Lam Tsuen y su Importancia para el Año Nuevo Chino
Un árbol del deseo es un lugar ideal donde aquellos que creen en su poder y energía brindan un tributo. Estos se encuentran integrados en multitud de culturas a lo largo de todo el mundo. Las especies utilizadas para ellos también soy muy distintas, así como los tipos de ofrenda que se depositan a sus pies o en sus ramas. Estos árboles, fuente de espiritualidad y de profundo valor religioso, cargan con las esperanzas y deseos de todas las personas que acuden a ellos. Os hablaremos de los árboles de Lam Tsuen, en China, un paisaje único que disfrutar y fotografiar.
Lam Tsuen y la celebración del año nuevo
El valle de Lam Tsuen se encuentra situado en el norte de la zona continental de la capital del país. Esta localidad nace durante dinastía Sung, hace más de 700 años. Además, fue colonia británica y aún conserva tradiciones únicas y ritos antiguos propios de la región. Durante la celebración del Año Nuevo Chino en Hong Kong, son muchos los turistas que se acercan a esta localidad para celebrarlo. Durante esta fecha, Lam Tsuen trata de aparcar el estrés laboral y social, propios de la sociedad china actual, para reunirse y festejar una de las celebraciones más importantes del país.
Lam Tsuen ofrece un sinfín de actividades relacionadas con el Año Nuevo Chino, así como la oportunidad de probar uno de los platos más viejos y tradicionales de Hong Kong. Este plato llamado Poon Choi, que significa literalmente ‘festín en barreño’, está compuesto por pescado, verduras y otras especias, que lo convierten en un manjar. Sin embargo, una de las mayores atracciones de Lam Tsuen son los árboles de los deseos. Cada vez más populares no sólo entre la población china, son un punto icónico de la localidad donde se ofrecen ofrendas y se cuelgan deseos, además de colocarse incienso con el fin de atraer a la buena suerte.
Los árboles de los deseos de Lam Tsuen
Cerca de la capital de China, Hong Kong, en la localidad de Lam Tsuen, se encuentra el templo de Tin Hau. El recinto es un lugar de peregrinaje y muy valorado por los amantes de la arquitectura tradicional china. Sin embargo, son sus dos árboles de banyan los que atraen a miles de turistas durante la celebración del Año Nuevo Chino.
Estas higueras de Bengala, nombre común con el que se conoce a la especie, son las encargadas de portar con los deseos de todos aquellos que depositan en ellas su fe. Los deseos se escriben en un papel fuerte o tela, normalmente de color rojo o rosado, y se cuelga de la rama del árbol. Acto seguido se prende una varita de incienso que se coloca en el interior de una naranja. Esta pende del extremo del mensaje. De esta manera los participantes rezan para pedir un año próspero.
En la actualidad se ha introducido un árbol de fibra de vidrio para remplazar a uno de los banyan. Esta medida fue tomada tras un grave accidente donde una rama se desprendió rompiendo la cadera de un señor de 65 años. El árbol artificial tiene aproximadamente siete metros de altura y, aunque aún no acaba de convencer del todo a la población, sí cuenta con el apoyo del gobierno y de los amantes de la naturaleza.
Otros árboles de la suerte
En Escocia se encuentra un espino al que se le relaciona de forma tradicional con la fertilidad. El tronco y las ramas de este árbol se cubren de monedas para atraer a los deseos de las personas que se acercan a él. De hecho, en este mismo país podemos encontrar otros árboles de la suerte que utilizan trozos de tela y papeles donde se exponen los deseos, al igual que sucede con los árboles de Lam Tsuen.
De igual modo, en otros países orientales encontramos otros árboles de la suerte. Dentro de la cultura hindú, existe un árbol llamado Kalpavriksha que representa la vida eterna. Esta cualidad se le atribuye a su constante crecimiento, por lo que son muchos los que acuden a él en busca de deseos relacionados con la longevidad. Este árbol también es un baniano o higuera de Bengala, la misma especie que los árboles de la suerte de Lam Tsuen.