Adicciones Humanas, Cocaina, El Deporte y los Juegos

Introducción

Los que utilizan cocaína en pequeñas cantidades (100 mg o menos) generalmente se sienten eufóricos, energéticos, conversadores, y mentalmente más alerta, especialmente en relación con las sensaciones visuales, auditivas y del tacto, también puede hacer disminuir la necesidad de comer y dormir durante un periodo de tiempo. La intensidad de estos efectos varía en función de la vía de administración, la dosis administrada y la pureza del producto, que por lo menos en el 40% de los casos es impuro, encontrándose talco, maicena o azúcar incorporados a esta sustancia inicial. 

Los efectos que produce en el organismo son la contracción de los vasos sanguíneos, dilatación de las pupilas, aumento en la temperatura corporal, en el ritmo cardíaco y la presión arterial. Si se usan cantidades mayores a 100 mg los efectos son más intensos y tienden a llevar a un comportamiento más extravagante, errático y violento. Los consumidores pueden experimentar temblores, espasmos musculares, vértigo, paranoia y, con dosis consecutivas una reacción tóxica muy similar al envenenamiento por anfetamina.

Desarrollo

La cocaína es una droga extremadamente adictiva, por lo que la principal consecuencia a largo plazo de su consumo es la adicción, esta droga impide la reabsorción de la dopamina por las células nerviosas, la dopamina es una sustancia producida por el cerebro que forma parte de su sistema de gratificación, y está directa o indirectamente implicada en las propiedades adictivas de las principales drogas de abuso, ya que el cerebro aprende a asociar el consuma de cocaína con placer. Otra de las consecuencias es la tolerancia, después de un uso reiterado de esta droga, el consumidor no siente los efectos como la primera vez, por lo que recurre a aumentar la dosis para intensificar y prolongar la euforia; sin embargo hay otros casos en los que se puede desarrollar más sensibilidad a los efectos de esta, sin tener que haber aumentado la dosis.

La cocaína produce graves consecuencias psicológicas afectando al carácter de la persona, haciéndola cada vez más irritante, inquieta y paranoica, puede llegar a tal punto de perder el sentido de la realidad y sufrir alucinaciones auditivas.

Las complicaciones médicas por abuso de cocaína son mayoritariamente irregularidades en el ritmo cardíaco, ataques al corazón, problemas respiratorios, y efectos neurológicos incluyendo la apoplejía y convulsiones, entre otros. En el caso de mezclar cocaína y alcohol, el organismo los convierte en etileno de cocaína provocando un efecto más duradero y tóxico, que si se tomasen por separado.

Desde una perspectiva social y económica, podemos comprobar que hay una reciente proliferación del mercado digitalizado, así lo indicó el comisario europeo de Interior, Dimitris Avramópulos, en una rueda de prensa junto al director del Observatorio Europeo de las Drogas y las Toxicomanías (EMCDDA), Alexis Goosdeel, para presentar el Informe europeo de 2019 sobre drogas, ya que el acceso a este tipo de sustancias es más simple y cómodo.

Como principal consecuencia económica está el incremento del coste sanitario, teniendo en cuenta la inversión efectuada en tratamientos específicos para este colectivo y las muertes provocadas especialmente por enfermedades cardiovasculares que están directamente relacionadas con el consumo de esta sustancia.

Desde la perspectiva social el principal problema es el conflicto que se genera en las relaciones familiares y de amistad dado que la prioridad del cocainómano es consumir, de manera que pierde el interés por interactuar con los demás, adoptando conductas antisociales como mentir y manipular; en el ámbito laboral, surgen problemas, como consecuencia del consumo reiterado de cocaína implicando ello la incapacidad para desenvolver con normalidad la ejecución de las funciones encomendadas, ya que se produce un déficit de concentración y merma del interés por desempeñar correctamente el trabajo. El consumidor desarrolla una conducta apática, ya que sufre un desequilibrio en el sistema límbico, eso da lugar a que el cerebro solo responda frente cantidades de dopamina que solo se consiguen consumiendo. Son muchos los peligros que supone el consumo de cocaína, como los ya mencionados.

En el consumo de drogas podemos distinguir distintas fases, habiendo diversos factores que intervienen en cada una de ellas. Un factor fundamental desde la perspectiva psicológica es el reforzamiento, jugando un papel muy notable, en el inicio, mantenimiento e inclusive en el abandono del consumo (López Durán, A., Becoña Iglesias E. Papeles del Psicólogo, 2009). La cocaína funciona como reforzador positivo, es decir, el consumidor querrá tomarla por los efectos positivos que le produce, y no, para eliminar el síndrome de abstinencia (reforzamiento negativo).

Primera fase, predisposición o antecedentes del consumo, tipos de predisposición: la biológica, sociocultural y psicológica. Respecto a la predisposición biológica, la genética explica un pequeño porcentaje de los casos de adicción. Dentro del ámbito sociocultural, claro ejemplo sería el consumo de alcohol, ya que en nuestra sociedad está muy normalizado y hay una predisposición hacia el consumo del mismo; el consumo de la hoja de coca en los países andinos es natural (normalizado) puesto que tiene funciones tales como aliviar el mal de montaña o alturas y reducir la fatiga. Es un factor de riesgo, añadido a la normalización de la conducta, cuando una sociedad es expuesta a una sustancia que desconoce, la modifica y le da usos diferentes y muy dañinos, como es el caso de la coca que deriva en cocaína. En el ámbito psicológico influyen tres factores: el aprendizaje, la personalidad y la inteligencia.

Segunda fase, conocimiento de la sustancia, los factores más importantes son: el ambiente en el que se desarrolla el individuo, el aprendizaje, la socialización (familia, amigos, escuela y medios de comunicación) y las expectativas existentes hacia el consumo y hacia uno mismo, también conocida como autoeficacia percibida (Bandura A. 1997), es decir, la idea que tiene una persona sobre su capacidad.

Tercera fase, experimentación con la sustancia e inicio del consumo: factores determinantes son la disponibilidad, accesibilidad, precio de la sustancia, y percepción de riesgo sobre esta. Diversos estudios sobre los consumos en población general han demostrado que el aumento del consumo viene dado por una disminución del riesgo percibido, además del acceso y el bajo precio de la sustancia.

Otros factores como las creencias, valores, normas interiorizadas, actitudes, y la intención conductual, es decir, la presión de grupo, son considerados esenciales; estos factores a la vez están determinados por el proceso de socialización con la familia, medios de comunicación…

En último lugar el estado emocional, problemas psicopatológicos y la capacidad de afrontación adecuada, son factores que explican el inicio del consumo. Lo hasta ahora dicho se aplica tanto a la cocaína como cualquier droga.

He llegado a la conclusión de que son muchos los factores que interviene en el inicio del consumo de esta sustancia y que las personas que consumen drogas o tienen problemas psicológicos son más vulnerables.

¿Existen adicciones más allá de las drogas? ¿Cuáles conoces?

Explica al menos dos ejemplos

• Sí, existen más adicciones aparte de las drogas, y se clasifican de la siguiente manera:
• Adicciones de comportamiento o actividades, pueden ser las compras, nuevas tecnologías, trabajo, sexo, juego o el deporte, entre otros.
• Dependencias afectivas -también entrarían dentro del grupo de las adicciones-, podrían ser la dependencia emocional y la codependencia.
• La adicción al juego (ludopatía) se basa en el deseo incontrolado por jugar a juegos de azar y apuestas, implicando en la gran mayoría de las ocasiones una quiebra personal y económica del individuo (mentiras, robo, pérdida del trabajo, rupturas familiares…)
• La adicción al deporte (vigorexia) es aquella en la que el individuo presenta una preocupación de manera obsesiva por su masa corporal, realizando rutinas de ejercicio exageradas y consumiendo con exceso proteínas, carbohidratos e incluso esteroides.  

Conclusión

He llegado a la conclusión de que son muchos los factores que interviene en el inicio del consumo de esta sustancia y que las personas que consumen drogas o tienen problemas psicológicos son más vulnerables. El elemento clave que explica el mantenimiento del consumo de cocaína son las consecuencias que produce, sobre uno mismo, la familia o los amigos. Si las consecuencias son negativas, el consumo cesará; pero si a juicio del consumidor se obtiene algún “beneficio” seguirá repitiendo esta conducta, eso derivará en el abuso y la dependencia de la sustancia.