Problemas Del Suicidio En La Epoca Actual

Introducción

En el siguiente ensayo voy a redactar sobre los problemas del suicidio que en esta época se sigue dando desgraciadamente tanto en adolescentes como adultos, su causa de por que esta pasando esto tanto como la misma influenza que lo provoca, ejemplos del mismo tema para poder entender y comparaciones de diversas religiones que tienen sus propias definiciones del suicidio y como las representan.

Este ensayo fue hecho con la muerte de mucha neuronas, con sangre y sudor además de el máximo esfuerzo de interpretar un lenguaje formal y cientifico. 

Desarrollo

Los autores humanitarios avanzados que escriben sobre el problema del suicidio a menudo citan a Camus: la pregunta principal de la filosofía es si vale la pena vivir. Sin embargo, personalmente frente a mí, esta pregunta fue la siguiente: ¿cuál es el significado de la vida que no sería destruida por la muerte? En otras palabras, ¿por qué deberíamos sufrir cuando la vida deja de ser fácil y agradable? ¿Y puede ser agradable para una persona dotada de imaginación, recordándole constantemente cómo terminará?

No es la naturaleza humana experimentar un sentido de rechazo consciente de la existencia, incluso si es lo más miserable. Una persona se inclina a justificar todas las desgracias y situaciones disfuncionales por experiencias desagradables, rechazos o temas sobre religión siendo que eso es lo que más les afecta en su sentido emocional.

La vida se pudiera comparar con un boleto de cine. Al recibir este boleto, una persona sabe a qué cine irá, un nuevo cine o un antiguo cine de la ciudad. En qué fila se pondrá el lugar, qué tan cómoda será la silla, ya sea una comedia, una tragedia o un thriller.

Y de repente llega un momento de comprensión de que todo está mal: se puso demasiado cerca de la pantalla, apretaron el sillón, y el vecino de al lado mastica palomitas terribles sin parar que se escucha muy desagradable a tu lado, y la película, francamente, resultó ser una trama absolutamente interesante o inquietante. El hombre decide suicidarse, como si le devolviera su Boleto de Vida a Dios.

Todo sería perfecto: obtuve vida, no me gustó, lo devolví. Y aquí llega el giro de la conciencia tan notablemente cultivada por la sociedad en las personas, un concepto completamente abstracto, creado artificialmente por la sociedad en que se vive y alimentado suavemente desde la infancia. ¿Cómo es que sus padres y la sociedad lo criaron, trataron de dejar al menos alguna contribución, lo criaron, y usted, algas unicelulares sin espinas, lo tomó? Y de repente interrumpió estos procesos, destruyo todas las labores y todo su futuro.

La educación religiosa trae sus notas histéricas: no, el peor pecado ante Dios es el suicidio. La escritura describe completamente el cálculo, una persona dibuja estas imágenes en su mente, se estremece, trata de creer que él, ‘creado a imagen y semejanza del Señor’, no es tan inútil.

En las religiones anti-suicidas, como el judaísmo, el cristianismo y el islam, el suicidio no es solo un rechazo de la vida terrenal de Dios, sino también un rechazo de la cruz y la resurrección de Cristo. Como resultado de esto, de acuerdo con las reglas de la iglesia, todos los que se han impuesto son privados del servicio de entierro y el entierro cristiano. El Nuevo Testamento describe solo un caso de suicidio, más tarde llamado ‘pecado judaico’.

Según los cánones, el suicidio no es en modo alguno una superación del miedo a la muerte, sino solo sumisión a él. Los católicos que se privan de la vida son salvados incluso después de la muerte. Comenzando con Tomás de Aquino, la iglesia cristiana se compromete a afirmar que el sexto mandamiento, ‘No matarás’, también se refiere al suicidio.

El Islam niega el suicidio bajo ninguna circunstancia, y el judaísmo lo justifica solo en el caso de una enfermedad incurable. Aunque en el Antiguo Testamento, las historias de los antiguos judíos, cualquier medio de privarse de la vida nunca se consideró un pecado particularmente terrible.

Otra cosa es que las denominaciones que no consideran la muerte en sus propias manos un mal absoluto, como el sintoísmo, el budismo, el hinduismo, etc. Aquí el suicidio es la forma habitual de salir de una situación difícil.

Los científicos han calculado el porcentaje de suicidios en función de pertenecer a una religión en particular. Por lo tanto, los cristianos tienen el porcentaje más bajo del corredor de la muerte, y en Japón y China, incluso en los años 90 del siglo pasado, tenían las tasas mundiales más altas.

Pero hay quienes no temen ni la conciencia ni el nivel del pecado. Aquellos que intentan repetidamente, cada vez de manera más reflexiva y sofisticada, abandonar este ‘cine’. Solo un pequeño porcentaje de suicidios, que no llevan sus acciones a su conclusión lógica, abandonan estos intentos, generalmente el intento se repite en los próximos 6 meses, y a menudo se corona con éxito.

Y aquí se está gestando un pensamiento diferente, ¿y qué pasa si solo los débiles de espíritu no pueden salir del ‘cine’ mientras continúan viendo la película odiada hasta los créditos? ¿Y solo aquellos que pudieron salir de la grave crisis del alma, que encontraron la fuerza para cambiar el ‘cine’ a otro, con una trama más agradable, o al menos elegir un lugar más decente, son fuertes en espíritu?

Las personas que están en este bucle de tristeza y de no poder salir de el “cine” deberían saber sobre su dignidad que tienen, que deben de valorar y apreciar ante las demás personas, pero como consecuencia de una visión ciega por los sentimientos se les hace imposible darse cuenta, y aquí es donde entran las amistades y los familiares.

No es el último factor en la actitud de las personas hacia el suicidio la información al respecto. Más bien, su ausencia casi completa. Las personas, independientemente de su edad, estado social y las razones que los llevaron a tal acto, tratan de elegir la muerte rápidamente y sin dolor. Las estadísticas médicas sugieren lo contrario.

De las 83 formas de separarse de la vida, la mayoría elige el método de ahorcamiento debido a que es una de las más populares; la segunda más popular es el envenenamiento con drogas a causa de la fácil accesibilidad de los mismos y el potente daño que puede hacer una sobredosis. Ambos métodos están lejos de ser absolutos. En el primer caso, el tormento dura hasta 4 horas. En el segundo, es reflexionar sobre su decisión si hacerlo o no, las consecuencias, etc. aunque en muchas ocasiones la importancia es nula y solo lo hacen como un método de escape de su sufrimiento.

El cuerpo humano es generalmente una cosa extraña y capaz de luchar por la vida, incluso sin el consentimiento consciente de su dueño por que el cuerpo humano está hecho y adaptado para la supervivencia.

Después de investigar sobre experiencias de empleados de instituciones especializadas, comprenden esa renuencia a morir. Especialmente después de escuchar sobre las consecuencias irreversibles en los cuerpos de los ‘terroristas suicidas’. Además, uno debe tener en cuenta no solo las consecuencias orgánicas y mentales, sino también los aspectos sociales de este acto. Durante el resto de su vida, la mayoría de las veces con una discapacidad, habrá una entrada en la tarjeta médica, la llamada ‘etiqueta social’. Esto agregará problemas a las personas que lo intentaron. Y desafortunadamente, no habrá nadie a quien culpar, excepto a uno mismo. Es extremadamente difícil quitarle la vida a una persona, incluido él mismo.

Y sobrevivir al mismo tiempo, sin dañar el cuerpo de ninguna manera, es imposible por su propia causa. En su mayoría de porcentaje de los intentos de suicidio, cualquier intento de suicidio termina en serios problemas para la persona: trauma severo en el cuerpo tanto mental como físicamente y discapacidad.

Las mismas consecuencias están presentes cuando se simula el suicidio, un intento solo de ‘asustar’ a otros, para hacerles sentir la importancia del problema o simplemente llamar la atención de las personas. La imitación no garantiza la salvación de una persona que se está muriendo por dentro, es simplemente poco realista prevenir todos los factores: unos minutos adicionales en un bucle o la presencia de otra lesión conducen a tormentos, consecuencias irreversibles y muerte.

Es incomprensible y sin sentido observar cómo, en principio de todo, las personas sanas buscan una forma confiable, probada y también indolora de suicidarse por que en cierta parte de ellos quiere hacerlo…pero tal vez una muy pequeña minoría de su ser, no quiere y por eso mínimo quiere no sentir dolor. Porque la forma cien por ciento confiable por simpleza no existe y no hay en el presente. Como dijo el héroe de una película: “No es necesario buscar un gato negro en una habitación oscura. Especialmente si ella no está allí ‘.

Por supuesto, cada intento de suicidio tiene su propia causa personal y muy triste. Y si un adulto con mayor frecuencia encuentra una salida a esta situación, entonces el niño a menudo no puede hacerlo. Y un adulto que es capaz de comprender los problemas de los niños y brindar asistencia para resolverlos, por regla general, no está cerca y cuando lo está, no comprende al 100% el sentimiento en exceso de agobio del niño que lo atormenta.

Y en este caso para el niño, la única forma de salir de una situación difícil e insoluble para él parece ser la muerte, porque es la única opción de salir de su sufrimiento, no porque sea débil, sino porque tanto dolor y sufrimiento no le deja ver y lo único que ve a su fin de dolor, es el suicidio.

Y la juventud moderna sin todo esto vive con un síndrome de doble personalidad, creando un prototipo de su “Yo” ideal en las redes sociales como Facebook, Instagram, entre otras. Llegar a ese punto, en las vastas extensiones de la gran Web, como me gustaría ser; como lo que su familia y amigos quieren ver; en realidad abandonando la vida real favoreciendo a una personalidad falsa y una persona falsa creada a base de lo que uno desearía ser, pero en la vida real no es. Los adultos rara vez controlan en qué sitios están viendo sus hijos, que supuestamente está ocupado viendo videos o en Facebook siendo que muchas veces de ahí viene el problema o la causa.

Junto con esto, un número cada vez mayor de adolescentes, que se sienten solos de corazón, se unen en sitios que conectan a otras personas que se sienten igual y comunican su malestar, un claro ejemplo de temas en general es el sitio web popular llamado “4chan”.

Su libertad radica en sitios donde no son juzgados ni maltratados por su pensamiento complejo ante la sociedad que no los entiende debido a que su obstáculo a la libertad es la misma sociedad.

La gente se ha estado matando durante miles de años seguidos. Y al igual que ahora, estaban buscando al borde de la vida y la muerte a alguien que pueda entenderlos en este momento. Como regla, las personas rara vez profundizan en la esencia del problema presente en la situación que los atormenta, no escuchan la oración que ciega la visión de la víctima potencial. Básicamente, una persona es ignorada con un conjunto estándar de frases: ‘más positivo’, ‘sonríe más y no pienses en cosas tristes’ y otros.

Pero si la víctima de la sociedad piensa de una manera seria sobre el suicidio, no le interesan los comentarios tan insensibles de los demás sin entenderle de la vida de los demás y de sus sentimientos, para esa persona es importante hacer otra cosa mucho más sensible e importante: lidiar si decide vivir y tratar de superar su sufrimiento o acabarlo con la muerte. Compartir con su entorno pensamientos y sentimientos sobre un resultado inevitable significa, en el mejor de los casos, escuchar palabras sobre la locura, y la mayoría de las veces, sin la comprensión en la vida real o en la Web de otros, una persona muere.

Hay muchas soluciones factibles para poder ayudar a una persona con depresión en el borde del suicidio, algunas son:

• Crear más programas gratitos de prevención de suicido.
• Entender completamente a la persona y poder hacerla sentir especial, única y con importancia hacia las personas.
• Ser una sociedad más compresiva en los sentimientos de los demás y en especial a los que tienen problemas emocionales.
• Poder identificar los síntomas de indicios de posible suicidio.
• Información responsable por parte de los medios de comunicación.

Por fortuna en la sociedad actual hay una minoría que ha oprimido a las personas que mueven los hilos y han creado programas que tiene que ver con leyes de dar servicio de atención emocional a personas con posibles intenciones del suicidio además de la ayuda en su prevención.

Conclusión

La sociedad en la mayoría es hipócrita, una completa falsedad de persona, pero hay una minoría con un poco de sensibilidad y compresión en el tema. Siempre va a haber una opresión hacia los sentimientos de los demás que eso haga que la misma persona sienta ese sentimiento de tristeza, pero en la sociedad también hay amigos y familiares de los cuales se pueden apoyar y contar como se sienten para poder disminuir o erradicar el problema.