Laura Esquivel y El Lector de Bernhard Schlink: Análisis de las Novelas
Laura Esquivel y El lector, escrita por Bernhard Schlink porque considero que son dos obras que pueden responder muy bien las distintas interpretaciones de cómo un posible lector es capaz de percibir su contenido, teniendo en cuenta varios factores como se verán más adelante.
Está comprobado que cada persona percibe cada color de forma distinta, esto es porque bajo las mismas condiciones de luz, las personas ven o interpretan los colores en función de los tipos de conos que tienen en sus retinas; este fenómeno es muy comparable con dos lectores leyendo el mismo libro, pero interpretarlo y entender contextos completamente distintos, o incluso opuestos.
Hay varios factores que moldean la ideología y la perspectiva de las personas: el entorno, las tradiciones familiares, el género, el tiempo, la edad, la cultura y por ende el país al que perteneces. Estos factores se juntan y forman una serie de opiniones y pensamientos que son comúnmente aceptados por la sociedad a la que se pertenece en concreto, y es así como se forman opiniones como: ¿Qué es correcto y que no lo es? ¿cuándo se cruza la línea de lo ético y no ético? Todas estas son algunas de las ideologías que se forman dependiendo de la sociedad a la que perteneces y las cuales son muy criticadas e importantes hoy en día.
Esto se puede ver reflejado en la novela Como agua para chocolate que trata temas bastante revolucionarios y la época en la que se publicó en 1989 es significante para la mujer ya que el machismo aún predominaba y los derechos y la integridad de las mujeres no eran una gran prioridad aún. Los lectores de esta novela, en la época de su publicación probablemente tuvieron una primera impresión bastante negativa e impactante (sobre todo los [i]hombres) ya que presenta como protagonista la figura de una mujer, Tita, que defiende sus pensamientos y sus sentimientos por encima de todo y se opone a las reglas y tradiciones de su familia cuando no coinciden son sus ideas de lo que es correcto y justo, por lo tanto, muchos hombres y algunas mujeres de la época lo encontrarían inapropiado. Sin embargo, muchas mujeres de la época probablemente encontrarían la novela revolucionaria e inspiradora ya que defiende la integridad y el individualismo de las mujeres.
En cambio, si esta novela se leyera en la actualidad, no tendría un impacto tan grande en el mismo sentido ya que la mayoría de la sociedad ha evolucionado significantemente y los derechos de la mujer son protegidos, quizá lo que más impacto tendría para ambos géneros es la diversidad de técnicas usadas en esta obra: el realismo mágico, lo contrario al estereotipo de la novela rosa, como se presenta la imagen de la cocina y la mujer, una imagen y como la autora es capaz de llegar a conectar y emocionar a los lectores de maneras tan innovadoras; todos estos son métodos muy diferentes que casi nunca se ven combinados en una misma novela, por eso sería impactante en los lectores de la época contemporánea, pero en el buen sentido.
En El lector se tratan también temas bastante delicados que pueden reflejar varias interpretaciones, por ejemplo, el tema del Holocausto, la procesión de los nazis, los dilemas morales, la inocencia, el analfabetismo, la postguerra, la pedofilia y los valores éticos, como los más relevantes. La cultura del país del que se provenga, la religión e ideologías políticas de las que se consideran formar parte los lectores, moldearan su perspectiva sobre la novela. Así pues, el tema de la pedofilia puede ser muy impactante para muchos lectores, ya que no hay muchas novelas que traten el tema tan abiertamente, y en la mayoría de países (si no todos) está considerado un delito muy grave, en mi humilde opinión, Hannah se aprovechó de la inocencia de Michael y personalmente, lo interpreto como un delito de aprovechamiento de un menor de edad y un comportamiento que está fuera de lo ético, claro que otro lector que tenga una cultura diferente a la mía puede perfectamente interpretarlo como una historia de amor prohibida. (cita)
La forma de interpretar esta novela tiene mucho que ver también, con las ideologías políticas de los lectores, muchos de éstos de procedencia alemana seguramente interpretarían la obra como una muestra de justicia contra los nazis, ya que se procesa y condena a Hannah a cadena perpetua por sus delitos, y la mayoría de alemanes se avergüenzan de lo ocurrido durante la Segunda Guerra Mundial y quieren demostrar al mundo que el pasado no les representa, de hecho si en Alemania se realizara el saludo a Hitler o se mostraran señas de nacismo, sería arrestado. Sin embargo, la minoría nazi que todavía existe seguramente interpretaría la novela como una injusticia y un insulto al movimiento nazi, además tendrían una idea diferente de lo que fue la postguerra a la que tiene el autor.
Para finalizar, dicen que cada persona es un mundo, por eso es lógico pensar que jamás interpretaremos el mundo exactamente de la misma manera. Cuando leemos una novela, nuestra manera de poder entender y retener lo que estamos leyendo es haciéndolo nuestro, aplicando nuestra cultura, religión, tradiciones y a nuestra vida del día a día a dicho texto, creando como una especie de filtro con el que conseguimos una interpretación completamente subjetiva del texto; pero además las emociones que estemos experimentando particularmente en el momento o época de nuestra vida en la que estamos leyendo un libro lo cual nos lleva a interpretar las palabras del autor a nuestra manera. Metafóricamente hablando, creamos nuestra propia versión de ello, lo cual explica que dos lectores diferentes leen e interpretan el texto de forma distinta.
