La Trata De Personas Por Grupos Criminales Y Como Repercute En Los Migrantes

Los grupos criminales buscan como víctimas a personas vulnerables en cualquier contexto, ya sea, político, cultural o jurídico: los migrantes, los cuales se desplazan de un lugar a otro en busca de nuevas oportunidades económicas, escapar de la inseguridad, los cambios climáticos, entre otras. Con las recientes restricciones en las políticas de inmigración, las rutas migratorias se han vuelto más largas, caras y peligrosas. Al limitar las oportunidades de que la gente pueda emigrar de manera legal, estas restricciones han ayudado involuntariamente a los que practican el tráfico y la trata de seres humanos. 

La trata de personas y su repercusión en los migrantes se ha convertido en objetivo primordial dentro de la comunidad internacional debido a factores tales como, inseguridad fronteriza, crimen organizado y el impacto económico que este conlleva.

En el caso de flujos migratorios y trata de personas por zonas fronterizas, Argentina cuenta con una zona “caliente” en la denominada Triple Frontera (Argentina-Paraguay-Brasil). Esta región se caracteriza por el permanente recambio y circulación de personas, a tono con el importante movimiento administrativo, comercial y turístico de la zona.

Según datos de autoridades argentinas, de los casos investigados por trata de personas, el 69% están relacionados con fines de explotación sexual (73% mujeres) y el 31% corresponde a explotación laboral. Las víctimas en su mayoría son originarias de las provincias del norte del país (Noa y Nea) pero también de los países limítrofes (principalmente Brasil, Paraguay y Bolivia) y otros países latinoamericanos (República Dominicana y Colombia).

Sin embargo, se han generado tratados internacionales especializados, como el Convenio 143 de la OIT (Organización Internacional del trabajo) sobre Trabajadores Migrantes, y la Convención Internacional sobre la Protección de los Derechos de Todos los Trabajadores Migratorios y de sus Familiares de 1990. 

También, como fruto de los esfuerzos compartidos por los Estados e instituciones internacionales, entre 2009 y 2010 se implementó con fondos de la OIM (Organización Internacional para las Migraciones) un Programa para la Asistencia Integral a las Víctimas de Trata de Personas en la Triple Frontera, mediante la transferencia de recursos y el acompañamiento de monitorio. 

Como parte de las políticas implementadas por los países de la región Mercosur, del cual Argentina es parte, el gobierno argentino, a través del Ministerio de Seguridad, viene implementando la aplicación de una Guía de actuación regional para la detección temprana de situaciones de trata de personas en pasos fronterizos del Mercosur y Estados Asociados. 

Aportaron recursos y asistencia técnica, legal, médica y psicológica a víctimas identificadas, y brindó capacitación laboral a los efectos de mejorar sus posibilidades de reinserción laboral en sus lugares de origen.

Así mismo, en el último informe del Departamento de Estado de los Estados Unidos, a cargo el ex director de la CIA, Mike Pompeo, elevó a la República de Argentina al ‘nivel 1’ (máximo que se otorga) por ‘haber cumplido plenamente con los estándares mínimos para la eliminación de la trata de personas’ en el Estado. 

Actualmente, la República Argentina cuenta con las leyes: 26.842, en donde se establecen obligaciones de parte del Estado federal en generar políticas de asistencia a las víctimas de trata con cooperación de los Estados provinciales, ley de Trata mediante el Decreto, estableciendo el procedimiento que deben seguir las distintas áreas del Estado para la atención de las víctimas de trata rescatadas y la 26.364, para la prevención y el castigo de la trata de personas.

• Ante lo dicho anteriormente la postura de Argentina es la siguiente:
• Reforzar las medidas fronterizas estipuladas por el Protocolo para prevenir, reprimir y sancionar la trata de personas, especialmente mujeres y niños acordado por La Convención de las Naciones Unidas contra la Delincuencia Organizada Transnacional.
• Invitar a los países que se retiraron del Pacto Mundial para la Migración Segura, Ordenada y Regular a unirse nuevamente al mismo.