La Libertad Dentro del Mundo Moderno

Hablar sobre el mundo moderno y las características que engloban a este, es un tema extenso y controversial, sobre todo si deriva en cuan feliz es el ser humano dentro de este sistema, esto puede resultar incierto si tenemos en cuenta las diversas interpretaciones sobre dicha cualidad, algo que finalmente nos termina conduciendo hacia la idea de un perspectivismo existente en la población.

Pero primero que todo debemos enfocarnos en tratar de entender el concepto de mundo moderno, para esto es necesario enlazarlo inmediatamente a la aparición del capitalismo en la sociedad y su influencia en la historia global, puesto que las relaciones sociales y económicas de este sistema han penetrado en la mayoría del mundo y han incidido en la mayoría de los aspectos de la vida humana.

La libertad dentro del mundo moderno

Un aspecto fundamental para lograr comprender y comprobar si es que efectivamente el mundo moderno es la única fuente de genuina felicidad humana, es estudiando la libertad y los límites existentes bajo este concepto, desde el ámbito global.

La modernidad se ha caracterizado por la lucha constante de la sociedad en quebrantar las ataduras que atormentan a la humanidad, en todos los aspectos de la vida, convirtiéndose así desde la Ilustración en una idea que ha tomado relevancia hasta el día de hoy. Sin dejar atrás conceptos que fluctúan dentro de este estudio, como lo son el Estado y la sociedad, la excepción entre ambos, el rol que posiciona al hombre dentro de esta esfera, y la gran importancia que ha tomado este concepto en el pensamiento político, que sin lugar a dudas se ha mantenido en un constante debate, siendo el foro de discusión permanente durante el transcurso del tiempo, bajo qué programas radica la libertad.

El término libertad puede ser visto desde diversas aristas que chocan entre sí y no comprende una teoría única dentro del marco investigativo, sino que aúna distintas visiones teóricas, como lo son la libertad individual y colectiva, también puede ser conceptuada inseparable de la libertad económica o a la inversa y que la sociedad disfruta de ciertas libertades debido a que las personas han decidido reducir otras, a través de normas.

Algunos autores como John Locke menciona que “Los seres humanos estamos naturalmente en un estado de libertad perfecta para ordenar nuestras vidas como consideremos que está bien, sin depender de la voluntad de ningún otro” mientras que mucho antes Montesquieu escribió “La libertad es un derecho de hacer cualquier cosa que las leyes permitan: y si un ciudadano pudiera hacer las que prohíben, él ya no sería un poseedor de la libertad, ya que sus conciudadanos tendrán el mismo poder”.

Desde el punto de vista histórico y la lucha por la libertad autores como Erich Fromm consideran que “Son los oprimidos los que tratan de conquistar nuevas libertades en directa oposición a aquella clase que quiere preservar privilegios. La aspiración a la libertad está arraigada en todos los oprimidos, los cuales expresan así un ideal que trate de abarcar a toda la humanidad. Sin embargo, esas clases que en una etapa luchan por su libertad frente a la opresión, acaban alineándose junto a los enemigos de la libertad al tener que defender los nuevos privilegios adquiridos”.Fuente de la cita.

Lo cierto es que esta lucha por la emancipación a lo largo de la historia, ha estado repleta de dificultades, sin embargo, surge la posibilidad del hombre de autogobernarse por sí mismo, tomar sus propias decisiones y elegir su propio destino, pero como mencionamos anteriormente el grado de autonomía que se le faculte al ser humano para vivir como lo desee dentro de una sociedad, está limitado por ciertos valores que ha decidido en conjunto como comunidad, tales sean la igualdad, las leyes, la seguridad, el orden público y la felicidad de cada persona, pero a su vez estas normas son disputadas por el pluralismo existente en la población, recordándonos que los fines humanos son múltiples y que esto provoca, que no todos ellos sean considerados y que la libertad de la sociedad suprime a las libertades individuales, aun en una democracia.

Antes debemos dejar en claro que las personas son libres siempre y cuando otras no interfieran en la realización de sus actividades, cada vez que tengan la facultad de poder realizarla, es decir no son libres cuando ya sea una persona o institución le imposibilita a la otra efectuar algo que podría hacer si no se lo impidiesen, ósea solo supone la injerencia premeditada de otros seres humanos dentro del ámbito en el que yo pudiese actuar. Sin embargo, muchas veces la incapacidad de efectuar dichas actividades o de obtener ciertas cosas, es debido a la opresión económica y a la lucha de clases, bajo un sistema capitalista, en donde frecuentemente los ricos poseen mayores libertades que los pobres, aunque algunos escépticos señalan que si veo que no puedo hacer o lograr lo que quiero, solo necesito limitar o extinguir mis aspiraciones y deseos, y con ello me hago libre, algo que nosotros rechazamos profundamente, ya que siguen ahí las posibilidades de poder cumplir aquellos ideales, pero nos han sido arrebatados por otros.

También debemos considerar el vigor de la libertad y el derecho, soslayando el poder y la soberanía que pueden llegar atribuirse ambos conceptos, cuando existen hechos y cuestiones inhumanas que son legalizados por una parte de la comunidad o un soberano, es entonces cuando se avasalla la posibilidad de autodeterminación de los pueblos.

Por este motivo, cuando hablamos de relaciones humanas y intentamos enmarcarlas dentro de un cuadro de medición de libertad, parece relevante considerar la mirada de Feyerabend quien considera que: “Mi intención no es reemplazar un juego de reglas generales por otro; más bien mi intención es convencer al lector de que todas las metodologías, incluyendo a las más obvias tienen sus límites.” Por esta razón e incluyendo esta aportación hacia la mirada de la democracia, entendemos y consideramos que existen claramente limitaciones propias pertenecientes a todo tipo de sistema político.

Más aún, creer que una de las tantas formas de pensamiento creadas por el hombre, es la respuesta absoluta a todos los problemas de la sociedad en la modernidad es una falacia que nos evita ver la posibilidad que probablemente la democracia no sea la mejor forma de gobernancia y que a su vez, el encerrarse en una ideología, sin antes examinar sus ventajas y sus límites no nos permite ejercer nuestra capacidad de libertad, ya que según Feyerabend “la aceptación o rechazo de ideologías debe ser un asunto individual, la separación del estado y la iglesia debe suplementarse con la separación del estado y la ciencia, que es la institución religiosa más reciente, más agresiva y más dogmática. Tal separación podría ser nuestra única oportunidad de alcanzar la humanización que somos capaces pero que nunca hemos realizado en su totalidad”.

Aún si bien alcanzaramos esta separación, hay libertades propias que se abandonan por la necesidad de la supervivencia humana y por sobre ello por la importancia de nuestras relaciones interpersonales. Desde este punto de vista, la libertad y el respeto de la libertad de otros es una danza de la vida en donde se debe aprender a transitar de manera fluida como una pieza de Vivaldi en las 4 estaciones.

Cada estación trae lo suyo, como el sol, el frío y la lluvia danzan nos permiten la sobrevivencia en el planeta tierra, con cada cosecha, con cada florecimiento de un fruto. Creer que todo es verano, es democracia, pero no todo es verano, todo trae su beneficio, incluso el invierno, se requiere algo de anarquía y algo de libertad de pensamiento para seguir cuestionandonos nuestro entorno y nuestra realidad.

Finalmente, ha sido esa capacidad de replantearnos con cada temporada lo que nos a permitido llegar a este punto, de cuestionar todo aquello que hemos probado y refutado de nuestras teorías y reglas políticas, sociales, religiosas y científicas.

La libertad es un emergente intangible, mientras más se persigue menos se alcanza, ya que la libertad como concepto religioso, valórico, humano y político va cambiando, como las temporadas de crecimiento o retroceso del ser humano. Más aún, el ser humano siempre incluirá este concepto dentro de sus paradigmas personales, ya que el ser humano persigue de manera intrínseca formas de vivir que le permitan ir más allá de la experiencia humana, en otras palabras, todo ser humano busca ideas o caminos que lo lleven a trascender esta misma humanidad y no ser oprimido. Lamentablemente, el espíritu del hombre moderno se ve oprimido por los propios padres que le prometieron liberarle en la actualidad, la ciencia moderna y la democracia.

Para consensuar dentro de todos estos aspectos posibles, si bien como mencionamos en un principio el mundo moderno está en un persistente intento de solventar y entregar la condición de libertad a todos sus individuos, damos por hecho que aún existen suficientes impedimentos para que esta condición no se cumpla en su cabalidad, sobre todo cuando la libertad de algunos depende de la restricción de otros o cuando una inmensa mayoría está destinada a regirse bajo ciertos estándares impuestos desde su concepción, nos preguntamos entonces, ¿cuál es el significado de la libertad para aquellos que no pueden ejercerla? Puesto que si lo analizamos desde una mirada perspectivista cada ser humano busca libertades diferentes dependiendo de su posición social y económica, pero la minoría que ya la posee la ha conseguido sirviéndose del que no la dispone, esta postura nos hace creer que la afirmación de que el mundo moderno goza de la libertad es ambigua e incierta.       

24 May 2022
close
Tu email

Haciendo clic en “Enviar”, estás de acuerdo con nuestros Términos de Servicio y  Estatutos de Privacidad. Te enviaremos ocasionalmente emails relacionados con tu cuenta.

close thanks-icon
¡Gracias!

Su muestra de ensayo ha sido enviada.

Ordenar ahora

Utilizamos cookies para brindarte la mejor experiencia posible. Al continuar, asumiremos que estás de acuerdo con nuestra política de cookies.