Patrones Migratorios De La Ballena Boreal A Causa Del Cambio Climático
Existen diversos tipos de clima en nuestro planeta, desde los más áridos hasta los más húmedos, los más calientes hasta los más fríos, y en cada uno de ellos existe una diversidad diferente de organismos, formando así diferentes ecosistemas. Cada organismo está adaptado a las condiciones en las que vive, ya sea refiriéndonos a la temperatura, a la humedad o a la cantidad de alimento disponible, e incluso algunas especies tienen que migrar de su hábitat para poder conseguir lo que requieren, como el alimento o lograr reproducirse.
A lo largo de los años nuestro planeta Tierra ha sufrido por una gran cantidad de cambios, y el más observado estos últimos años es el cambio climático, generado por el calentamiento global. Este cambio en la temperatura del planeta ha ocasionado alteraciones en los ecosistemas, y el más notorio ha sido el descongelamiento del hielo en los polos, dejando poco a poco sin hábitat a las poblaciones de estos ecosistemas. Uno de los integrantes de este tipo de ecosistemas es la ballena boreal, habitante del ártico, este organismo tan longevo ha logrado sobrevivir a la caza indiscriminada de su especie y a cambios en temperatura que ha sufrido el planeta Tierra, pero al vivir toda su vida en lugares congelados ¿Podrá adaptarse al cambio de la temperatura en el océano y a la falta del hielo ártico.
La ballena boreal, o también conocida como ballena de Groenlandia (Balaena mysticetus) es de los pocos cetáceos que viven toda su vida en aguas del océano ártico. Estos animales han sufrido cambios en su fisiología para poder adaptarse a las condiciones de su hábitat, como lo son las bajas temperaturas y la cantidad de hielo ártico que las rodea, estos nuevos cambios fisiológicos y el hábitat en el que viven hacen a esta ballena inconfundible del resto de las demás. Algunas de sus características fisiológicas además de la falta de aleta dorsal son también la falta de aletas pectorales y su capacidad de almacenar grandes cantidades de grasa, acumulando de 15 a 20 toneladas de esta en su organismo, de igual manera, son organismos extremadamente fuertes, ya que necesitan tener la capacidad de romper el hielo marino que en ocasiones los cubren. Estas adaptaciones le han servido a esta especie para poder desplazarse entre las capas de hielo y de la misma manera para poder conservar su calor corporal.
Como muchos integrantes principalmente del reino animal, las ballenas boreales migran de ciertos lugares a otros, generalmente estas migraciones se realizan para ir en busca de comida o para reproducirse, pero en este caso se suma una variable indispensable para la ballena boreal; la temperatura del océano. Al ser de los pocos organismos que pasan toda su vida en el ártico, están acostumbrados a nadar en aguas de temperaturas muy bajas, por lo que se ha notado que su desplazamiento por el océano es hacia lugares donde la temperatura del agua se mantiene baja, esto dependiendo del mes o de la estación del año. En verano el día tiene una duración de 24 horas y la temperatura oscila los 0°C, mientras que en el invierno la temperatura desciende hasta los -50°c y la noche es la que perdura.
Se han registrado algunas poblaciones de ballena boreal, las cuales se distribuyen en el estrecho de Davis, Estrecho de Hudson, la Bahía de Disko, Bahía de Baffin y en aguas territoriales canadienses y se relaciona el desplazamiento migratorio de estas ballenas con el cambio de las estaciones y relacionado a esto con el cambio de la temperatura en el mar.
Generalmente B. mysticetus en invierno permanece en el Estrecho de Hudson. Finalizando el invierno la ballena boreal se dirige a la bahía de Disko, en busca de alimento, pero dado que la Corriente de Groenlandia Occidental lleva cálidas aguas del Atlántico Norte a la bahía de Disko en la primavera, y que las masas de agua en la plataforma del oeste de Groenlandia aumentan de temperatura desde abril, las ballenas de Groenlandia adaptadas a las bajas temperaturas evitan el aumento de la temperatura de primavera en la Bahía de Disko. Las ballenas boreales están acostumbradas a una temperatura de la superficie del mar en un rango de entre -0.5 a -2 °C. Curiosamente en esta estación es cuando las ballenas buscan reproducirse y dar a luz a sus crías (Ferguson, 2010)
En el verano las ballenas boreales se desplazan a la Bahía de Baffin, donde el agua permanece en -1°C. En esta estación del año el día dura 24 horas, por lo que hay un florecimiento de algas y una mayor cantidad de copépodos, crustáceos de los cuales se alimentan las ballenas boreales, así que esta estación del año es la ideal para que las ballenas puedan alimentarse de la mayor cantidad de alimento posible, ya que llegando de nuevo el invierno, la comida comienza a escasear por la falta de radiación solar. Los puntos rojos marcan la posición de las ballenas rastreadas y los colores de azul a rojo marcan la temperatura registrada en dichas áreas del mapa.
Ahora bien, la cantidad de hielo marino también es una variable importante en la migración de la ballena boreal. En el invierno buscan zonas en donde la cobertura de hielo es relativamente poca y el hielo es delgado, esto para no quedar atrapados en el hielo marino ya que todo el invierno permanecen en un mismo sitio. Por el contrario, en el verano buscan zonas en donde hay una mayor cantidad de hielo y este tiene mayor grosor en sus capas, esto para protegerse de los ataques de las orcas (Orcinus orca) y para encontrar una mayor fluctuación de alimento.
Como es sabido, cada año disminuye la cantidad de hielo que existe en los polos, “se ha percibido una disminución del 3 al 4% por década en los últimos 29 años” y esto claramente afecta a todo el planeta, ya que se aceleraría el proceso de calentamiento evitando la circulación de vientos más fríos. Para habitantes tanto del Ártico como la Antártida se disminuirá el área de arrastre y en caso de la ballena se limitará su fuente de protección para mantenerse a salvo de sus depredadores.
La disminución del hielo ártico tiene sus pros y contras, aunque sea difícil de creer; por el lado bueno está el hecho de que al derretirse cierta cantidad de hielo marino se podrán abrir nuevas rutas de exploración para la ballena boreal y para otros organismos, de esta manera podrán colonizar otros sitios, aumentar su tasa de reproducción y que incremente la cantidad de ballenas boreales, ya que cabe recordar que en los años de 1790 hasta 1935 aproximadamente, estás ballenas fueron cazadas hasta llegar casi a su extinción, esto para obtener aceites, jabón y lo necesario para la industria textil.
Por el contrario, al derretirse el hielo marino, de igual manera se abrirían nuevas rutas de exploración para barcos y pescadores, poniendo en peligro y posible estrés tanto a las ballenas boreales como a los demás organismos habitantes del Ártico. Se sabe de igual manera que debajo del hielo del ártico se encuentran grandes fosas de petróleo, el cual es muy probable que sea explotado al derretirse el hielo, esto puede causar contaminación en el océano ártico y la perdida de organismos, los cuales pueden ser el inicio de las cadenas alimenticias y con esto se crearía un descontrol y desbalance en la alimentación de cientos de organismos. Por último, al derretirse el hielo, la radiación solar impactaría directamente en el océano, aumentando la temperatura del mismo, las ballenas boreales, al estar acostumbradas a temperaturas bajas, podrían entrar en un estrés térmico.
Las ballenas boreales (Balaena mysticetus) rigen su patrón migratorio de acuerdo a la temperatura del océano, buscando siempre temperaturas bajas de entre -0.5 a -2°C, esto porque toda su vida la viven en agua del océano ártico, aparte de guiarse por la temperatura, se guían por la cantidad de hielo y el grosor del mismo, dependiendo las estaciones para de esta manera favorecer a la cantidad de alimento que encuentren y a la disponibilidad del mismo, a su necesidad de reproducción y su protección de los ataques de otros organismos. En un futuro no se sabe si las ballenas boreales podrán sobrevivir a los cambios en la temperatura del océano. Se realizó una investigación en la cual se habla de la sobrevivencia de las ballenas boreales al cambio climático del pleistoceno, y como las ballenas lograron encontrar nuevas rutas hacia el norte de ártico. Es muy probable que logren sobrevivir nuevamente, ya que con la perdida de hielo marino se volverán a abrir nuevas rutas, aunque el problema será el posible impacto del estrés en el que se encuentren estas ballenas al cambio de temperatura en le superficie del océano, y a las nuevas posibles rutas de exploración humana.
Bibliografía
- Chambault, P., Albertsen, C, M., Patterson, T, A., Hansen, R, G., Tervo, O., Laidre, K, L., Heide-Jorgensen, M, P. (2018) “Sea Surface temperature predicts the movements of an Arctic cetacean: the bowhead whale” Scientific reports 8:9658. Pág. 1-12
- Máxima Uriarte, J. (2019) “Océano Ártico” Caracteristicas.co. http//www.carcteristicas.co/océano-ártico/. Consultado: 01-dic-2019
- Ferguson, S, H., Dueck, L., Loseto, L, L., Luque, S, P. (2010) “Bowhead whale Balaena mysticetus seasonal selection of sea ice” Marine ecology progress series. Vol. 411 Pág. 285-297.
- Foote, A, D., Kaschner, K., Gilbert, M, T, P., Schultze, S, E., Garilao, C., Ho, S, Y.W., Post, K., Higham, T, F.G., Stokowska, C., Van der Es, H., Embling, C, B., Gregersen, K., Johansson, F., Willerslev, E. (2013) “Ancient DNA reveals that bowhead whale lineages survived late Pleistocene climate change and hábitat shifts” Nature comunications 4:1677 pág. 1-7.
