar el proyecto vital de los adolescentes que empieza a manifestarse.
De esta forma, se hipotetiza que, a medida que el participante se encuentra en una etapa más avanzada de la adolescencia, su autoestima se ve ligeramente disminuida, ya sea debido a factores internos o a factores externos. Así como, que el nivel de madurez supone una expresión y una visión con una perspectiva más realista sobre un proyecto de futuro que se postula más cercano en la última fase de la adolescencia.