Perros de Mediación en Conflictos sociales y Familiares
Cuando adquieres un perro, en especial los de razas que se caracterizan por su carácter violento e imprevisible, es importante entrenarlos para tener una convivencia más segura y tranquila. Están los perros mediadores y los perros entrenados, si bien hay similitud entre ellos, la diferencia está en que un perro de mediación tienen un gran concepto de grupo social, muy pocas veces inician conflictos pero si intervienen para solucionarlos. Son animales que tienen un control sobre sus actos. Los perros entrenados necesitan ser educados para interactuar con el entorno.
Perros de mediación en conflictos sociales y familiares
Los perros son considerados como alguien más de la familia, esto sucede en muchos hogares, por eso cumplen un rol muy importante. Lo que implica que se consideren el refugio de alto contenido emocional y psicológico para muchas personas.
Está comprobado que este acercamiento emocional tiene sus beneficios en las personas con problemas psicológicos o físicos. Muchas terapias se basan en el desempeño favorable de algunos canes para el avance en la terapia y a los datos importantes que nos proporciona sobre su dueño. Los terapeutas usan la terapia asistida por animales para tratar a pacientes con problemas como discapacidades físicas, Alzheimer, autismo, trastornos de ansiedad y depresión entre otras.
Los perros de mediación no solo significan una gran compañía y ayuda para las personas con problemas de movilidad, sino también su actuar puede reflejar el estado de ánimo de sus dueños. También son de gran ayuda para las terapias familiares o de pareja, porque muchas veces ayudan a identificar el conflicto, al poder resaltar las relaciones emocionales entre los distintos integrantes de la familia.
Perros mediadores: características
Una de las características más destacadas de estos perros es que como su nombre lo indica “mediadores”, porque tienen un gran entendimiento de lo que es un grupo social y rara vez ocasionarán conflictos, sino que intervendrán pacíficamente para tratar de resolverlos.
Son animales que saben controlarse, incluso en situaciones difíciles. Intervienen para proteger ya sea a un miembro de la familia o a otro perro, pero tratando de resolverlo sin dañar a nadie. Cuando están frente a un conflicto actúan automáticamente, sin esperar la orden de nadie.
No tienen mucho en cuenta el trato que les brindan las personas, incluso si reciben un mal trato en algún miembro de su grupo social, en el momento que necesiten su ayuda, igualmente se las brindará.