La Naturaleza Del Hombre Social Según la Sociología
La sociología profundiza en la naturaleza social del hombre. Como los antepasados primates de los que venimos, nuestra especie es increíblemente social. La gran mayoría de nosotros anhela la interacción social, hasta tal punto que los psicólogos consideran que vivir sin ninguna interacción social es un estilo de vida poco saludable.
Con este fin, la sociedad ha desarrollado, tanto consciente como subconscientemente, conjuntos de reglas muy complejas para funcionar juntos como una comunidad, muchas de las cuales todavía no podemos decir que las comprendemos plenamente. La sociología es una ciencia relativamente moderna. Antes de estudiar sociología, tenía una visión ingenua y poco científica de la sociedad, no muy diferente de la que se solía estudiar durante miles de años sin ningún proceso sistemático adecuado. Sin embargo, estudiar sociología requiere ver el mundo a través de una lente científica. Las teorías no pueden ser aceptadas simplemente sin un pensamiento crítico; tienen que ser fundamentadas. Debido a que la sociedad es un fenómeno complejo, es imposible comprender y resolver sus numerosos problemas sin el apoyo de la sociología. Si queremos reparar la sociedad, no se puede hacer sin ningún conocimiento de sus mecanismos.
Para mí, el estudio de la sociología me ha permitido ver mi propia cultura y sociedad a través de una lente más objetiva. La gente generalmente juzga el mundo utilizando su propia cultura como punto de referencia; es la perspectiva a través de la cual se debe juzgar a otras culturas. Si uno quiere cambiar la sociedad para mejor, es mucho más productivo ver las culturas sin ningún punto de vista predefinido, como sostiene el concepto de relativismo cultural. Sólo mediante una visión científica de las sociedades se puede obtener una visión más objetiva, y a través de ella se pueden rechazar las tradiciones perjudiciales y promover las sanas. La sociología también me ha hecho una persona más empática. Normalmente nos limitamos a la organización y a la cultura que podemos experimentar directamente y es difícil conocer íntimamente a la gente de otra área. Por lo tanto, para comprender y apreciar los motivos y las condiciones en las que viven los demás, el conocimiento de la sociología es esencial. También es importante darse cuenta de que cuando las personas actúan en grupo, su comportamiento se manifiesta en una entidad con características de un organismo. Ningún individuo por sí solo dicta su comportamiento, pero juntos actúan como uno solo. Esto también es importante cuando se juzga a los individuos, puede que no sea el individuo el que siempre tenga la culpa, porque sus problemas pueden ser un síntoma de un grupo que funciona mal. En una nota más individual, creo que algo que beneficiaría a más personas es darse cuenta de que una persona se juzga a sí misma por quien cree que los demás la ven. Darse cuenta de esto le ayuda a trabajar para evitar activamente esta forma de pensar y empezar a centrarse en los aspectos de usted mismo que le importan, y no en lo que le importa a los demás.
Herbert Spencer fue autor inglés formado en Ciencias Sociales, se inspiró en la biología para formar su perspectiva y conceptos. Spencer ejerció influencia en el Funcionalismo estructural (junto a Comte). Spencer tenía la imagen de la sociedad como organismo, interesado en la interrelación entre las partes de la sociedad y las funciones que cada uno cumplía para los demás, y el sistema en su conjunto. Hablaba de la ley general de la evolución, de una “homogeneidad incoherente” a una “heterogeneidad coherente”. Charles Cooley hablaba sobre el “looking glass self”, el “yo espejo”. Cooley decía que la gente construye activamente la compresión de sí mismo imaginándose como otros le ven, a través de su comportamiento hacia nosotros; la anticipación de los juicios de los demás influye en cómo nos comportamos en situaciones particulares. Cooley se preocupó por las dimensiones intersubjetivas del sujeto, destacando la influencia mutua interactuante entre el individuo y el grupo, hablaba sobre la importancia del juicio del otro en la formación de sí mismo. Cooley elaboro el concepto de grupo primario y es el iniciador del “interaccionismo simbólico”. George H. Mead elaboro sobre el “el desarrollo del Self” (origen social del sí mismo); decía que la gente interactúa con nosotros a través de símbolos, imágenes, etc., que representan otra cosa, y vamos asumiendo los papeles que los demás ejercen con respecto a nosotros; primero los otros significativos y más tarde el de otro generalizado. Franz Boas propone el relativismo cultural que es la idea de que las creencias, los valores y las prácticas de una persona deben entenderse sobre la base de la propia cultura de esa persona, en lugar de ser juzgadas con el criterio de otra.
A medida que las sociedades se han ido haciendo más complejas, se han producido grandes cambios; las sociedades comenzaron a elevar categorías específicas de personas por encima de otras, dando a algunas partes de la población más riqueza, poder y prestigio. Con esto ha llegado la estratificación social, un sistema por el cual una sociedad clasifica las categorías de personas en una jerarquía. Se basa en cuatro principios importantes: la estratificación social es un rasgo de la sociedad, no simplemente un reflejo de las diferencias individuales; se transmite de generación en generación, aunque existe la posibilidad de movilidad social en algunos casos; la estratificación social es universal pero variable; y no sólo implica desigualdad sino también creencias. Un ejemplo de estratificación social sería el sistema de castas, que es una estratificación social basada en la adscripción o el nacimiento. Un ejemplo del sistema de castas que todavía se manifiesta hoy en día es la India, donde el sistema de castas sigue formando parte de la vida cotidiana. El sistema tradicional de la India identifica cuatro castas o varnas principales: Brahman, Kshatriya, Vaishya y Sudra. El hecho de formar parte de una casta limita su capacidad para casarse con personas de otras castas, e incluso puede afectar a sus oportunidades de trabajo. Aunque el sistema de castas sigue siendo muy relevante en la sociedad india, su importancia se reduce lentamente a medida que las generaciones más jóvenes empiezan a rechazarlo. Otro ejemplo de estratificación social más familiar para las sociedades occidentalizadas es el sistema de clases, que es un sistema basado tanto en el nacimiento como en los logros individuales. El sistema de clases que se ilustra hoy en día existe en gran parte de Europa occidental y en gran parte del continente americano (aunque no sólo está limitado a esa parte del mundo). No es infrecuente oír hablar de las denominadas clases ‘alta’, ‘media alta’, ‘media baja’ y ‘baja’; aunque las líneas exactas entre estas clases no están claras para la mayoría de las personas y muchas de ellas se desplazan entre clases a lo largo del tiempo. Estas construcciones se basan casi completamente en la riqueza materialista de una familia o persona y la gente es juzgada por su ‘éxito’ basado en su riqueza materialista.
La estratificación social ha llevado a lo largo de la historia a conflictos de clase. Es la tensión política y el antagonismo económico que existe en la sociedad como consecuencia de la competencia socioeconómica entre las clases sociales. Marx usó el término conflicto de clases (a veces lucha de clases) para referirse al conflicto entre clases enteras por la distribución de la riqueza y el poder de la sociedad. En los tiempos modernos, esto se manifiesta a menudo en protestas pacíficas de los grupos afectados, pero también de otros grupos que sienten empatía por ellos. No es infrecuente que éstas se vuelvan violentas, ya que es fácil que un pequeño subconjunto de los manifestantes rompa las manifestaciones pacíficas, lo que lleva a que la policía o los militares se vean involucrados. Esto motiva aún más a más manifestantes a volverse violentos. Un ejemplo reciente de esto puede verse en las protestas de Chile que comenzaron en octubre y aún continúan. Las razones detrás del conflicto se han ido gestando lentamente durante años, pero las protestas finalmente estallaron cuando El Panel de Expertos del Transporte Público decidió aumentar el precio de sus tarifas en un 4%. Esto provocó que los estudiantes de secundaria protestaran el 7 de octubre, animando a la gente a evadir el precio del billete en el Metro de Santiago y finalmente condujo a protestas a gran escala que luchaban contra las diversas injusticias que se habían producido en la clase trabajadora de Chile a lo largo de los años.
Una causa común para el conflicto de clases es la guerra y la modernización. Están entre las fuerzas más poderosas y penetrantes que producen el cambio social en todos los niveles de la vida social. La guerra da lugar a cambios de gran escala en la población y a una rápida aceleración de los cambios económicos. Por ejemplo, las zonas occidentales de los Estados Unidos y el Canadá experimentaron su rápido crecimiento debido a la movilización para la guerra durante la primera mitad del siglo XX. Se construyeron nuevas presas, nuevas plantas de energía eléctrica y nuevas fábricas para producir todo tipo de bienes. Muchas otras fuerzas sociales, especialmente la innovación tecnológica y el crecimiento o la movilidad de la población, también causan cambios sociales. Uno de los cambios sociales más significativos de las sociedades occidentales en los últimos treinta años ha sido la definición cambiante de los roles de la mujer. La entrada de la mujer en la fuerza de trabajo, acelerada por la necesidad de mano de obra durante la Segunda Guerra Mundial, es un indicador de este cambio social. Hoy en día, más del 70 por ciento de todas las mujeres casadas con hijos trabajan en oficinas, fábricas y otros lugares de trabajo.
Una parte importante de la sociedad, desde la historia, ha sido la familia. La familia es una institución social que se encuentra en todas las sociedades y que une a las personas en grupos cooperativos para cuidarse unos a otros, incluyendo a los niños. La familia tiene muchas funciones importantes en la sociedad. La primera es la socialización: los padres ayudan a los niños a integrarse bien y a contribuir a la sociedad. Les enseñan las normas culturales de esa sociedad y todo lo relacionado con la supervivencia en el mundo. La segunda es la regulación de la actividad sexual; limita la reproducción incontrolada de los humanos cuya descendencia es demasiado débil para sobrevivir por sí misma durante los primeros años de su vida. La tercera es la colocación social: las familias no son necesarias para que las personas produzcan, pero ayudan a mantener la organización social. Por último, las familias dan seguridad material y emocional: las familias ofrecen protección física, apoyo emocional y asistencia financiera. Estos hechos explican por qué en cada vida cultural de hoy en día, el concepto de familia se manifiesta de alguna manera.
Igual de frecuente en la sociedad humana es la religión. Emile Durkheim declaró que la religión implica ‘cosas que sobrepasan los límites de nuestro conocimiento’ (1915). La religión es una institución social que involucra creencias y prácticas basadas en el reconocimiento de lo sagrado. A modo de ejemplo, Durkheim identificó tres funciones principales de la religión que contribuyen al funcionamiento de la sociedad. La primera es establecer la cohesión social: la religión une a las personas a través de un simbolismo, valores y normas compartidos. La segunda es promover el control social: toda sociedad utiliza las ideas religiosas para promover la conformidad. La tercera es proporcionar significado y propósito: la creencia religiosa ofrece la reconfortante sensación de que nuestras breves vidas sirven a un propósito mayor. No es de extrañar, pues, que el grado de práctica religiosa de una persona varíe a lo largo de su vida, dependiendo de su situación actual y de las circunstancias de su vida.
Otro aspecto, que se ha vuelto más importante ahora que nunca antes en la historia, es el de la educación. La educación es la institución social a través de la cual la sociedad proporciona a sus miembros conocimientos importantes, incluidos los hechos básicos, las aptitudes laborales y las normas y valores culturales. A medida que los seres humanos dependen cada vez más de la tecnología, utilizando su definición de ‘conocimiento que se transmite de generación en generación’, pero también a medida que las normas sociales son muy apreciadas en las sociedades sofisticadas, la educación aporta contribuciones inestimables a la sociedad. En primer lugar, la socialización: a medida que las sociedades adquieren una tecnología más compleja, recurren a maestros capacitados para desarrollar y transmitir conocimientos más especializados que los adultos necesitarán para ocupar su lugar en la fuerza de trabajo. En segundo lugar está la innovación cultural: el profesorado de los colegios y universidades crea la cultura y la transmite a los estudiantes; la investigación en las ciencias, las humanidades y las bellas artes conduce al descubrimiento y a los cambios en nuestro modo de vida. La tercera es la integración social: la escolarización moldea una población diversa en una sociedad que comparte normas y valores. Finalmente, la educación funciona como una colocación social: las escuelas identifican el talento y combinan la instrucción con la habilidad. Otros aspectos que son de importancia en la sociedad moderna incluyen el cuidado de los niños para el creciente número de familias de uno o dos padres, reúne a las personas en edad de contraer matrimonio y las escuelas establecen redes que sirven como un valioso recurso de carrera a lo largo de la vida.
Debido a que somos seres sociales sofisticados con ambiciones y emociones complejas, las culturas que hemos creado y moldeado a lo largo de los milenios se han vuelto igual de complejas. En el tema de la educación y el estudio, a través de la sociología, somos capaces de empezar lentamente a entender esta complicada red de comportamiento humano, pero todavía hay mucho que no se entiende completamente.
Hasta ahora, la sociología ha ayudado a la gente a entender sus propias culturas, así como a entender a otros y ha llevado a una mejora en las condiciones de nuestra existencia. Sin duda, a medida que continuamos desarrollando nuestras ideas sobre los complejos comportamientos de nuestras sociedades, también podemos encontrar mejores formas de mejorar todas nuestras vidas.