Pobreza Y Exclusión En Tiempos De Crisis
El objetivo de este trabajo es presentar un pequeño marco teórico donde se pueda comprender los términos de pobreza y de exclusión social, y cuál es su importancia dentro de la sociedad. Además, voy a presentar algunas de las estrategias que se impulsan para acabar con esta situación que afecta, aunque ha disminuido, todavía afecta a un gran número de españoles. Como la población afectada es muy diversa y abarca todas las edades y todo tipo de situaciones familiares me voy a centrar en la etapa de la infancia. He escogido esta etapa debido a mi titulación, magisterio infantil, en mi caso, aunque ya conocía estos dos términos no había profundizado en ellos y tras verlos brevemente en una asignatura del máster me llamaron la atención y quise conocer un poco más a cerca de ellos ya que como maestra considero que es importante también conocer la realidad fuera del aula y ver que situaciones se dan o se pueden dar en nuestra sociedad.
Debido a factores como la crisis económica que ha afectado en nuestro país han ido apareciendo nuevas problemáticas y situaciones de riesgo en toda la población, todo esto nos afecta en cualquier ámbito ya sea laboral, escolar, familiar…etc. Esta situación ha provocado que cada vez se repitan más estos dos términos: Pobreza y exclusión social.
Para poder entender de qué manera afecta la pobreza y la exclusión social a la infancia hay que conocer cuáles son los significados de estos términos. Si bien es cierto que hay muchos autores y muchas definiciones distintas para describirlos. Muchas veces de forma inconsciente relacionamos la pobreza con la exclusión social pero lo cierto es que, aunque ambos términos a veces vayan de la mano no tienen por qué estar relacionados ya que una persona que esté en riesgo de exclusión social no tiene porqué ser pobre y viceversa.
En cuanto a los datos es muy impactante conocer que, aunque en España directamente no podamos apreciar la situación de pobreza y exclusión social como en otros países, si echamos un vistazo a los datos, España ocupa el quinto puesto con mayor tasa de riesgo de pobreza, teniendo solamente a cuatro países delante como son: Latonia, Lituania, Bulgaria y Rumania.
No hay un perfil fijo de persona a la que pueda afectar o afecte la pobreza, cualquier persona en algún momento de su vida puede verse en esta situación. Los perfiles de la pobreza en España varían según la edad, el sexo, el tipo de hogar o la nacionalidad que tengan.
Si nos centramos solamente en el perfil de la infancia los indicadores de pobreza suben hasta ocupar España el tercer puesto en la Unión Europea. Lo cual nos da a entender que el mayor número de personas afectadas por la pobreza en estas edades suben notablemente.
Por otro lado, según el Instituto Nacional de Estadística (INE) un 26.2% de la población menor de 16 años en el 2018 se encontraba en riesgo de pobreza, cifra que se aumenta hasta el 28.3% si hablamos de la población de entre 16 a 29 años, aunque estas cifras van descendiendo conforme vamos avanzando en la edad y desciende a un 15.6% si hablamos de personas mayores de 65 años. Estos datos resultan bastante alarmantes ya que son cifras bastante elevadas si hablamos tanto de niños como de adolescentes, y podemos darnos cuenta de cómo va bajando el riesgo de pobreza cuando las personas son más mayores.
Todo esto lo podemos resumir en una frase, según el indicador Arope ( Risk Poverty and Exclusion), el cual se utilizada para medir la pobreza y la exclusión social, “casi 1 de cada 3 niños menores de 16 años en el año 2018 se encontraban en situación de pobreza y /o exclusión social”
En cuanto a la medición de la pobreza se puede medir de dos maneras: si nos referimos a los ingresos económicos que una persona tiene hablaríamos de dimensión monetaria como su propio nombre indica, en cambio sí nos referimos a los bienes que posee una persona hablamos de dimensión material. Puede darse casos de que una persona sea pobre monetariamente hablando, pero no lo sea en la dimensión material, y viceversa.
Si nos centramos en la dimensión monetaria nos encontramos con pobreza absoluta y pobreza relativa.
Según Pérez Yruela, Aguiar y Serrano (citado en Pérez Yruela, Rodríguez Cabrero y Trujillo Carmona 2004) la pobreza relativa viene dado por las desigualdades que hay en una sociedad teniendo en cuenta los recursos que la persona tiene y considerando como pobres a las personas que reciben menos que otros. En cambio, la pobreza absoluta es muy distinta ya que es cuando una persona no tiene los recursos necesarios para poder satisfacer una serie de necesidades básicas. Por lo tanto, si hablamos de pobreza absoluta hablamos de que la persona se encuentra en una situación en la que no alcanza unos estándares que se consideran mínimos para poder disfrutar de una vida de calidad en cuanto a la vivienda, la educación, la sanidad y otros muchos factores.
Sin embargo, el concepto de exclusión social hace referencia a una situación muy diferente que “sobrepasa en gran medida al concepto de pobreza”
El término de Exclusión social nace con una concepción diferente a la que tenemos ahora ya que estaba más ligada al ámbito laboral, por aquel entonces una persona pobre era aquella que no tenía trabajo. A partir de ahí ya se van desarrollando diversas políticas y/o estrategias para intentar ayudar a esas personas, con el tiempo este término va a ir evolucionando.
