Origen del Manga: El Arte Japonés
El origen del manga
En los últimos años, la cultura del manga en Japón ha empezado a ser tan importante como lo fue en su día el lanzamiento de los cómics americanos. En la actualidad, ambos comparten sección en librerías especializadas, grandes cadenas comerciales y estanterías de millones de hogares. Son cada vez más los que se suman a la lectura de estos cómics llegados de Japón, así como que los que se ven influenciados por su peculiar estilo. En este breve texto, quiero acercaros un poco más a esta lectura destinada a todo tipo de público.
En su idioma original, la palabra manga hace referencia a cuadros que combinan texto e imágenes. La acuñación de esta palabra se le atribuye al famoso pintor japonés Katsushika Hokusai. Este pintor, famoso por sus grabados, en especial “La Gran Ola de Kanagawa”, le atribuyó a la palabra manga el significado de dibujos irresponsables, debido al público objetivo del inicio de estas publicaciones.
Sin embargo, sería tras la Segunda Guerra Mundial, cuando el manga tomara forma definitivamente. La evolución e influencia del periodismo y el arte proveniente de Europa y América impactaron en los autores clásicos, que empezaron a interesarse por relatos y dibujos más fantasiosos. A diferencia de los cómics occidentales, el manga está creado solo en blanco y negro. Los dibujos se llenan de multitud de recursos visuales como son líneas cinéticas y efectos sonoros. Los mangakas, nombre que toman los artistas que se dedican a crear estas obras del cómic japonés, tratan de hacer énfasis en la narración y, sobre todo, en el diseño de los personajes.
Entre los principales contribuyentes a la expansión del manga destaca Osamu Tezuka. Reconocido como unos de los padres del manga moderno, es el creador de obras tan conocidas como Astroboy y La Princesa Caballero. El autor reconoció estar influenciado por los trabajos de Walt Disney, lo que provocó que la mayoría de los protagonistas del manga tengan los ojos grandes y brillantes. Con los años, la adaptación del manga a la gran pantalla se convirtió en lo que se conoce como anime. Grandes clásicos como Heidi, Candy Candy o Mazinger Z fueron aclamados por el público occidental, construyendo las bases de la influencia del manga fuera de Japón.
Akihabara, la cuna del manga en Japón
En Tokio se encuentra el barrio de Akihabara, conocido popularmente como Akiba. Con el paso de los años, este barrio, antes famoso por ser el centro de los amantes de la electrónica, ha pasado a albergar el mayor número de tiendas y servicios relacionados con la cultura del manga. De esta forma, aquí podremos encontrar desde tiendas de electrónica con cámaras y ordenadores hasta tiendas especializadas de manga, videojuegos y con todo tipo de artículos relacionados, como disfraces y figuras. Algunos de estos comercios pertenecen a la famosa cadena Mandarake, dedicada en exclusiva al manga y al anime.
En el barrio de Akihabara también podremos encontrar el Tokyo Anime Center, que cuenta con multitud de exposiciones relacionadas con el mundo del manga y el anime y que, además, ofrece una tienda llena de merchandising relacionado. Además de por sus tiendas, Akihabara es también conocido por los populares maid cafes y sus manga kissaten, donde se puede tomar café y dulces mientras se lee un manga. Cuenta también con grandes centros comerciales con secciones dedicadas al manga y restaurantes temáticos de conocidas series de anime.
La cultura del manga en la actualidad
A pesar de que en Japón y en otras culturas la imagen del manga no se haya desligado del todo de connotaciones negativas, sí empieza a verse como mejores ojos. Se debe evitar relacionar obligatoriamente la palabra manga con contenido adult. Hay manga para todo tipo de públicos. Un claro ejemplo son cómics y series de televisión tan conocidas como lo fue Marco y películas como Mi vecino Totoro.
Gracias a la aceptación del público, el manga ha pasado a ser una imagen referencial para los japoneses a escala mundial. De hecho, el país cuenta con embajadores y mascotas oficiales originarias del mundo del manga, como son los Pokémon o el simpático Doraemon. El estilo del manga ha empezado a influir en grandes sagas de videojuegos y cómics de todo el mundo. Tanto es así, que se han acuñado términos como manhwa y amerimanga, ambos referidos al manga de origen coreano y al híbrido entre el estilo de los cómics clásicos americanos con toques del estilo manga.