Prohibición de la Casa Deportiva e Ilegal a las Especies en Extinción en Colombia
Introducción
Esta investigación se enfoca a un análisis reflexivo sobre la caza ilegal-furtiva o deportiva, las consecuencias que esto genera y los derechos internacionales que garantizan la protección a especies en vía de extinción. El problema que se genera debido a las personas que se lucran por este tipo de actividad.
La caza furtiva
La caza furtiva no posee ningún permiso para realizarse, esto genera problemas frente a la protección de los animales y las especies en vía de extinción. Por lo general esta caza no se hace con las medidas necesarias, y las armas que se utilizan no están reglamentadas, lo cual da inicio a una clase de delincuencia que generalmente en los países menos desarrollados o reglamentados es casi imposible de controlar.
La futilidad que generan los delincuentes por la venta ilegal del marfil, y el lucro que genera esta actividad Para la producción de objetos tallados se ha usado marfil procedente de muy diversos animales. Antes de la aparición del plástico era muy usado como material de las teclas de los pianos y bolas de billar, botones y artículos ornamentales de joyería.
Matriz
El derecho internacional de los derechos humanos es un sistema de normas internacionales destinadas a proteger y promover los derechos humanos de todas las personas. Estos derechos, que son inherentes a todos los seres humanos, cualquiera que sea su nacionalidad, lugar de residencia, sexo, origen nacional o étnico, color de la piel, religión, idioma o cualquier otra condición, están interrelacionados y son interdependientes e indivisibles. A menudo están expresados en el derecho y garantizados por él, en forma de tratados, normas de derecho internacional consuetudinario, principios generales del derecho e instrumentos de derecho incipiente de carácter no vinculante. Los derechos humanos entrañan tanto derechos como obligaciones. El derecho internacional de los derechos humanos establece las obligaciones de los Estados de actuar de determinada manera o abstenerse de determinados actos, con el fin de promover y proteger los derechos humanos y las libertades fundamentales de personas o grupos.
El derecho internacional humanitario es un conjunto de normas que, por razones humanitarias, aspiran a limitar los efectos del conflicto armado. Protege a las personas que no participan o han dejado de participar en las hostilidades y restringe los medios y métodos de combate. Su alcance es, por lo tanto, limitado ratione materiae a las situaciones de conflicto armado. El derecho internacional humanitario es parte del ius in bello (el derecho sobre el modo en que puede usarse la fuerza), que tiene que ser diferenciado y separado del ius ad bellum (el derecho sobre la legitimidad del uso de la fuerza). El uso de la fuerza está prohibido por la Carta de las Naciones Unidas. Ahora bien, todas las partes en los conflictos armados, independientemente de que su causa esté o no justificada, tienen la misma obligación de aplicar el derecho internacional humanitario. Esta igualdad entre las partes beligerantes también permite establecer una distinción fundamental entre un conflicto armado, al que se aplica el derecho internacional humanitario, y un delito, al que solo se aplican la legislación penal y las normas de derechos humanos sobre el mantenimiento del orden público.
Durante años se sostuvo que la diferencia entre las normas internacionales de derechos humanos y el derecho internacional humanitario era que las primeras se aplicaban en tiempo de paz y el segundo en situaciones de conflicto armado
Problema
La mayoría de los países se han propuesto la creación de leyes para detener o limitar la caza de especies en peligro de extinción. De hecho existe un tratado conocido como la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres (CITES), que ha sido firmado por la mayoría de los países.
Aunque muchos animales están protegidos contra la caza, eso no detiene a algunas personas inescrupulosas que practican la caza ilegal de los mismos. Esto se conoce como la caza furtiva y en muchos lugares representa una actividad lucrativa gracias a los altos precios que tienen los cuernos, el marfil y la piel de estos animales protegidos, entre otras partes del cuerpo.
La Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres (CITES), los niveles de caza furtiva alcanzan los niveles más altos de la década. Desde 1989 no se había registrado tantos decomisos de marfil. Estas conclusiones, basadas principalmente en datos presentados por gobiernos, se presentarán en la 62a reunión del Comité Permanente de la CITES que se llevará a cabo en Ginebra del 23 al 27 de Julio de 2012. (convencion sobre el comercio internacional de especies amenazadas de fauna y flora silvestres., 2016)
En el informe se analizan los datos del programa de la CITES sobre la supervisión de la matanza ilegal de elefantes, los datos de la UICN sobre el estado de las poblaciones de elefantes, el sistema de información sobre el comercio de elefantes administrado por TRAFFIC, y la base de datos de la CITES del comercio administrada por el Centro Mundial de Vigilancia de la Conservación del PNUMA, el PNUMA-CMCM.
Estas fuentes fidedignas de información han mostrado una relación muy estrecha entre las tendencias de caza furtiva y los decomisos a gran escala de marfil al detectar esencialmente los mismos patrones en cada eslabón que compone la cadena del comercio ilícito del marfil.
El tráfico ilegal de animales genera a nivel mundial un negocio que supera los 10.000 de dólares’, denunciaba el pasado noviembre la Secretaria de Estado de Estados Unidos, Hillary Clinton, que reconocía que en los últimos años ‘el mercado negro de animales es más organizado, más lucrativo, más extendido y más peligroso que nunca’. (brandoli, 2012)
La numerosa caza furtiva a la que se enfrentan todos los parques supera con creces los números de la caza reglada. El problema es que el límite entre lo legal y lo ilegal es demasiado fino. Muchas reservas de caza se ven obligadas a cazar animales prohibidos por la competencia.
Objetivos
Se dice que esta problemática también genera que algunos cacen para comer, pero ese no es el problema, se trata de sólo una pieza por semana para paliar el hambre, especialmente en temporada seca que el campo no produce nada, como es evidente en Colombia que las etnias que aun habitan en nuestro territorio lo practiquen, la caza para poder alimentarse. El problema son las mafias que cazan kilos de carne que luego venden en el mercado negro. Según un estudio en national geographic existen más de 800 mil especies en riesgo debido a la caza deportiva.
Y la caza como deporte que en Colombia ha generado gran devastación a las especies que son protegidas, enunciando los estudios internacionales y tratados, en este país empieza el estudio para la prohibición de la caza deportiva y surge la pregunta de investigación:
¿Puede la caza deportiva ser la responsable de que cada día se genere más la extinción de especies protegidas en Colombia?
Frente a este problema se abre un debate del que la abogada Andrea Delgado y el abogado Ricardo Ordoñez hablan: Delgado dijo que en Colombia debe eliminarse completamente el riesgo que corren los animales debido a la actividad del humano. Fue enfática en que el Estado debe educar y concientizar a los ciudadanos sobre el sentir y el sufrimiento de los animales para poner fin a prácticas que los usen para la diversión de las personas. Argumentó que el ser humano se ha convertido en una plaga para los demás individuos con los que cohabita, puesto que -según ella- la conducta de tortura sí aplica para los animales usados por el hombre para sus necesidades.
Por su parte, Ordóñez argumentó que el camino de la prohibición de la caza deportiva no es el camino correcto para buscar proteger a los animales, pues -para él- la prohibición de cualquier actividad no reduce su acción, sino que incrementa la ilegalidad. Señaló que los cazadores deportivos son los principales defensores de la conservación de las especies, dado que si los animales que son objeto de cacería se ponen en vía de extinción, eso afectará una actividad con la que se siente a gusto. Puntualizó que esa práctica tiene un porcentaje muy reducido en Colombia, por lo cual una prohibición no causaría ningún efecto positivo a la hora de proteger a los animales. (radio, 2019).
Prohibición
Una demanda interpuesta por Laura Juliana Santacoloma, que busca prohibir esa práctica por reducir a los animales a un “mero negocio”. Laura Juliana Santacoloma Méndez, quien alega que la caza deportiva desconoce los principios de dignidad humana, solidaridad y prevalencia del interés general. Y afirma que con esta se reducen a los animales a un “mero negocio”. “En el marco del límite de los derechos que le serían propios a los animales de existir y no sufrir sin razones moralmente injustificadas, la caza deportiva implica un abuso de derechos”, Lo que genero un debate y un proceso expuesto ante la Corte Constitucional, para tomar la decisión sobre si se permite la caza deportiva o no, tendrá en cuenta también la posición de la Federación Colombiana de Tiro y Caza, organización que defiende la práctica. José Ignacio Lombana Sierra Vicepresidente Ejecutivo de la Federación, considera que el problema es cuando la caza se hace sin regulación.
Dice que por el contrario la caza genera beneficios: “En la caza, bien de control, de fomento, o bien deportiva justamente tiene unos beneficios importantísimos para el medio ambiente, toda vez que contribuimos al control, al equilibrio de los ecosistemas y es lo que lleva inclusive a que especies, que en algún momento pueden convertirse en plagas, no acaben con otro tipo de especies, o incluso que el hombre tenga que recurrir a unos métodos de control indiscriminados”. (caracol radio, 2019)
Además de esta intervención la Corte tendrá en cuenta los dos conceptos del Gobierno: el del actual que pide prohibir esta práctica y el procurador general de la nación argumenta que, “matar a un animal por recreación es desconocer los progresos alcanzados en materia de protección del ecosistema e ignorar nuestro deber de proteger a los animales como seres vivos y no como objetos”. Fernando Carrillo sentó su posición y le dijo a la Corte que no hay una justificación válida para la caza deportiva. En su concepto, “es imperioso que se retiren del ordenamiento jurídico las normas demandadas, que permiten la muerte, tortura y mutilación de los animales exclusivamente para recrear al ser humano”.
Frente a esto el Ministerio de Ambiente defiende la caza deportiva ante la Corte Constitucional y argumenta que Su aval y la existencia de áreas específicas para cazar se encuentran en el Estatuto de Protección Animal de 1989 y en el Decreto Ley 2811 de 1974, que fueron demandados. Entre los elementos que tiene el alto tribunal para fallar está un concepto del ministerio de Ambiente que asegura que esta práctica no pone en riesgo a la fauna silvestre. Y otro de la Agencia Jurídica del Estado que defiende el derecho a cazar.
La Corte asegura que su decisión obedece a que el Decreto Ley 2811 de 1974 y el Estatuto de Protección Animal de 1989 van en contra de la protección del medio ambiente. Con siete votos a favor y dos en contra, falló a favor de la medida que entrará en vigencia en un año.
Justificación
La polémica está servida porque quienes practican esta actividad consideran que la caza deportiva no debe prohibirse, sino regularse. Sin embargo, ambientalistas y autoridades piensan lo contrario: la decisión del Tribunal Constitucional es acertada porque controla la caza ilegal de animales.
En Barranquilla unas 40 personas hacen parte de la Federación Colombiana de Tiro y Caza deportiva, un club que reúne a expertos tiradores, quienes consideran que la práctica tiene fines deportivos, pero también tiene consideraciones como “el control biológico de las especies”. (JIMÉNEZ, 2019)
Amparados en el Código Nacional de Recursos Naturales Renovables y de Protección al Medio Ambiente, muchos cazadores del país le han dado por años viabilidad a la práctica, respaldados por el capítulo 2 del artículo 252, que hace referencia a la misma.
La caza deportiva es la que se hace como recreación y ejercicio, sin otra finalidad que su realización misma.
En esto las sociedades protectoras de los animales intervinieron ante la Corte Constitucional para que le dijera no más a la caza deportiva e ilegal. El presidente de la Corte Constitucional, Alejandro Linares, anunció que queda sin efectos la caza deportiva en el territorio nacional. Dicha decisión empezará a regir un año después de proferida dicha providencia, esto con el fin de que las entidades dedicadas a tal práctica se acoplen. (Loaiz, 2019).
Análisis
En Colombia este tipo de caza deportiva se prestaba para el tráfico de fauna colombiana que muchas veces era protegido como el Cóndor de los Andes por La comercialización de sus plumas y la cacería son algunas de sus principales amenazas. Y es de las 71 especies en Colombia en vía de extinción.
También está la Iguana El principal motivo del tráfico ilegal en el caso de esta especie, es la alta demanda de sus huevos para algunas temporadas del año.
Esto es lo que busca prevenir la corte constitucional la extinción de estos animales que están en riego, en Colombia existen leyes que prohíben la cacería y el tráfico ilegal de las especies tales como: el Estatuto Nacional de Protección de los Animales (Ley 84 de 1989), Decreto 1076 de 2015, por medio del cual se expide el Decreto Único.
Reglamentario del Sector Ambiente y Desarrollo Sostenible, Código Nacional de Recursos Naturales Renovables y de Protección al Medio Ambiente (Decreto 2811 de 1974).
Conclusión
Con este problema que se evidenciaba en Colombia y la ley que empezara a regir a partir del año próximo se busca que la caza ilegal, el tráfico y las mafias que se lucran de esta actividad se Reduzca. Protegiendo así la fauna y la flora que este país nos ofrece.
Se evidencia que este tipo de actividades incrementaban la violencia, la inseguridad y la extinción de distintas especies. La caza deportiva fue prohibida porque no generaba un aporte, al contrario se dedicaban a acabar con especies resguardándose en la ley y lo que estaba establecido, sin llegar a dar un aporte a estos ecosistemas que afectaban.
La caza ilegal y el tráfico de especies si es la responsable de la extinción de especies protegidas, es la causante del deterioro de los ecosistemas y no está reglamentada, ni permitida en ningún estado dado que se existen varios tratados que la prohíben.
Referencias
- brandoli, j. (2012). El multimillonario negocio de la caza ilegal. el mundo.
- caracol radio. (2019). “El problema no es la caza deportiva, es la caza ilegal”. caracol radio.
- convencion sobre el comercio internacional de especies amenazadas de fauna y flora silvestres. (2016). indices de caza furtiva. 1.
- JIMÉNEZ, L. (2019). Caza deportiva, en la mira de aficionados y ambientalistas. El Heraldo .
- Loaiz, A. V. (2019). La Corte Constitucional le dijo no más a la caza deportiva en Colombia. asuntos legales .
- radio, w. (04 de febrero de 2019). ¿Debe ser prohibida la caza deportiva en Colombia? w radio .