Lengua de Señas Para las Personas Discapacitadas
Introducción
La lengua de señas es la lengua con la que las personas con discapacidad auditiva se comunican, por eso, las personas oyentes deben saber interpretarla para poder ser incluyentes con esta comunidad en la sociedad. El objetivo de este escrito es describir cómo está formada la lengua de señas y sus orígenes. Así cómo las dificultades de las personas sordas para interactuar con la sociedad, cómo se desarrollan de manera profesional, educativa, etc. Todo eso con la finalidad de mostrar cómo estas personas tienen oportunidades limitadas por su condición.
Desarrollo
Desde tiempos antiguos, se les consideraba a las personas con discapacidad auditiva como personas enfermas e incapaces de razonar, por lo que no se les tomaba en cuenta para tomar decisiones y en consiguiente, no se les daba la atención necesaria a sus necesidades de comunicación.
No fue hasta que un abad francés llamado Charles Michael de l’Épée, fundó la primera escuela pública para sordos en París, donde se utilizaba un alfabeto dactilológico y un lenguaje signado, de ahí se originó la lengua de señas francesa y posteriormente se generó la American Sign Language (ASL), la Lengua de Señas Mexicana (LSM) y la Lingua de Sinais Brasileira (LIBRAS). Salgado, Mojica y Aco, exponen como en el caso de México actualmente la Lengua de Señas Mexicana, es considerada como una de las lenguas nacionales que forman parte del patrimonio lingüístico con que cuenta la nación mexicana.
La Lengua de Señas Mexicana fue en sí creada por lo que fueron transmitiendo los egresados de la Escuela Nacional de Sordomudos en México, institución que fue importante para preservar esta lengua en toda la República. A la escuela llegaban las personas con discapacidad auditiva, quienes tenían sus propias señas para comunicarse, pero además aprendieron y estudiaron para enseñar después regresar a su ciudad natal y compartir su conocimiento. También la Lengua de Señas Francesa cumplió un papel importante en el desarrollo de la LSM, ya que esta se usó de base.
El estudio de la Lengua de Señas tardó décadas en formalizarse; se tomó como el primer formal de esta rama el libro (An Outline of English Structure) de Henry Lee Smith y George Trager, publicado en 1951 y después de eso, el estudio de la Lengua de Señas entró en auge en los 70’s, con Investigación sobre la gramática, fonética, morfología y sintáctica.
A partir de este suceso, la investigación del tema se fue globalizando, tomando como base estudios anteriores y así, progresando en la educación a las personas con discapacidad auditiva alrededor del mundo, además, encontrando la relación que tienen este tipo de lenguas, con las lenguas orales. Teniendo en cuenta lo descrito, la Lengua de Señas es aún muy nueva en comparación con las lenguas orales y aún falta por descubrir; lo importante es que se le está prestando más atención y que también está en constante desarrollo.
Hoy en día, se le brinda más atención a la comunidad sorda debido al trabajo realizado por organizaciones de sordos que luchan por sus derechos, como lo son la educación obligatoria, gratuita y bilingüe en la LSM y en español. Las personas con discapacidad auditiva también tienen derecho a la interpretación y la colocación de subtítulos en la televisión que brinde algún tipo de educación, así como noticieros e informes nacionales. Además, con base al artículo 7 de la Ley General de las Personas con Discapacidad:
La Secretaría de Salud promoverá el derecho de las personas con discapacidad a gozar del más alto nivel posible de salud, rehabilitación y habilitación sin discriminación por motivos de discapacidad, mediante programas y servicios que serán diseñados y proporcionados, considerando criterios de calidad, especialización, género, gratuidad o precio asequible.
Esto, en la búsqueda de igualdad de oportunidades de trabajo, estudio, salud y en el respeto hacia su lengua, que es la LSM.
Conclusión
Gracias a esta notoriedad en la LSM, se han creado en los últimos años, por autores sordos, diccionarios e historias ilustradas con el fin de enseñar esta lengua; así como trabajos de personas oyentes con contribuciones en alguna medida de personas sordas. Esto ha sido de ayuda para personas tanto sordas como oyentes que quieren aprender la LSM.
En resumen, se notó que el estudio de la Lengua de Señas no es nuevo, pero que, por más que ya se le esté brindando su debido estudio, atención e importancia, aún faltan cosas por descubrir e implementar. La sociedad aún está muy atrás en este tema, no hay mucha inclusión hacia la comunidad sorda, por lo que se debe trabajar en mejorar y en empezar o seguir concientizando y aprendiendo esta lengua para estar mejor como sociedad.