La Importancia De Escuchar En La Pedagogía

El objetivo de este artículo fue el de dar a entender la importancia de escuchar en la pedagogía y a su vez mostrar algunos aspectos importantes por los cuales se debe de tratar la escucha tanto en ámbitos familiares, escolares, sociales e incluso personales. Demostrando que la escucha no es importante solo como oír, sino como manera de dialogo, interpretación, lectura y socialización lo cual genera espacios más críticos, analíticos y de cohesión, tanto en la academia como en la vida diaria de las personas que saben escuchar, creando también una manera de poner la escucha en contexto, no solo escuchando con el oído sino con los demás sentidos, haciendo del escuchar un hábito, un hábito el cual pueda cambiar y transformar el mundo hacia algo mejor demostrando que algo tan “común” como el hecho de escuchar podría ser una de las mejores estrategias para mejorar la sociedad a nivel académico, cultural, social y humano.

INTRODUCCIÓN

Uno de los grandes problemas y a la vez solución para la pedagogía es el escuchar, pero si se estudia acerca de la pedagogía actual, se evidencia que no se le ha dado la importancia que merece la acción de escuchar a través de la historia, dejando a un lado todo el gran significado que este tiene en el ámbito educativo, comunicativo, social y cultural, logrando ser este simple hecho quizá uno de los más fundamentales y significativo en las corrientes pedagógicas, es por esta razón por la cual está escrito este artículo, para dar a contrastar la gran importancia del acto de escuchar en la pedagogía.

El escuchar en la construcción del dialogo

Se debe tener en cuenta el escuchar en cada oportunidad de enseñanza, ya que el escuchar es uno de los componentes más importantes a la hora de instruir, refiriéndonos al hecho de que para que la información pueda ser retenida o recibida de la mejor manera, se debe de tener una buena escucha, lo cual mejoraría notablemente la capacidad de aprendizaje y a su vez la capacidad de dialogo, ya que “Escuchar es decisivo para que el niño construya un sentido a lo que hace y encuentre el placer y el valor de comunicar. Escuchar es un arte para entender la cultura infantil: su forma de pensar, de hacer, preguntar, teorizar, desear, etc.” (Malaguzzi, 1976) de esta manera el niño estaría también encontrando un nuevo y más grandioso método de comunicar, generando así mejores espacios de dialogo, espacios más profundos, críticos, analíticos e incluso coherentes. Pero escuchar a los niños va mucho más allá de oír lo que dicen, tiene que ver con creer en ellos, respetar y valorar sus opiniones, saberlos escuchar de buena manera y lograr impartir buenos diálogos desde nosotros mismos, para así poder contribuir de buena manera a su autoaprendizaje siendo guías y promotores para que los niños puedan mejorar en cada encuentro.

El significado de la escucha

El verdadero significado de la escucha se puede fraccionar en diferentes aspectos, pero concuerdo con Rinaldi (2001) en que “La escucha debería estar abierta y ser sensible a la necesidad de escuchar y a ser escuchado, y la necesidad de escuchar con todos nuestros sentidos, no sólo con los oídos.” a lo cual se infiere que la escucha no es tan solo el acto de usar los oídos, sino por el contrario no limitarnos y lograr escuchar con todos nuestros sentidos, logrando de esta manera poder escuchar todo aquello que nos rodea e inclusive las cosas que no podemos percibir a simple vista, produciendo de esta manera una mejor habilidad de escucha.

La escucha da de por si para hablar de infinidad de conceptos y significados:

• La escucha debe de tener la mejor disposición y estar abierta a las diferencias, considerando el valor del punto de vista de los demás y de su exégesis.
• La escucha debe de provocar preguntas, no respuestas.
• La escucha debe en todo momento de estar abierta a escuchar y de igual manera de ser escuchada.
• La escucha interna es sin duda alguna un factor muy importante, ya que también nos debe motivar a escuchar a los demás.
• La escucha no solo es oír, en el momento en que se escucha se hace un dialogo y una reflexión interna.
• La escucha significa dar, sentido, valor y significado al mensaje que quiere ser difundido por el otro.
• La escucha enaltece tanto a quien escucha como a quien produce el mensaje.
• La escucha genera vínculos de afecto entre las personas que escuchan y son escuchadas.

La escucha y los niños

Desde un comienzo, se evidencia como los niños son curiosos, inquietos, tienen voz, quieren escuchar y ser escuchados, el inconveniente está en el momento en el que no se escucha al niño y se trata de callar, quitándole así sus “alas”, su manera de manifestarse, de crecer y a su vez haciendo de una u otra manera que el niño comience a temer al acto de preguntar por el miedo a no ser escuchado o simplemente ser callado.

Es aquí donde se debe de tener clara certeza de que no se debe de callar, retrasar y asustar al niño en los momentos en los que él quiera ser escuchado, por su contraparte se debe de escuchar atenta y de la mejor manera posible al niño impulsando sus capacidades de socialización y creación de diálogos mediante la escucha, para así poder saber y comprender con claridad que es lo que piensa, siente y está interpretando el niño, no solo con sus palabras, sino con sus acciones, gestos y comportamientos, ya que “La socialización no se enseña a los niños: son seres sociables” (Rinaldi, 2001) esto se debe de comprender entendiendo que los niños de por sí ya tienen muchas habilidades para socializar, hablar y escuchar, las cuales solo se deben de impulsar, para de esta manera poder ayudar al niño a mejorar y crecer con mejores bases, tanto críticas, como humanas y argumentativas.

La escucha interna

El niño al escucharse a sí mismo también genera procesos en los cuales genera cambios, hábitos y pensamientos los cuales él decide o trata de manejar de la manera que le parezca más conveniente, es aquí donde el docente debe de saber llevar esta escucha interna del niño y debe de saber cómo observar, interpretar y deducir aquello que está generando el niño en su escucha interna ya que como dice Malaguzzi (1976) “Lo que los niños aprenden no se da como resultado automático de lo que se enseña. Más bien se debe en gran parte a la acción de los niños como consecuencia de sus actividades y de nuestros recursos”. Es por esto que el docente debe de crear o encontrar los mejores métodos y recursos para lograr que el niño pueda desarrollar de la mejor manera cada una de sus capacidades, logrando encontrar un método con el cual poder fortalecer la escucha interna del niño, a su vez logrando que el niño se sienta más cómodo, seguro y feliz consigo mismo. Fortaleciendo su propia escucha interna y fortaleciendo la de sus alumnos, haciendo sentir seguro, confiado y capaz al niño, pero esta ayuda se debe brindar al niño desde su ámbito familiar, que su familia también lo ayude a mejorar esta escucha buscando también sus propios medios.

La escucha desde casa

El acto de escuchar no solo debe de ser tratado en el ámbito escolar y educativo, esto se debe de llevar desde casa como un proceso conjunto con todo aquello trabajado en la escuela, para de dicha manera poder llevar la escucha a un mayor nivel y lograr hacer de esto algo que parezca muy sencillo. Ya que como dice Beuchat (s.f) “Este desarrollo se inicia en el interior del mundo familiar” por ende, la familia debe de ser consciente de su rol en el desarrollo de la escucha de su hijo no solo para su progreso intelectual, sino tanto social y cultural, marcando significativamente en la vida de su hijo y en sus vidas propias para un bien común, generando mejores espacios de dialogo y escucha.

La escucha en el ámbito escolar

Se debe resaltar de gran manera la importancia que se le debe tener al acto de saber escuchar en el ámbito escolar, debido a que es uno de los espacios en los que el niño suele recibir más información en su día a día, ya que es uno de los espacios en los cuales el niño pasa la mayor parte de su tiempo. Fisher y Terry (1982) nos recuerdan que los niños pasan por lo menos seis horas del horario escolar escuchando. Por lo cual se infiere que es en el colegio en donde se debe prestar de gran manera una brutal importancia al escuchar, todo esto para que el niño logre desarrollar de una mejor manera sus capacidades en el ámbito escolar y así cuando este fuera de él, sea algo que el niño pueda hacer de una manera muy sencilla.

Se debe lograr que el niño guste de escuchar y no que se sienta obligado a hacer esto, ya que más que nada se busca que el niño sea feliz en el ámbito escolar, es aquí donde se debe de tomar todo lo ya expuesto y lograr la manera más eficaz, divertida y provechosa para que el niño quiera escuchar, escucharse y ser escuchado.

La escucha en el desarrollo de la sociedad

Durante mucho tiempo la escucha se ha incluido y estudiado como parte de la comunicación o la socialización, a lo cual se le da aún más importancia al acto de escuchar, ya que no solo es el oír, sino que incluye en sí mismo el interpretar, dialogar, expresar e incluso retroalimentar. Es por esto que se da una gran importancia a la escucha en el desarrollo de la sociedad, como recalca Codina (2004) “El tiempo total que dedicamos a la comunicación, el 22% se emplea en leer y escribir, el 23% en hablar, y el 55% en escuchar.” Escuchar es sin duda alguna la actividad a la cual dedicamos más tiempo, por ende debe ser también la actividad que mejor deberíamos dominar, es por esto que se debe de tener una clara percepción de lo que escuchamos y de cómo interpretamos eso que estamos escuchando, para así llevar un desarrollo intelectual, social, comunicativo, cultural y auditivo a la sociedad.

CONCLUSIONES

• Escuchar es un factor primordial en la construcción del dialogo, generando mejores formas de entablar conversación y con mayores posibilidades.
• Al saber escuchar el niño genera en sí mismo espacios más críticos, analíticos y de cohesión, logrando así una mejor comprensión en contexto.
• Escuchar también se basa en creer en ello, respetar y valorar opiniones, demostrando una buena actitud frente a esto.
• Jamás se debe de callar a una persona o no escucharla, ya que es algo importante en la pedagogía en el momento de recibir una idea u opinión.
• Se debe de estar dispuesto a escuchar y a ser escuchado.
• Los niños desde que nacen son seres sociables y con grandes habilidades de la escucha, las cuales solo se deben de potenciar.
• Fortalecimiento de la escucha interna con el fin de generar confianza y seguridad en sí mismo en el niño.
• Mejora de las habilidades de dialogo y escucha desde casa con ayuda de los padres.
• Desarrollo de la escucha en el ámbito escolar, para desempeñarla de una mejor manera fuera de este.
• Hacer de escuchar algo divertido, para que el niño pase momentos agradables y valore el acto de escuchar en cada momento.
• Escucharse como método de aumento de autoestima, confianza y felicidad.

AGRADECIMIENTOS Y LITERATURA CITADA

• Malaguzzi, L. (1976). Inspirados en Reggio Emilia: Reggio Emilia y la pedagogía de la escucha. Recuperado de http://www.inspiradosenreggioemilia.com/reggio-emilia-y-la-pedagogia-de-la-escucha/
• Rinaldi, C. (2001). La pedagogía de la escucha: La perspectiva de la escucha desde Reggio Emilia. [Archivo PDF]. Recuperado de http://www.bama.org.ar/sitio2014/sites/default/files/_archivos/merkaz/Jomer_on_line/rh_pedagogia_escucha.pdf
• Malaguzzi, L. (1976). Elige educar: Loris Malaguzzi: la historia que lo llevó a fundar “Reggio Emilia”. Recuperado de https://eligeeducar.cl/loris-malguzzi-la-historia-lo-llevo-fundar-reggio-emilia
• Beachaut, C. (s.f).Lectura y vida: Escuchar: El punto de partida. [Archivo PDF]. Recuperado de http://www.lecturayvida.fahce.unlp.edu.ar/numeros/a10n3/10_03_Beuchat.pdf
• Fisher, C.; Terry, A. (1982). Children’s language and the language arts. New York: Mc Graw Hill Book.
• Codina, A. (2004). Intangible capital: Saber escuchar. Un intangible valioso. [Archivo PDF] Recuperado de http://www.intangiblecapital.org/index.php/ic/article/view/23/29