Quiero Ser Como Beckham Y Estereotipos Vigentes En El Siglo XXI
En la película, Quiero ser como Beckham la directora aborda con humor diversas cuestiones que tienen un gran impacto en las sociedades occidentales. Así, por ejemplo, entran en juego asuntos como la construcción de la identidad nacional e individual, la integración, los fenómenos de exclusión y la autoexclusión de minorías, los choques generacionales, etc. La película hace una crítica a los estereotipos aún vigentes en el S. XXI y a la discriminación de cualquier tipo.
Entre los temas principales que se critican cabe destacar, en primer lugar, los roles de género a los que están sometidas las protagonistas y que las condicionan para conseguir su sueño de jugadoras profesionales. El género y sus exigencias interculturales es uno de los factores claves de la discriminación en la actualidad y así se expone en la película. Como ejemplo de la exigencia social de los roles de género, encontramos al principio de la película una escena ilustrativa de este fenómeno en la que aparece la protagonista británica de compras con su madre. Esta es presionada para comprarse sujetadores que realzan el pecho, en lugar de comprar sujetadores deportivos que es lo que a ella realmente le gusta y que según su madre es de mujer poco femenina. Además, a lo largo de la película también se muestran los múltiples intentos de la madre porque su hija se deje el fútbol porque tal y como ella dice a ningún hombre le gusta eso y si sigue jugando a fútbol acabará “soltera como la única que era deportista de las Spice girls”. La madre de la protagonista hindú también insiste constantemente a lo largo de la película en que se deje el fútbol porque a su futura suegra no le gustaría que la mujer de su hijo, en lugar de hacerle la comida esté persiguiendo a un balón y dándole patadas. Estos roles de género ejercen una presión en las personas que deben adaptarse a ellos y ceñirse exclusivamente en cumplir aquello propio de su rol, es decir no salirse de las pautas establecidas socialmente. Consecuentemente, creo que esta presión social debe desaparecer mediante la abolición de los cánones y los roles de géneros anclados en nuestra sociedad. Un cambio es necesario para acabar con la sumisión a los roles de género y eso radica en nuestra mentalidad, debemos aprender a no clasificar las cosas basándonos en el género “más adecuado” para ellas.
Además, a lo largo de la película se presentan otras situaciones de discriminación pero, en este caso, causadas por la nacionalidad y la religión. La mayoría de los personajes relatan algún momento en el que han sufrido discriminación debido a su etnia y sus orígenes, como es el caso del padre de Jess que cuenta la discriminación y las burlas que sufrió cuando no se le dejó jugar al cricket en Inglaterra por ser indio. En mi opinión, en la coexistencia se encuentra la sabiduría. Aprender a convivir con otras culturas nos aporta múltiples beneficios mutuos, aprender nuevas tradiciones, lengua o costumbres. Para acabar con las situaciones de discriminación se debe reflexionar y llegar a la conclusión de que la convivencia entre culturas aporta un gran conocimiento general.
Como otro tema importante, aún presente en las sociedades occidentales, se muestran los conflictos de identidad en los cuales la protagonista, de descendencia india, debe enfrentarse a una cultura dominante, como es la inglesa, y a su vez también debe enfrentarse a las generaciones anteriores a la suya, como es la de su madre. La protagonista debe adaptarse al nuevo país y a las nuevas costumbres pero sin olvidar su país de origen. Desde mi punto de vista, tal y como hemos leído en el libro de Identidades Asesinas, la identidad no son el país de origen, la lengua natal ni la religión a la que una persona pertenece sino que identidad es el conjunto de vivencias que una persona ha vivido a los largos de su vida adquiriendo así un parte de sí misma en cada situación. Así pues, la protagonista tiene una identidad marcada por su origen hindú y por sus experiencias en Inglaterra, y por tanto, se adapta al nuevo país sin abandonar sus raíces.
Por último, se nombra un choque generacional que se puede observar en la admiración de la protagonista india hacia su religión a la vez que hacia David Beckham. Este choque generacional nos muestra que adaptarse a un nuevo estilo de vida, en este caso más occidental, no supone olvidar las tradiciones. En mi opinión debe haber un correcto equilibrio entre la tradición y las nuevas costumbres. Consecuentemente, no debemos quedarnos estancados en el pasado por miedo a abrirnos a nuevas experiencias, pero esto también significa que no por abrirnos y adaptarnos a nuevos cambios sociales, olvidemos nuestras tradiciones originarias.
Sin ninguna duda recomendaría la película debido a la crítica que hace de los estereotipos aún vigentes en el S. XXI y la consecuente reflexión que nos obliga a hacer acerca de nuestra sociedad. Temas abordados en la película deben ser cambiados como por ejemplo, los roles de género, la discriminación, los conflictos de identidad y el choque generacional. La clave de una correcta coexistencia se encuentra en la solución a estos problemas.